\n<\/p>\n
En 1988, Bertolucci le dijo al Daily Telegraph que en realidad conoci\u00f3 a Leone durante una proyecci\u00f3n vespertina de \u00abEl bueno, el feo y el malo\u00bb durante el primer d\u00eda de la pel\u00edcula en los cines de Roma. Leone estaba en la cabina de proyecci\u00f3n, probablemente curioso por las reacciones de la audiencia, y reconoci\u00f3 a Bertolucci. Al d\u00eda siguiente, llam\u00f3 a Bertolucci, \u00e9l mismo un aclamado director, y le pregunt\u00f3 qu\u00e9 pensaba de la pel\u00edcula. Bertolucci le dijo a Leone que le gustaba la pel\u00edcula y luego le dio una explicaci\u00f3n sorprendente de por qu\u00e9:<\/p>\n
\u00abPor la forma en que filmas los culos de los caballos. La mayor\u00eda de los directores los filman de perfil o de frente, pero tienes esta maravillosa l\u00ednea de culos, un coro de culos. Muy pocos directores filman la parte de atr\u00e1s, que es menos ret\u00f3rica y rom\u00e1ntica\u00bb. . Uno de ellos es John Ford\u00bb.<\/p><\/blockquote>\n
Leone se hab\u00eda propuesto muy espec\u00edficamente hacer pel\u00edculas que refutaran la versi\u00f3n rom\u00e1ntica y esterilizada del Viejo Oeste y hab\u00eda sido influenciado por la pel\u00edcula menos sentimental de Ford, \u00abEl hombre que dispar\u00f3 a Liberty Valance\u00bb. Entonces, cuando Bertolucci explic\u00f3 por qu\u00e9 estaba tan enamorado del trabajo de Leone de una manera tan interesante, Leone supo que los dos ten\u00edan que colaborar. <\/p>\n<\/p><\/div>\n