\n
Seis ejemplos de por qu\u00e9 han sido condenados recientemente ciudadanos del cant\u00f3n de Z\u00farich.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n\n <\/div>
\n\n
A un suizo parece no gustarle su cuidador: en la nota de sanci\u00f3n se enumeran varios insultos que le dirigi\u00f3 en trozos de papel dejados en los buzones.<\/h2>\n Karin Hofer \/ NZZ<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\nTambi\u00e9n es relativamente f\u00e1cil para los llamados \u201cciudadanos normales\u201d convertirse en delincuentes, como lo demuestra una selecci\u00f3n de \u00f3rdenes criminales del cant\u00f3n de Z\u00farich, a las que tuvo acceso el NZZ. Se trata de casos bastante menores, pero las fiscal\u00edas, cr\u00f3nicamente sobrecargadas, todav\u00eda tuvieron que ocuparse de ellos. <\/p>\n
Todas estas \u00f3rdenes de castigo ahora son legalmente vinculantes. Las acusaciones a menudo constan s\u00f3lo de unas pocas frases. Por lo tanto, el trasfondo dram\u00e1tico detr\u00e1s de los casos s\u00f3lo puede adivinarse: <\/p>\n
Presentado como \u201cpropietario de M\u00fcller-L\u00fcdenscheid Rechtsanw\u00e4lte\u201d.<\/span><\/h2>\nUn agente inmobiliario de 25 a\u00f1os (llam\u00e9moslo M\u00fcller-L\u00fcdenscheid por razones de seguridad personal) muri\u00f3 a causa de una llamada telef\u00f3nica: durante la llamada se hizo pasar por \u00abel Sr. M\u00fcller-L\u00fcdenscheid, propietario de M\u00fcller-L\u00fcdenscheid Rechtsanw\u00e4lte\u00bb. \u00ab, aunque no era propietario de la empresa M\u00fcller-L\u00fcdenscheid Rechtsanw\u00e4lte, todav\u00eda ten\u00eda licencia para ejercer la abogac\u00eda.<\/p>\n
La Fiscal\u00eda de Limmattal\/Albis reconoci\u00f3 esto como una infracci\u00f3n de la Ley federal contra la competencia desleal (UWG), concretamente porque, seg\u00fan el texto de la ley, el acusado utiliz\u00f3 \u00abt\u00edtulos o puestos de trabajo inapropiados\u00bb que \u00abpueden dar la aparici\u00f3n de distinciones o habilidades especiales\u00bb.<\/p>\n
El acusado fue condenado a una multa condicional de 30 d\u00edas de multa de 100 francos cada uno y a pagar 1.600 francos en concepto de honorarios por las diligencias preliminares.<\/p>\n
220.000 euros falsificados procedentes de Rusia<\/span><\/h2>\nUn iran\u00ed aut\u00f3nomo de 37 a\u00f1os realiz\u00f3 un v\u00eddeo publicitario para su GmbH. Para crear una impresi\u00f3n visual especial, obviamente necesitaba una gran cantidad de billetes. Encarg\u00f3 a Rusia billetes de euro falsos por valor de 220.000 euros a trav\u00e9s de un sitio web y pag\u00f3 por ellos 300 euros (reales), env\u00edo incluido. De hecho, le enviaron la partitura. <\/p>\n
Debido al art\u00edculo legal \u201cImitaci\u00f3n de billetes, monedas o fichas oficiales sin intenci\u00f3n de falsificaci\u00f3n\u201d, el hombre de 37 a\u00f1os fue condenado a una multa condicional de 60 tasas diarias de 130 francos (7.800 francos) cada una, con un per\u00edodo de prueba de dos a\u00f1os. Debe pagar una multa de 300 francos y 800 francos de honorarios. Los billetes falsos incautados fueron confiscados y destruidos.<\/p>\n
Multas por colgar lenguaje soez<\/span><\/h2>\nUn suizo de 53 a\u00f1os fue condenado por la fiscal\u00eda de Winterthur\/Unterland por insultos: imprimi\u00f3 unas cincuenta hojas con insultos y las peg\u00f3 en la puerta y en los buzones de su conserje. La orden de castigo es una larga lista de innumerables malas palabras escritas en los trozos de papel: \u201cTotsch\u201d, \u201cHabasch\u201d, \u201cVollhorst\u201d, \u201cJuftsack\u201d, \u201cHackfresse\u201d, \u201cSackface\u201d, \u201cSchleimscheisser\u201d, \u201c Schweinepriest\u201d y \u201cPiss clavel\u201d son los t\u00e9rminos m\u00e1s inofensivos.<\/p>\n
El hombre de 53 a\u00f1os fue condenado a una multa condicional de 20 d\u00edas de 140 francos (2.800 francos) y una multa de 600 francos. Tambi\u00e9n debe pagar 800 francos en concepto de honorarios por el procedimiento preliminar.<\/p>\n