{"id":161245,"date":"2022-09-12T16:01:13","date_gmt":"2022-09-12T16:01:13","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-montaje-bliss-de-ling-ma-revela-un-tipo-diferente-de-fantasia\/"},"modified":"2022-09-12T16:01:15","modified_gmt":"2022-09-12T16:01:15","slug":"el-montaje-bliss-de-ling-ma-revela-un-tipo-diferente-de-fantasia","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-montaje-bliss-de-ling-ma-revela-un-tipo-diferente-de-fantasia\/","title":{"rendered":"El montaje Bliss de Ling Ma revela un tipo diferente de fantas\u00eda"},"content":{"rendered":"


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La fantas\u00eda siempre ha<\/span> sido la provincia del ama de casa aburrida. Sobre el paso mon\u00f3tono de horas y d\u00edas, crea visiones escapistas que los lectores sabios saben que nunca se realizar\u00e1n. El so\u00f1ar, por supuesto, es el punto. En una vida desprovista de agencia significativa, estos desapegos moment\u00e1neos de la realidad ofrecen un placer necesario. La pregunta planteada por la colecci\u00f3n de historias especulativas de Ling Ma, Montaje de dicha<\/em>es: \u00bfCu\u00e1nto tiempo puede sostenerte realmente la fantas\u00eda?<\/p>\n

La colecci\u00f3n se abre con el ensue\u00f1o de un ama de casa. Una mujer vive en una mansi\u00f3n de m\u00faltiples alas de Los \u00c1ngeles con su esposo, el Sr. Moneybags, y sus dos hijos. Sus 100 exnovios tambi\u00e9n residen all\u00ed para hacerle compa\u00f1\u00eda durante el d\u00eda. Con dinero del marido, pasan las horas disfrutando de las diversiones bougie de la ciudad: Barney’s, LACMA, Moon Juice. El esposo, una coincidencia de conveniencia que se encuentra en LoweredExpectations.com, es un contorno en blanco que habla solo con signos de d\u00f3lar, pero dos de los exnovios de la mujer a\u00fan le recuerdan una emoci\u00f3n real. La encantadora idiosincrasia de uno, un amor joven, una vez la hizo re\u00edr; el abuso f\u00edsico del otro ha dejado una marca duradera, profunda como un hematoma en los huesos.<\/p>\n

La s\u00e1tira obvia de la historia de la clase adinerada de Los \u00c1ngeles es lo m\u00e1s cerca que Ma llega a exagerar para lograr un efecto. (Bueno, casi, otra historia detalla el sexo entre especies con un yeti). En otras partes de la colecci\u00f3n, sus tramas se alejan medio paso de la realidad, integrando elementos fant\u00e1sticos tan perfectamente que casi pasan desapercibidos. Nada en su lenguaje plano y sobrio indica que una droga que hace que el usuario sea invisible, o una condici\u00f3n de embarazo en la que un diminuto brazo fetal sale de la vagina de la madre, sea un alejamiento del universo conocido.<\/p>\n

Este estilo tenue es reconocible de Ruptura<\/em>, la novela debut m\u00e1s vendida de Ma en 2018 sobre una pandemia viral llamada Shen Fever que atrapa a aquellos a los que infecta en rutinas nost\u00e1lgicas. Dos a\u00f1os despu\u00e9s de su publicaci\u00f3n, el libro fue aclamado como prof\u00e9tico por sus astutas descripciones de una enfermedad global que se origin\u00f3 en China y el posterior caos pol\u00edtico. (La prohibici\u00f3n de viajar contra los asi\u00e1ticos es uno de esos detalles clarividentes). Pero Ruptura<\/em> no miraba hacia el futuro, sino que era una cr\u00edtica capitalista reiniciada con una pel\u00edcula de zombis para los millennials estadounidenses 10 a\u00f1os despu\u00e9s de Occupy, una generaci\u00f3n cuyo trabajo e identidades estaban siendo reclutados por corporaciones globales destructivas mientras sufr\u00edan de una conciencia paralizada de su propio, a veces voluntario, atrapamiento. Al final de la novela, su protagonista, Candace, est\u00e1 sola en un Chicago desierto, despojada de los modelos de vida que sus padres, su novio y su empleador alguna vez le brindaron. Se enfrenta a la perspectiva abrumadora, o emocionante, seg\u00fan se lea, de construir una vida moldeada completamente por sus propios deseos.<\/p>\n

