La última edición de Microsoft Edge está configurada para incluir una nueva función de almacenamiento en caché de disco que, según la compañía, proporcionará una gran mejora en el rendimiento y minimizará su espacio de almacenamiento.

Los navegadores utilizan un caché de disco para almacenar recursos obtenidos de la web para que se pueda acceder a ellos rápidamente más tarde si es necesario; cuanto mayor sea el tamaño de la memoria caché, mayor será la probabilidad de que el recurso que se solicita se pueda obtener del disco, lo que suele ser más rápido que obtener el mismo recurso de la red.