{"id":1012952,"date":"2024-02-17T01:47:08","date_gmt":"2024-02-17T01:47:08","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/mi-hijo-no-juega-videojuegos-como-yo-y-finalmente-estoy-de-acuerdo-con-eso\/"},"modified":"2024-02-17T01:47:11","modified_gmt":"2024-02-17T01:47:11","slug":"mi-hijo-no-juega-videojuegos-como-yo-y-finalmente-estoy-de-acuerdo-con-eso","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/mi-hijo-no-juega-videojuegos-como-yo-y-finalmente-estoy-de-acuerdo-con-eso\/","title":{"rendered":"Mi hijo no juega videojuegos como yo y finalmente estoy de acuerdo con eso"},"content":{"rendered":"
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Todos los fines de semana, mi hijo se despierta y baja corriendo las escaleras para jugar videojuegos. A veces, me uno a \u00e9l si no me qued\u00e9 despierto hasta tarde jugando videojuegos la noche anterior. Un fin de semana reciente, subi\u00f3 las escaleras saltando incre\u00edblemente emocionado porque hab\u00eda vencido La leyenda de Zelda: Aliento de lo salvaje<\/em>. <\/p>\n Esto me confundi\u00f3 por un momento, y no s\u00f3lo porque \u00e9l hab\u00eda saltado sobre m\u00ed mientras dorm\u00eda. La \u00faltima vez que me inform\u00f3 sobre su progreso (el d\u00eda anterior), acababa de vencer a una segunda Bestia Divina y tal vez complet\u00f3 la mitad de los Santuarios. No hab\u00eda manera de que hubiera ganado el juego en una hora esa ma\u00f1ana. Pero, como \u00e9l lo explic\u00f3, hab\u00eda ido al Castillo de Hyrule y derrot\u00f3 a Calamity Ganon, y ahora el juego estaba completo. \u00abEso no es realmente ganar el juego\u00bb, quer\u00eda decir. Mi esposa, una madre experta, incluso cuando la despertaba aturdida un ni\u00f1o entusiasmado por algo que a ella no le interesaba en absoluto, vio la emoci\u00f3n de mi hijo y me detuvo con una mirada. <\/p>\n Quer\u00eda informarle que quedaba mucho por hacer en el juego y que apenas hab\u00eda completado ninguna de las misiones secundarias esparcidas por Hyrule. Quer\u00eda explicarle que no hab\u00eda pisado cada cent\u00edmetro del mundo, que la l\u00ednea del Camino del H\u00e9roe no convert\u00eda su mapa mundial en un lago verde gigante. Quer\u00eda informarle que ten\u00eda dos Bestias Divinas m\u00e1s que derrotar, secretos que descubrir y aventuras que vivir. Quer\u00eda decirle que bajara las escaleras y ganara el juego. Sin embargo, \u00e9l <\/em>quer\u00eda empezar a jugar L\u00e1grimas del Reino<\/em>. <\/p>\n Esta historia es s\u00f3lo el ejemplo m\u00e1s reciente de un conflicto entre mi hijo y yo que ha estado latente desde que me vio por primera vez jugar videojuegos con suficiente capacidad cognitiva para entender lo que estaba pasando. No jugamos videojuegos de la misma manera y me ha llevado varios a\u00f1os comprender este hecho.<\/p>\n