{"id":1053434,"date":"2024-03-16T19:21:58","date_gmt":"2024-03-16T19:21:58","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/comentario-invitado-escabullendose-en-lugar-de-mantenerse-firmes-las-democracias-occidentales-estan-practicando-una-vez-mas-los-patrones-de-comportamiento-de-la-politica-de-apaciguamiento-de-los-an\/"},"modified":"2024-03-16T19:22:00","modified_gmt":"2024-03-16T19:22:00","slug":"comentario-invitado-escabullendose-en-lugar-de-mantenerse-firmes-las-democracias-occidentales-estan-practicando-una-vez-mas-los-patrones-de-comportamiento-de-la-politica-de-apaciguamiento-de-los-an","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/comentario-invitado-escabullendose-en-lugar-de-mantenerse-firmes-las-democracias-occidentales-estan-practicando-una-vez-mas-los-patrones-de-comportamiento-de-la-politica-de-apaciguamiento-de-los-an\/","title":{"rendered":"COMENTARIO INVITADO – Escabull\u00e9ndose en lugar de mantenerse firmes: las democracias occidentales est\u00e1n practicando una vez m\u00e1s los patrones de comportamiento de la pol\u00edtica de apaciguamiento de los a\u00f1os 1930"},"content":{"rendered":"


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La guerra de agresi\u00f3n de Putin y el terrorismo de Hamas han tomado a Occidente por sorpresa. Existe una tradici\u00f3n de subestimar a los agresores totalitarios, lo que plantea la cuesti\u00f3n de si existe una tendencia estructural de las democracias a apaciguar.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Si Ucrania, despu\u00e9s de m\u00e1s de dos a\u00f1os de resistencia heroica, ya no fuera capaz de resistir la creciente presi\u00f3n de agresi\u00f3n del agresor ruso, ser\u00eda el resultado catastr\u00f3fico de un nuevo fracaso hist\u00f3rico de las democracias occidentales, con consecuencias igualmente devastadoras para aquellas de la pol\u00edtica de apaciguamiento de los a\u00f1os treinta.<\/p>\n

Desde el comienzo de la guerra de agresi\u00f3n rusa contra toda Ucrania, Occidente ha hecho esfuerzos considerables para apoyar financieramente y con equipamiento militar al pa\u00eds invadido. Pero retuvo los sistemas de armas que Ucrania necesitaba con urgencia y entreg\u00f3 el equipo militar prometido demasiado tarde, en una cantidad demasiado peque\u00f1a o no lo entreg\u00f3 en absoluto. Esto permiti\u00f3 a los invasores regenerarse despu\u00e9s de severos reveses iniciales y formar nuevas oleadas de ataques.<\/p>\n

Detr\u00e1s de esta omisi\u00f3n occidental estaba el falso c\u00e1lculo de que la energ\u00eda agresiva de Rusia tarde o temprano se agotar\u00eda ante la resistencia ucraniana y que entonces el Kremlin tendr\u00eda que mostrarse dispuesto a llegar a un acuerdo. Esta falta de reconocimiento del verdadero alcance del deseo de destrucci\u00f3n de Rusia tiene una historia larga y fatal. A m\u00e1s tardar, con el comienzo de la agresi\u00f3n rusa contra Ucrania en 2014, Occidente deber\u00eda haberse dado cuenta de que el Estado criminal de Putin no es susceptible de racionalidad y, por tanto, no puede ser un \u00absocio\u00bb en pol\u00edtica econ\u00f3mica o de seguridad. Pero como esto no sucedi\u00f3, los l\u00edderes occidentales no estaban en gran medida preparados cuando el Kremlin realmente se puso serio con su campa\u00f1a genocida de aniquilaci\u00f3n contra Ucrania en 2022.<\/p>\n

Miedo y admiraci\u00f3n<\/span><\/h2>\n

El mundo democr\u00e1tico tambi\u00e9n fue tomado por sorpresa por la masacre de Ham\u00e1s el 7 de octubre, que cont\u00f3 con el respaldo de la Rep\u00fablica Isl\u00e1mica de Ir\u00e1n. As\u00ed como los planes imperiales de reorganizaci\u00f3n mundial de los gobernantes de Mosc\u00fa han sido descartados durante mucho tiempo como ret\u00f3rica propagand\u00edstica vac\u00eda, la gente en Europa en particular se neg\u00f3 a tomar la ideolog\u00eda extremista apocal\u00edptica y los anuncios de aniquilaci\u00f3n del r\u00e9gimen de Teher\u00e1n, aliado de Mosc\u00fa, y sus tropas terroristas subsidiarias contra Israel en su palabra.<\/p>\n

