El guardia de Ham\u00e1s le pregunt\u00f3 sobre su menstruaci\u00f3n.<\/span><\/h2>\nAmit Soussana proviene del Kibbutz Kfar Azza, situado cerca de la Franja de Gaza. El d\u00eda de la masacre de Ham\u00e1s, cuando los terroristas mataron a m\u00e1s de 1.200 personas y secuestraron a unas 250, alrededor de las 10 de la ma\u00f1ana unos 10 hombres armados irrumpieron en su casa. Los terroristas la golpearon, la arrastraron por un campo cercano y finalmente metieron a la mujer gravemente herida en un coche que la esperaba justo al otro lado de la frontera de Gaza. Despu\u00e9s de ser arrastrada a otro coche, unas horas m\u00e1s tarde se encontr\u00f3 en una habitaci\u00f3n de un apartamento privado. Sus dos guardias la encadenaron al marco de la ventana.<\/p>\n
Sin embargo, durante las dos semanas siguientes, Soussana s\u00f3lo estuvo custodiada por uno de los hombres. Su nombre era Mahoma. El hombre, a quien Soussana describe como gordo, de estatura media y con ca\u00edda del cabello, le preguntaba a menudo sobre su menstruaci\u00f3n y su vida sexual. Un d\u00eda Mahoma oblig\u00f3 a su prisionero a darse una ducha. Mientras Soussana se secaba, \u00e9l le orden\u00f3 que se quitara la toalla y se sentara en la esquina de la ba\u00f1era. Luego hubo un ataque.<\/p>\n
Soussana le dijo al New York Times que Mahoma la oblig\u00f3 a realizar un acto sexual. Ella no proporciona m\u00e1s detalles. Menos de 24 horas despu\u00e9s de su liberaci\u00f3n, Soussana denunci\u00f3 el ataque a dos m\u00e9dicos y un trabajador social. Seg\u00fan el New York Times, estas descripciones coincid\u00edan con lo que la mujer dijo al peri\u00f3dico.<\/p>\n
Al parecer, Mohammed lament\u00f3 el abuso. \u00abSoy una mala persona, una mala persona. Por favor, no se lo digas a Israel\u00bb, dijo despu\u00e9s, seg\u00fan Soussana. La mujer no denuncia m\u00e1s abusos mientras permanece como reh\u00e9n. Luego, Soussana fue retenida varias veces en distintos apartamentos en Gaza y poco antes de su liberaci\u00f3n tuvo que esperar en un t\u00fanel con otros rehenes, a unos 40 metros bajo tierra, como dijeron sus verdugos. Despu\u00e9s de 55 d\u00edas, Amit Soussana fue liberado como parte del alto el fuego entre Israel y Ham\u00e1s.<\/p>\n