{"id":1116894,"date":"2024-05-05T04:18:16","date_gmt":"2024-05-05T04:18:16","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/profunda-melancolia-por-la-torre-huerfana-se-necesita-berlin-tegel-los-detectives-de-la-escena-del-crimen-se-instalan-en-el-antiguo-aeropuerto\/"},"modified":"2024-05-05T04:18:18","modified_gmt":"2024-05-05T04:18:18","slug":"profunda-melancolia-por-la-torre-huerfana-se-necesita-berlin-tegel-los-detectives-de-la-escena-del-crimen-se-instalan-en-el-antiguo-aeropuerto","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/profunda-melancolia-por-la-torre-huerfana-se-necesita-berlin-tegel-los-detectives-de-la-escena-del-crimen-se-instalan-en-el-antiguo-aeropuerto\/","title":{"rendered":"Profunda melancol\u00eda por la torre hu\u00e9rfana: se necesita Berl\u00edn-Tegel. Los detectives de la \u201cescena del crimen\u201d se instalan en el antiguo aeropuerto"},"content":{"rendered":"


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El nuevo caso de Corinna Harfouch y Mark Waschke es bueno. En Lichtenberg aprender\u00e1 algo sobre la veneraci\u00f3n de los antepasados \u200b\u200bbudistas. Tambi\u00e9n sobre los disturbios de derecha del per\u00edodo posterior a la reunificaci\u00f3n, los llamados \u201ca\u00f1os del bate de b\u00e9isbol\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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El sendero conduce a la comunidad vietnamita: Bonard (Corinna Harfouch) y Robert Karow (Mark Waschke) en la Pagoda de Lichtenberg.<\/h2>\n

Gordon M\u00fchle \/ RBB<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

En Berl\u00edn todav\u00eda quedan demasiados lugares perdidos. Obras de construcci\u00f3n perpetua, desocupaciones, propiedades de uso temporal. Hay dos aeropuertos en desuso en el centro de la ciudad. En uno de ellos, en Tegel, el nuevo equipo \u00abTatort\u00bb se ha trasladado temporalmente a su lugar de trabajo, supuestamente a causa de la eliminaci\u00f3n del amianto en las oficinas.<\/p>\n

A Karow no le gusta eso. Aqu\u00ed podr\u00eda evitar f\u00e1cilmente al colega seco como un seco. Despu\u00e9s de pasar toda la noche, los dos detectives de Homicidios tienen espaciosos ba\u00f1os para visitas listos para lavar a sus gatos. El silencio se extiende por los pasillos. Una profunda melancol\u00eda se cierne sobre la torre hu\u00e9rfana; la c\u00e1mara est\u00e1 completamente enamorada de esta vista.<\/p>\n

Veinte pu\u00f1aladas<\/span><\/h2>\n

El segundo caso entre los dos (directora: Mira Thiel) vuelve a entregarse al extra\u00f1o encanto nost\u00e1lgico de la cultura del recuerdo. \u201cBienvenidos a los a\u00f1os noventa\u201d, le dice Robert Karow (Mark Waschke) a Susanne Bonard (Corinna Harfouch) mientras abre la puerta de entrada con m\u00faltiples controles de seguridad a la casa del asesinato, en una tranquila calle lateral de Lichtenberg, el antiguo distrito donde se encontraba la sede de la Stasi. fueron ubicados.<\/p>\n

Un hombre en su mejor momento fue encontrado muerto con la puerta del patio abierta: veinte pu\u00f1aladas. Lo que parece un robo emocional resulta ser el exterior de un escenario de terror incre\u00edble. La bodega es un matadero, el jard\u00edn es un cementerio. Adem\u00e1s de su perro, el Sr. Engler enterr\u00f3 all\u00ed a su \u00abmam\u00e1\u00bb (jerga oriental), as\u00ed como a dos ni\u00f1as, las cuidadoras vietnamitas de la anciana demente, a las que viol\u00f3, tortur\u00f3 y asesin\u00f3, una de ellas tras el otro. El tercero, aparentemente gravemente herido, est\u00e1 pr\u00f3fugo: el sospechoso.<\/p>\n

El sendero conduce a la bien organizada comunidad vietnamita de la capital. Se trata de ilustraci\u00f3n pol\u00edtica. Eso es bueno. Aprendes algo nuevo. Sobre los disturbios de derecha del per\u00edodo posterior a la reunificaci\u00f3n, los llamados \u201ca\u00f1os del bate de b\u00e9isbol\u201d, cuando los trabajadores subcontratados vietnamitas fueron acosados \u200b\u200ben la Casa de los Girasoles de Rostock y en otros lugares. Y sobre la pagoda Pho Da de Lichtenberg, situada ilegalmente en medio de un mercado asi\u00e1tico, que hace un a\u00f1o casi fue prohibida y derribada por la autoridad de construcci\u00f3n de Lichtenberg.<\/p>\n

Corrientes de sangre, orina, esperma.<\/span><\/h2>\n

Estas escenas de adoraci\u00f3n a los antepasados \u200b\u200bbudistas son aut\u00e9nticas. Los r\u00edos de sufrimiento, de sangre, de orina, de esperma de los que se habla, no pueden, gracias a Dios, ni verse ni olerse. La banda sonora es bastante aterradora, al igual que los ojos de Harfouch y su p\u00e1lida nariz antes de tener que abandonar la casa de sangre y tumbarse en el c\u00e9sped. Karow tampoco soporta ver los horrores cuando eval\u00faa los v\u00eddeos en los que Engler y compa\u00f1\u00eda han documentado meticulosamente sus perversiones. Aqu\u00ed se hace evidente por primera vez una peque\u00f1a similitud: Bonard se cae, Karow vomita.<\/p>\n

Lo que tambi\u00e9n tienen en com\u00fan es que a ambos les gusta hablar con citas literarias. \u201cSigue al conejo blanco\u201d, dice mientras ella se acerca a la puerta del doctor en Charlottenburg. Llama L\u00ea M\u00fcller, que como veterinario trata a veces a personas sin permiso de residencia. Dicho animal es demasiado bueno para ser verdad, reci\u00e9n secado con secador. Y ni siquiera kitsch. Pero merece la pena sonre\u00edr, como los ni\u00f1os vietnamitas vestidos de blanco que bailan al final para los comisarios en la pagoda.<\/p>\n

S\u00ed, una o dos veces la se\u00f1ora Bonard le sonr\u00ede al se\u00f1or Karow. En un momento dado, cuando el caso se est\u00e1 difundiendo, incluso dice algo citable: \u201cEl mal sigue siendo un poco m\u00e1s malvado de lo que piensas\u201d. Por eso a\u00fan no se han hecho amigos. Ser\u00eda pedir demasiado. Pero tampoco se aburren el uno con el otro.<\/p>\n

\u201cTatort\u201d de Berl\u00edn: \u201cEn el d\u00eda de las almas errantes\u201d. Domingo, 20:05 \/ 20:15, SRF 1 \/ ARD.<\/p>\n

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