As\u00ed, las democracias occidentales volvieron a caer en los patrones de comportamiento de la pol\u00edtica de apaciguamiento de los a\u00f1os treinta. La historia del apaciguamiento y la congraciaci\u00f3n con reg\u00edmenes autoritarios agresivos no comenz\u00f3 simplemente con el ascenso de Hitler al poder. La dictadura de Benito Mussolini estuvo idealizada en las democracias occidentales durante mucho tiempo, incluso en la clase media burguesa, alimentada por el miedo a la revoluci\u00f3n comunista, pero tambi\u00e9n porque partes considerables de las propias elites occidentales coqueteaban con una soluci\u00f3n autoritaria a los conflictos internos de sus pa\u00edses. sociedades.<\/p>\n

La priorizaci\u00f3n de las ventajas econ\u00f3micas de corto plazo sobre la moralidad democr\u00e1tica supuestamente \u201cno mundana\u201d crea un relativismo de valores.<\/p><\/blockquote>\n

Pero la moderaci\u00f3n occidental no s\u00f3lo existi\u00f3 contra el fascismo y el nacionalsocialismo: tambi\u00e9n se practic\u00f3 desde el principio contra la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica. Despu\u00e9s de que Gran Breta\u00f1a ya hab\u00eda \u201cnormalizado\u201d sus relaciones con Mosc\u00fa, a principios de la d\u00e9cada de 1930 aument\u00f3 la presi\u00f3n de empresarios influyentes sobre el gobierno de Estados Unidos para allanar el camino para relaciones comerciales lucrativas con el Estado sovi\u00e9tico. La gente estaba muy feliz de creer las garant\u00edas de Stalin de que ya no persegu\u00eda intenciones revolucionarias mundiales y deseaba sinceramente el comercio pac\u00edfico con el mundo capitalista.<\/p>\n

Cuando el periodista brit\u00e1nico Gareth Jones revel\u00f3 la verdad sobre el Holodomor, la hambruna sovi\u00e9tica en Ucrania en 1932-33, los gobiernos de las principales democracias occidentales la descartaron como propaganda de atrocidades que podr\u00eda perturbar el proceso de acercamiento con Mosc\u00fa. El silencio occidental permiti\u00f3 a los dirigentes sovi\u00e9ticos negar y encubrir este crimen genocida durante muchas d\u00e9cadas.<\/p>\n

Dada esta larga tradici\u00f3n de subestimar y encubrir a los agresores totalitarios, surge la pregunta de si existe una tendencia estructural de las democracias a apaciguar. De hecho, hay una variedad de factores que hacen que las sociedades liberales sean vulnerables a retirarse de poderes autoritarios agresivos y a autoenga\u00f1arse sobre sus verdaderas intenciones.<\/p>\n

En primer lugar, est\u00e1n las premisas de una econom\u00eda libre, cuyo desarrollo requiere mercados abiertos y un comercio mundial lo m\u00e1s ilimitado posible. Sin embargo, para contener a los agresores autoritarios, se deben aceptar restricciones en las relaciones econ\u00f3micas, como sanciones. As\u00ed pues, parece que las necesidades del mercado y las m\u00e1ximas \u00e9ticas de la democracia entran en conflicto. Pero si se mira m\u00e1s de cerca, esta oposici\u00f3n resulta ser de corto plazo. Porque las inversiones en Estados con reg\u00edmenes arbitrarios pueden de repente convertirse en un desastre, como lo demuestra ahora el amplio colapso del \u00abnegocio ruso\u00bb como resultado de la guerra de agresi\u00f3n rusa.<\/p>\n

Comprensi\u00f3n para los verdugos<\/span><\/h2>\n

La priorizaci\u00f3n de las ventajas econ\u00f3micas de corto plazo sobre la moralidad democr\u00e1tica supuestamente \u201cno mundana\u201d a menudo resulta en un relativismo de valores, que postula que \u201cnuestros\u201d est\u00e1ndares normativos no deben \u201cimponerse\u201d a las culturas no occidentales. Este argumento, que aparentemente muestra respeto por la diversidad cultural, es utilizado a menudo por l\u00edderes empresariales cuando en realidad est\u00e1n interesados \u200b\u200ben relaciones comerciales sin obst\u00e1culos con los despotismos.<\/p>\n

Parad\u00f3jicamente, este relativismo cultural, que camufla la b\u00fasqueda de ganancias, se refleja en fuerzas que persiguen motivos opuestos. El examen autocr\u00edtico de los cr\u00edmenes del colonialismo europeo es esencial para las democracias occidentales modernas. Pero cuando los anticapitalistas y \u201cposcolonialistas\u201d de izquierda exculpan a los reg\u00edmenes asesinos del llamado \u201csur global\u201d se\u00f1alando cr\u00edmenes occidentales pasados, dan la vuelta a las lecciones de la opresi\u00f3n colonial.<\/p>\n

Esta actitud es sorprendentemente similar a la de los principales pol\u00edticos occidentales de la d\u00e9cada de 1930 hacia la Alemania nazi. Entendieron el revanchismo de Hitler porque Alemania hab\u00eda sido profundamente \u00abhumillada\u00bb por el Tratado de Versalles. De manera similar, hoy las brutales pol\u00edticas imperialistas del r\u00e9gimen chino se ven bajo una luz m\u00e1s suave al se\u00f1alar la antigua humillaci\u00f3n de China a manos de las potencias coloniales europeas.<\/p>\n