Ruptura<\/em> sigui\u00f3 una tendencia en la ficci\u00f3n reciente de personajes femeninos que se mueven a trav\u00e9s de paisajes consumistas representados limpiamente con amortiguadores emocionales, ya sea demasiado hastiados, demasiado agotados o demasiado aburridos por la vida moderna para preocuparse por los sentimientos reales. Donde Ma difiere de la multitud es en el aprovechamiento de este sentimiento de alienaci\u00f3n para capturar la esquiva experiencia de ser asi\u00e1tico-estadounidense. los protagonistas de Montaje de dicha<\/em> son mujeres chino-estadounidenses de clase media que se asimilan f\u00e1cilmente a la sociedad blanca. (No todos los caracteres se identifican expl\u00edcitamente como chinos, pero tienen antecedentes an\u00e1logos). Para ellos, los efectos del racismo y de la diferencia racial son menos materiales que ps\u00edquicos. No est\u00e1n en posiciones de necesidad, pero tienen menos que sus amigos y parejas rom\u00e1nticas. Sus vidas, aunque decentes, han sido planificadas por sus padres y esposos y, como resultado, se sienten insatisfechas. Pero cu\u00e1les son sus deseos, exactamente, no pueden decirlo.<\/p>\n

Los personajes de Ma comparten un retiro emocional, como si estuvieran viendo sus propias vidas desde afuera de una ventana. El sentimiento puede ser familiar para los hijos de inmigrantes. En \u201cHoras de oficina\u201d, una profesora de cine refleja que sus padres, due\u00f1os de un restaurante que tomaron una segunda hipoteca sobre su casa para enviarla a la universidad, le hab\u00edan puesto el nombre de la institutriz aventurera de El sonido de la musica<\/em>Sin embargo, su vida tranquila la ha mantenido cerca de casa. \u201cSu posici\u00f3n predeterminada era la de un perro peleando en una esquina\u201d, escribe Ma. Aunque ha logrado sus ambiciones profesionales, lo hace con una sensaci\u00f3n de p\u00e9rdida, porque nunca han sido completamente suyas.<\/p>\n

\u201cTomorrow\u201d, una historia con un elenco astuto y absurdo, tiene lugar en una Am\u00e9rica del futuro cercano que ha sido severamente degradada en las clasificaciones internacionales. Eve, una empleada del gobierno de los EE. UU., regresa al pa\u00eds de origen de su familia con la esperanza de liberarse de una lealtad equivocada a Estados Unidos, un pa\u00eds que fue elegido por sus padres. \u201cYa no pod\u00eda concebir una vida m\u00e1s all\u00e1 de la que hab\u00edan imaginado para ella\u201d, escribe Ma. \u201cVenir aqu\u00ed, para ellos, hab\u00eda sido la gran ambici\u00f3n, el \u00fanico sue\u00f1o\u201d. Sin embargo, su esfuerzo por adoptar un nuevo hogar fracasa; ella siente que ya no pertenece all\u00e1<\/em> que aqu\u00ed<\/p>\n

En otras historias, Ma deja caer las referencias a la identidad asi\u00e1tico-estadounidense solo para seguir adelante sin completar el pensamiento. El exnovio de una mujer confiesa que su madre hace comentarios racistas sobre los asi\u00e1ticos; una mujer se pregunta si un antiguo compa\u00f1ero de clase la est\u00e1 confundiendo con otro estudiante asi\u00e1tico. Estos momentos breves y aislados se ubican en su mayor\u00eda al lado de la acci\u00f3n principal; algunos reciben un asentimiento tan breve que me pregunt\u00e9 por qu\u00e9 se incluyeron. Desafortunadamente, tales microagresiones no ofrecen espacio para que los personajes reaccionen m\u00e1s all\u00e1 de las formas predecibles, lo que termina aplast\u00e1ndolos a\u00fan m\u00e1s. A menudo, deseaba que los protagonistas de Ma emergieran en las historias en lugar de retirarse. Muchos de ellos se sienten como si estuvieran en G, la droga de la invisibilidad, el contorno de cada personaje sangrando indistintamente en el siguiente. Quer\u00eda ver a estas mujeres re\u00edr, sudar, llorar, gritar. Quer\u00eda verlos entrar completamente en sus cuerpos. Sin eso, lo que acaba siendo m\u00e1s notable en las fantas\u00edas de Montaje de dicha<\/em> no son los deseos particulares de los estadounidenses de origen asi\u00e1tico, sino su ausencia.<\/p>\n<\/div>\n


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