{"id":1053141,"date":"2024-03-16T13:43:15","date_gmt":"2024-03-16T13:43:15","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/resena-de-civil-war-cine-inolvidable-si-tienes-las-agallas-para-verlo\/"},"modified":"2024-03-16T13:43:18","modified_gmt":"2024-03-16T13:43:18","slug":"resena-de-civil-war-cine-inolvidable-si-tienes-las-agallas-para-verlo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/resena-de-civil-war-cine-inolvidable-si-tienes-las-agallas-para-verlo\/","title":{"rendered":"Rese\u00f1a de Civil War: cine inolvidable si tienes las agallas para verlo"},"content":{"rendered":"


\n<\/p>\n

\n

Lee es de un material m\u00e1s duro. Simplemente quiere documentar la ca\u00edda de un imperio con la misma mirada imparcial que perfeccion\u00f3 mientras enfocaba la violencia sectaria e imperial en Medio Oriente y \u00c1frica. Sin embargo, mantiene suficiente alma como para hacer una mueca de dolor cuando Joel deja que un fot\u00f3grafo novato, el dolorosamente joven Jesse (Cailee Spaeny), la acompa\u00f1e. Jesse idolatra a Lee y la leyenda que ha cultivado en el frente, pero el rostro fresco de Jesse delata lo loca que estar\u00e1 cuando comiencen a encontrar cuerpos colgados de lavaderos de autos y campos de exterminio en la tierra que John Denver alguna vez apod\u00f3 \u201cmam\u00e1 de la monta\u00f1a\u201d. \u00bb Sin embargo, todos est\u00e1n cortados por el mismo patr\u00f3n y, al igual que su mentor, New York Times<\/em> periodista Sammy (Stephen McKinley Henderson), no pueden quedarse sentados en la todav\u00eda humeante anarqu\u00eda de la ciudad de Nueva York cuando se desarrolla una batalla real en las afueras de Charlottesville. As\u00ed que conducen hacia el sur.<\/p>\n

Es una elecci\u00f3n astuta por parte de Garland hacer que su imaginaci\u00f3n de otra guerra civil estadounidense se centre no en la causa del conflicto, o incluso en c\u00f3mo se realizaron los primeros disparos, sino en sus \u00faltimos y desali\u00f1ados d\u00edas. Evita gran parte de la exposici\u00f3n, incluso la todav\u00eda desconcertante informaci\u00f3n de que California y Texas han unido fuerzas para derrocar al gobierno. Sin embargo, la escasez de antecedentes juega a favor de la pel\u00edcula. Como Garland ya ha insinuado a la prensa, es inquietantemente f\u00e1cil para cualquier espectador completar los detalles de lo que ocurri\u00f3 entre hoy y el ma\u00f1ana de esta pel\u00edcula; y evadiendo los \u201cc\u00f3mo\u201d y \u201cpor qu\u00e9\u201d pol\u00edticos de su escenario, Guerra civil<\/em> es capaz de analizar casi cl\u00ednicamente su ficci\u00f3n especulativa con la banalidad de un libro de estilo de AP.<\/p>\n

La violencia que ocurre a lo largo de la pel\u00edcula, tanto repentina como aleatoriamente, es espantosa y real. Como la mayor\u00eda de las pel\u00edculas de guerra modernas realizadas en los \u00faltimos 25 a\u00f1os, Garland y el director de fotograf\u00eda Rob Hardy utilizan la fotograf\u00eda port\u00e1til para darle a la matanza un tacto de trinchera. Sin embargo, Garland modifica ese est\u00e1ndar spielbergiano al mantener la mayor parte de la violencia en planos amplios, claros y limpios. Cuando un estadounidense se desangra en un suelo de cemento sucio, la agon\u00eda congelada por la c\u00e1mara de Jesse podr\u00eda haber venido del \u00e1lbum de recortes del fot\u00f3grafo de la guerra de Vietnam Eddie Adams, y el posterior asesinato por venganza de prisioneros de guerra capturados ciertamente hace eco de la ejecuci\u00f3n del presunto oficial del Viet Cong Nguy\u1ec5n V\u0103n L\u00e9m en un Calle Saig\u00f3n.<\/p>\n

El acorde que Garland llama la atenci\u00f3n no es sutil, pero se manifiesta con la urgencia de una campana de carill\u00f3n. As\u00ed es como se ver\u00eda la secesi\u00f3n, la desuni\u00f3n y finalmente la guerra en Estados Unidos, y es tan feo como una mancha roja que se acumula debajo de una pila de cuerpos. Qui\u00e9nes eran esos estadounidenses y qu\u00e9 diferencias podr\u00edan haber tenido nunca ser\u00e1n sabidos ni por el p\u00fablico ni por las aves carro\u00f1eras a punto de darse un fest\u00edn.<\/p>\n

El punto est\u00e1 planteado brutalmente. Lo que es m\u00e1s sorprendente es hasta qu\u00e9 punto la pel\u00edcula se convierte en una carta de amor para los periodistas, en particular los corresponsales de guerra. Al estructurar la pel\u00edcula desde su punto de vista, Garland ha creado una pel\u00edcula que podr\u00eda desarrollarse en casi cualquier estado colapsado. Tambi\u00e9n enaltece una profesi\u00f3n que ha tenido mejores d\u00edas. Esto se ejemplifica mejor en la actuaci\u00f3n taciturna de Dunst. Minimizando cada gesto y aparentemente desechando cada l\u00ednea escasa que le han dado, la actriz encarna silenciosamente el tan notable cinismo de un fotoperiodista que ha visto c\u00f3mo se hac\u00edan demasiadas salchichas, y que en su caso involucraban sangre y tripas reales. Sin embargo, su inadvertida seriedad y esperanza de algo mejor, aunque s\u00f3lo sea captada a trav\u00e9s de una mirada cautelosa hacia un protegido no deseado, le da a la pel\u00edcula su destello de alma.<\/p>\n

Ese destello se convertir\u00e1 en fuego antes de que termine la guerra.<\/p>\n<\/p><\/div>\n


\n
Source link-27 <\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Lee es de un material m\u00e1s duro. Simplemente quiere documentar la ca\u00edda de un imperio con la misma mirada imparcial que perfeccion\u00f3 mientras enfocaba la violencia sectaria e imperial en…<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":1053142,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[123],"tags":[42623,2895,4484,14314,246,107,7008,8591,17075,2581],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1053141"}],"collection":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=1053141"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1053141\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":1053143,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1053141\/revisions\/1053143"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/1053142"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=1053141"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=1053141"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=1053141"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}