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James Bond ha estado al servicio de Su Majestad durante seis d\u00e9cadas. Los actores han cambiado con los tiempos. Todos deb\u00edan servir para una nueva imagen de los hombres.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n
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El primero: Sean Connery en 1964 en \u201cGoldfinger\u201d y en la cama con la chica Bond Shirley Eaton.<\/h2>\n Alianza de im\u00e1genes \/ Keystone<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n
La m\u00fasica, la introducci\u00f3n, la presentaci\u00f3n del h\u00e9roe ep\u00f3nimo con su apellido y nombre completo: todo esto es tan ic\u00f3nico que no necesita m\u00e1s descripci\u00f3n: en octubre de 1962, James Bond, interpretado por Sean Connery, se convirti\u00f3 en el agente secreto n\u00famero 007 en el cine. pantalla por primera vez En las \u00faltimas seis d\u00e9cadas, los tiempos han cambiado, al igual que los actores y la imagen de los hombres a los que deb\u00edan corresponder.<\/p>\n
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\u00abUn seductor agente secreto brit\u00e1nico es enviado a Jamaica para investigar la desaparici\u00f3n del agente brit\u00e1nico John Strangways y su secretaria\u00bb. Este es el logline, es decir, la descripci\u00f3n m\u00e1s corta, para \u00abDr. No\u00bb, la primera pel\u00edcula oficial de Bond. Una receta cuyos ingredientes duraron d\u00e9cadas: la irresistibilidad del h\u00e9roe del t\u00edtulo, hermosos escenarios y mujeres igualmente hermosas que a menudo tuvieron que ser rescatadas y con las que siempre se hizo el amor. Cada pocas d\u00e9cadas se han ajustado los ingredientes, un poco m\u00e1s de esto y menos de aquello. Siempre mirando a la respectiva fantas\u00eda masculina, al h\u00e9roe que las mujeres quisieran tener y los hombres quisieran ser.<\/p>\n
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El primer Bond echa una mano<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
Cuando el primer Bond lleg\u00f3 a los cines, hab\u00edan terminado dos guerras mundiales y las mujeres de muchos pa\u00edses luchaban por su influencia pol\u00edtica y econ\u00f3mica. El libro, escrito por el ex agente secreto brit\u00e1nico Ian Fleming, describi\u00f3 una figura que facilit\u00f3 las cosas a los hombres en esta \u00e9poca de auge capitalista: el lujo estaba al alcance de la mano y las mujeres eran criaturas de servicio en todos los aspectos. Pero el agente era lo suficientemente seductor y divertido como para seguir atrayendo a una audiencia femenina.<\/p>\n
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Tan seductor que la esposa de Fleming, Ann Charteris, describi\u00f3 sin rodeos los libros de Bond a sus amigos como \u00abpornograf\u00eda\u00bb. Pero Fleming, que para entonces llevaba mucho tiempo comprometido con una amante en Jamaica -la infidelidad era un h\u00e1bito en el que su esposa no era inferior en modo alguno- hab\u00eda tocado el nervio de la \u00e9poca. Su h\u00e9roe fue lo suficientemente exitoso como para convertirse en un \u00eddolo y lo suficientemente plano como para complacer un poco a todos.<\/p>\n
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Al Bond de Sean Connery le gusta dar palmadas en el trasero -el actor dijo en una entrevista que la violencia contra las mujeres est\u00e1 bien (de lo que m\u00e1s tarde se retract\u00f3 con pesar)- haciendo re\u00edr al p\u00fablico y alejando a las mujeres cuando, como dice en la pel\u00edcula, lo hace con \u00ablos hombres\u00bb. hablar\u00bb. Una especie de mecenas elegante, entonces, una figura paterna que es demasiado libre y egoc\u00e9ntrica para criar hijos propios.<\/p>\n
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George Lazenby en 1969 en On Her Majesty’s Secret Service, su primera y \u00fanica aparici\u00f3n como James Bond.<\/h2>\n La colecci\u00f3n Legacy \/ Imago<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n\n <\/div>
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Sir Roger Moore, representado aqu\u00ed en 1981 en un p\u00f3ster promocional de la serie 007, es el 007 con m\u00e1s a\u00f1os de servicio hasta la fecha, con siete pel\u00edculas oficiales de Bond.<\/h2>\n Artistas Unidos \/ Imago<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n
A Sean Connery le sigui\u00f3 George Lazenby, un Bond con sentimientos. Tantos que fueron suficientes para el amor verdadero y una boda. Pero eso no es lo que el mundo de 1969 realmente quer\u00eda ver: Bond domesticado por una mujer. Lazenby fue reemplazado por Roger Moore despu\u00e9s de una sola pel\u00edcula. Los hippies celebraban el amor, pero 007 seguir\u00eda siendo el sue\u00f1o de la burgues\u00eda.<\/p>\n
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Un Bond tiene que ser divertido<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
Moore, en privado un buen amigo de Connery y, seg\u00fan los rumores, el candidato preferido de Fleming desde el principio, volvi\u00f3 a encarrilar a 007: era inexpugnable, divertido y no le faltaban consignas sexistas. A diferencia de la d\u00e9cada de 1960, los pu\u00f1etazos ya no eran una expresi\u00f3n de masculinidad en la d\u00e9cada de 1970 y, en consecuencia, quedaron fuera del repertorio de Bond cuando se trata de mujeres.<\/p>\n
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Cuando Timothy Dalton, mucho m\u00e1s joven, sucedi\u00f3 al Bond Moore con m\u00e1s a\u00f1os de servicio hasta la fecha, los productores finalmente quisieron un cambio. Deber\u00eda ser m\u00e1s serio, el nuevo Bond, hacer menos bromas y mantener m\u00e1s distancia. Sin embargo, el p\u00fablico no quer\u00eda o\u00edr hablar de eso. Pas\u00f3 la d\u00e9cada de 1980, el Tel\u00f3n de Acero se movi\u00f3, el tiempo promet\u00eda paz y el mundo estaba a punto de ser un lugar mejor. Nadie quer\u00eda pagar por ver la seriedad de la vida en el cine. Despu\u00e9s de dos pel\u00edculas, la carrera de Dalton como Bond hab\u00eda terminado.<\/p>\n
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V\u00ednculo serio: Timothy Dalton en \u00abLicencia para matar\u00bb en 1989.<\/h2>\n Archivos Unidos \/ Imago<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n\n <\/div>
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Bond sin preocupaciones: Pierce Brosnan como James Bond en Tomorrow Never Dies en 1997.<\/h2>\n imagen<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n
Luego vino Pierce Brosnan, el hombre de sonrisa confiada, rasgos suaves, buenos modales y alma aparentemente imperturbable que encarn\u00f3 lo que se esperaba en la d\u00e9cada de 1990: todo estar\u00e1 bien.<\/p>\n
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Judi Denchs M llam\u00f3 a Brosnan un \u00abdinosaurio sexista, mis\u00f3gino, una reliquia de la Guerra Fr\u00eda\u00bb en \u00abGolden Eye\u00bb en 1995, pero la audiencia perdon\u00f3 uno u otro golpe, se permiti\u00f3 un poco de sexismo y un poco de racismo, un Un poco de risa Podr\u00edas, despu\u00e9s de todo, ahora que todo era solo la mitad de malo. Y as\u00ed, los cin\u00e9filos finalmente regresaron en masa para ver el Bond de Brosnan. Cuando no lo estaban haciendo en la misma medida, Brosnan, el hombre con la l\u00ednea de cabello perfecta, renunci\u00f3 para dar paso a Daniel Craig.<\/p>\n
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