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Para lograr soluciones climáticas reales, cambiar el comportamiento y desarrollar tecnología no es suficiente, dice Michal Nachmany, fundador y director ejecutivo de la organización ambiental sin fines de lucro Climate Policy Radar. «Mucho de esto es política», dice.
Necesitamos mejores leyes, políticas y regulaciones, además de exigir responsabilidades a los responsables políticos y a las empresas, porque no están haciendo un trabajo suficientemente bueno, sostiene. El problema es que comprender qué políticas existen y cuáles funcionan y cuáles no, es una tarea enorme. Por lo tanto, el objetivo de Climate Policy Radar es utilizar la IA para comprender el creciente espacio de políticas climáticas, para ayudar a garantizar que las leyes y políticas futuras estén basadas en evidencia.
«Reunimos todas las leyes, políticas, estrategias y planes de acción climáticos que cada gobierno de este mundo tiene en sus libros», explica. «Hay 470.000 páginas allí, o 4,5 millones de párrafos».
Analizarlos utilizando sistemas de inteligencia artificial en lenguaje general no es suficiente, dice Nachmany. «Obtienen fuentes de datos no creíbles, alucinan, hacen todo tipo de cosas que realmente no queremos incluir en nuestra toma de decisiones», dice. «Por eso utilizamos inteligencia aumentada, utilizando la experiencia humana para enseñar a las máquinas».
Como organización sin fines de lucro, Climate Policy Radar ofrece sus datos constantemente actualizados de forma gratuita y cuenta con una comunidad de profesionales disponibles para colaborar con cualquiera que trabaje con los tomadores de decisiones o busque influir en ellos.
«Las personas que más necesitan los datos son las que menos pueden pagar por ellos», afirma. «Entonces, hay un elemento de justicia climática realmente fuerte en esto». Invita a todo aquel que quiera colaborar a ponerse en contacto con ella: “Estamos apenas al comienzo de nuestro viaje”.
Este artículo aparece en la edición de marzo/abril de 2024 de la revista WIRED UK.
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