Otra fortaleza de las democracias liberales, que se convierte en una debilidad en la confrontaci\u00f3n con el autoritarismo, es su justificado aborrecimiento de la guerra. Esto da como resultado una tendencia hacia el pacifismo, que en realidad es la conclusi\u00f3n l\u00f3gica de la visi\u00f3n liberal de desterrar la guerra como una reliquia anterior a la Ilustraci\u00f3n de las relaciones interestatales. Por muy honorable que sea una aut\u00e9ntica actitud pacifista, s\u00f3lo puede mantenerse ignorando la cuesti\u00f3n de c\u00f3mo defenderse desarmado contra potencias que ven en la guerra, la aniquilaci\u00f3n y el sometimiento brutal de otros pueblos su verdadero prop\u00f3sito de existencia, como es el caso. con la Rusia de Putin lo es.<\/p>\n

\u201cPaz\u201d es m\u00e1s adecuada que casi cualquier otra palabra para referirse al abuso propagand\u00edstico por parte de fuerzas que tienen en mente algo completamente diferente a la regulaci\u00f3n no violenta de las condiciones humanas. En los primeros a\u00f1os de su gobierno, los nacionalsocialistas se hicieron pasar por fervientes defensores de la paz mundial para enga\u00f1ar al p\u00fablico occidental sobre sus verdaderas intenciones. Con su mentirosa ret\u00f3rica de \u201cpaz\u201d, la propaganda nazi logr\u00f3 adormecer a Occidente para que renunciara al rearme oportuno y permitir que Hitler llevara a cabo impunemente la anexi\u00f3n \u201cpac\u00edfica\u201d de Austria, los Sudetes y, en \u00faltima instancia, el resto de la Rep\u00fablica Checa. El anhelo, muy comprensible, de las democracias occidentales de mantener la paz llev\u00f3 a la negaci\u00f3n y, por tanto, al aumento del peligro real de guerra.<\/p>\n

Estrategia de nebulizaci\u00f3n<\/span><\/h2>\n

Incluso de manera m\u00e1s consistente que el r\u00e9gimen nazi, el totalitarismo sovi\u00e9tico hizo del llamado a la \u201cpaz\u201d la pieza central de su estrategia de ofuscaci\u00f3n ideol\u00f3gica. Ya sea el pacto con Hitler en 1939, con la consiguiente anexi\u00f3n del este de Polonia y los pa\u00edses b\u00e1lticos, o la represi\u00f3n de los levantamientos en Hungr\u00eda en 1956 y Praga en 1968, as\u00ed como la construcci\u00f3n del Muro de Berl\u00edn en 1961, los comunistas Los l\u00edderes siempre presentaron su pol\u00edtica violenta como \u201cmantenimiento de la paz\u201d, las supuestas oscuras intenciones de guerra del \u201cimperialismo\u201d occidental.<\/p>\n

En consecuencia, se infiltraron sistem\u00e1ticamente en los \u201cmovimientos de paz\u201d en las democracias occidentales durante la Guerra Fr\u00eda. Y en este sentido, los propagandistas de izquierda y derecha de Putin est\u00e1n especulando ahora, no sin \u00e9xito, sobre temores difusos a la guerra y reflejos pacifistas en gran parte del p\u00fablico democr\u00e1tico. Demag\u00f3gicamente culpan a Occidente de una inminente \u201cescalada\u201d en Ucrania y, por lo tanto, socavan la voluntad democr\u00e1tica de resistir la agresi\u00f3n genocida de Rusia.<\/p>\n

Para ello, explotan la libertad de expresi\u00f3n, que es uno de los activos m\u00e1s valiosos de una democracia liberal, pero al mismo tiempo su tal\u00f3n de Aquiles. Permite que los aparatos de desinformaci\u00f3n de los poderes autoritarios planten sus mensajes destructivos en sociedades democr\u00e1ticas bajo el pretexto de la libertad de expresi\u00f3n. Hasta ahora, la opini\u00f3n p\u00fablica del mundo libre se ha mostrado completamente inadecuada contra este abuso.<\/p>\n

Pero, \u00bfsignifica esto que las democracias pluralistas tienen que abandonar sus principios liberales para afirmarse frente a los poderes autocr\u00e1ticos? Por el contrario, la tendencia a ceder ante el nuevo autoritarismo se debe a la cada vez menor conciencia del valor inestimable y del poder superior de estos principios. Es importante volver a reflexionar intensamente sobre esta propia fuerza. Para defenderse del ataque del nuevo autoritarismo, las democracias liberales deben fortalecer masivamente no s\u00f3lo sus defensas militares sino tambi\u00e9n intelectuales.<\/p>\n

Richard Herzinger<\/strong> Vive como periodista independiente en Berl\u00edn. Su propio sitio web ha estado en l\u00ednea recientemente: \u201cHerzinger \u2013 mant\u00e9n estas verdades\u201d.<\/a><\/p>\n

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