Caballero<\/span>. Fisher se abalanz\u00f3 como reemplazo de Kevin Sumlin, quien ten\u00eda un s\u00f3lido historial de desarrollo de mariscales de campo en A&M, pero no pudo evitar que se transfirieran, lo que lo llev\u00f3 a la ruina. <\/p>\nFisher ha sido lo contrario de Sumlin. Sus proyectos de mariscal de campo desde que Jameis Winston llev\u00f3 a Florida State al t\u00edtulo nacional de 2013 han fracasado. James Foster, Zach Calzada y Haynes King se convirtieron en fallas de reclutamiento, pero eso es parte del juego. El revuelo en torno a A&M lleg\u00f3 a su cl\u00edmax con su reclamo de la clase de reclutamiento n\u00famero 1 de la naci\u00f3n en 2022. Desafortunadamente, esos reclutas siguen siendo solo ne\u00f3fitos que est\u00e1n vistiendo la camiseta roja o todav\u00eda est\u00e1n aprendiendo las cuerdas en su primera temporada de f\u00fatbol americano universitario. Connor Weigman, el mariscal de campo No. 2 en la Clase de 2022, no ver\u00e1 el campo hasta el pr\u00f3ximo oto\u00f1o. Despu\u00e9s del d\u00eda de la firma, Fisher incluso se comprometi\u00f3 con el mejor jugador de la Clase de 2023, Lebbeus Overton, quien se gradu\u00f3 un a\u00f1o antes y actualmente est\u00e1 en la camiseta roja.<\/p>\n
Hace cinco a\u00f1os, Fisher lleg\u00f3 a College Station y fue recibido por una banda en vivo, una alfombra roja y m\u00e1s pompa y circunstancia que un dignatario extranjero. Fisher no ha estado a la altura de esa entrada exagerada, pero a pesar de los reveses recientes, ha acumulado un porcentaje de victorias m\u00e1s alto que cualquier entrenador de los Aggies desde RCSlocum. As\u00ed que eso es algo.<\/p>\n
El impulso de los programas de despedir a los entrenadores una vez que se topan con algunos obst\u00e1culos es comprensible en una potencia como Alabama, UGA, Ohio State o USC. Los entrenadores de f\u00fatbol universitario contempor\u00e1neos tienen ventanas m\u00e1s peque\u00f1as que nunca. Tal vez demasiado corto y, a veces, puede resultar contraproducente y hacer que los programas retrocedan d\u00e9cadas. En la \u00faltima d\u00e9cada, los entrenadores Power 5 han pagado $ 530 millones en adquisiciones<\/a><\/span> a los entrenadores de f\u00fatbol americano universitario, seg\u00fan la Comisi\u00f3n Knight de Atletismo Intercolegial. Este n\u00famero ha crecido exponencialmente a lo largo de la d\u00e9cada. Entre 2017 y 2018, las adquisiciones anuales se duplicaron a $48,3 y $104,1 millones.<\/p>\nDel mismo modo, Harbaugh asumi\u00f3 el trabajo en su oprimida alma mater en 2014 despu\u00e9s de llevar a los San Francisco 49ers a campeonatos consecutivos de la NFC y al Super Bowl XLVII. En 2020, Michigan actu\u00f3 con cautela al optar por no comprar a Harbaugh y desde entonces gan\u00f3 17 de sus \u00faltimos 19 juegos. Todav\u00eda existe la posibilidad de que Fisher se estrelle y se queme tambi\u00e9n en 2023, pero incluso entonces vale la pena no incendiar $ 95 millones en un ala y rezar para que el pr\u00f3ximo tipo al que le arrojen millones se convierta en A&M en el perenne contendiente al t\u00edtulo que aspiran a ser.<\/p>\n<\/div>\n