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C\u00f3mo ve la di\u00e1spora local las protestas en Ir\u00e1n.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n
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\u00abTengo que alzar la voz\u00bb: la exiliada iran\u00ed Sadaf Sedighzadeh ha encontrado una conexi\u00f3n con la patria de sus padres a trav\u00e9s de las protestas en Ir\u00e1n.<\/h2>\n <\/p>\n<\/figcaption><\/figure>\n
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Mientras los velos arden en el pa\u00eds de origen de sus padres y miles toman las calles, Sadaf Sedighzadeh est\u00e1 sentada en un caf\u00e9 llamado \u00abLittle Freedom\u00bb y habla exactamente de eso: la libertad de sentarse aqu\u00ed y hablar de pol\u00edtica, sin velo. , sin mul\u00e1s , sin la polic\u00eda moral.<\/p>\n
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\u00abEsta libertad es un privilegio\u00bb, dice ella. \u00abY que lo tenga es en realidad una coincidencia\u00bb.<\/p>\n
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Porque la casualidad trajo a Sedighzadeh, ahora de 24 a\u00f1os, estudiante y camarera a tiempo parcial, a Suiza cuando ten\u00eda dos a\u00f1os. Sus padres decidieron emigrar a fines de la d\u00e9cada de 1990, en realidad quer\u00edan ir a Inglaterra, y luego se quedaron atrapados en la frontera suiza.<\/p>\n
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Eso fue en 2000, en ese momento el cambio pol\u00edtico parec\u00eda imposible en Ir\u00e1n, el pa\u00eds de los mul\u00e1s y el velo. Ahora, 22 a\u00f1os despu\u00e9s, las cosas se ven muy diferentes. Dirigido por mujeres, un pa\u00eds entero, viejos y j\u00f3venes, pobres y ricos, urbanos y rurales, se rebela contra sus tiranos.<\/p>\n
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Y la di\u00e1spora iran\u00ed en todo el mundo se permite lo que no se ha atrevido a hacer durante d\u00e9cadas: la esperanza.<\/p>\n
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Huy\u00f3 por el requisito del velo<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
\u00abCuando veo a las mujeres en Ir\u00e1n que est\u00e1n siendo acosadas y arrestadas, pienso: podr\u00eda ser yo\u00bb, dice Sedighzadeh. \u201cEs por eso que tengo que alzar la voz por ellos, incluso si eso significa que probablemente nunca m\u00e1s podr\u00e9 viajar a Ir\u00e1n bajo el r\u00e9gimen actual\u201d.<\/p>\n
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\u00abCasi nunca he llorado con mis padres en mi vida\u00bb, dice Sadaf Sedighzadeh. \u201cLa semana pasada, cuando habl\u00e1bamos de las protestas en Ir\u00e1n, lo hicimos\u201d.<\/h2>\n <\/p>\n<\/figcaption><\/figure>\n
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Las protestas en Ir\u00e1n fueron desencadenadas por la muerte de Mahsa Amini, de 22 a\u00f1os, quien fue arrestada por la brigada antivicio por llevar un pa\u00f1uelo en la cabeza de forma incorrecta y luego presuntamente golpeada hasta la muerte por agentes de polic\u00eda. En decenas de ciudades de todo el pa\u00eds, los manifestantes exigen el fin del velo obligatorio y la Rep\u00fablica Isl\u00e1mica.<\/p>\n
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O como dice Sedighzadeh: \u00ab<\/em>D L\u00fc\u00fct manos jodidas d ronroneo completo.<\/em>\u00bb<\/em><\/p>\n <\/p>\n
La di\u00e1spora iran\u00ed tambi\u00e9n ha tenido suficiente de los mul\u00e1s: muchos de sus miembros finalmente emigraron precisamente por esta raz\u00f3n. Los padres de Sadaf Sedighzadeh tambi\u00e9n: \u00abCuando le pregunt\u00e9 por primera vez a mi padre por qu\u00e9 huimos de Ir\u00e1n, dijo: ‘Para que no te obliguen a usar un velo’. Para que no te digan mentiras en la escuela. Para que tengas todas las oportunidades de la vida.’\u00bb<\/p>\n
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Desarraigados y asimilados<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
Llegar a Suiza no fue f\u00e1cil para la familia. El padre, que en realidad quer\u00eda terminar sus estudios de ingenier\u00eda, se convirti\u00f3 en taxista. La madre ganaba su dinero como trabajadora de cuidado de ni\u00f1os. Incluso cuando era ni\u00f1a, Sedighzadeh tuvo que traducir y responder cartas alemanas para sus padres.<\/p>\n
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\u00abTuve que crecer r\u00e1pido. A menudo deseaba poder crecer como mis amigos, m\u00e1s despreocupada, con los abuelos, sin ser siempre percibida como una extra\u00f1a. Pero hoy pienso: Todo eso tambi\u00e9n me ha hecho m\u00e1s fuerte.\u00bb<\/p>\n
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Le gustar\u00eda m\u00e1s apoyo para los manifestantes en Ir\u00e1n: Sadaf Sedighzadeh, nacido en Ir\u00e1n, creci\u00f3 en Suiza.<\/h2>\n <\/p>\n<\/figcaption><\/figure>\n
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Hoy los padres tienen su propia tienda donde venden aceitunas y antipasti. El propio Sedighzadeh lleg\u00f3 a la escuela secundaria y ahora estudia historia en Z\u00farich. Lleva una vida estudiantil completamente normal, con plazos estresantes, un presupuesto ajustado y un trabajo de medio tiempo en una pizzer\u00eda.<\/p>\n
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Y, sin embargo, dice que a veces se siente desarraigada, asimilada en esta Suiza, que en cierto modo es su hogar y en cierto modo no. Al comienzo de las protestas, ella escribi\u00f3 en una publicaci\u00f3n en Instagram:<\/p>\n
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\u00abEs oto\u00f1o y la casa de mis padres est\u00e1 en llamas. Es oto\u00f1o y todav\u00eda me cuesta llamar hogar a algo, pero s\u00e9 que tengo mucha familia que me quiere, a la que quiero mucho. Espero que lo est\u00e1s haciendo bien. Ojal\u00e1 mi farsi fuera mejor. Desear\u00eda que no hubiera pasado tanto tiempo desde mi \u00faltima visita a Ir\u00e1n\u00bb.<\/p>\n
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Por \u00faltimo, pero no menos importante, las protestas en Ir\u00e1n le dieron a Sadaf Sedighzadeh una conexi\u00f3n m\u00e1s fuerte con su segundo hogar. \u201cLa protesta nos ha unido a los iran\u00edes en Suiza\u201d, dice. \u201cRara vez me he sentido tan cerca de mi familia tampoco. Casi nunca he llorado con mis padres en mi vida. La semana pasada, cuando habl\u00e1bamos de las protestas, lo hicimos\u00bb.<\/p>\n
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Falta de apoyo<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
En Z\u00farich y Berna, cientos han estado tomando las calles todos los s\u00e1bados durante semanas en solidaridad con los iran\u00edes. Lo volver\u00e1n a hacer el pr\u00f3ximo s\u00e1bado: en Z\u00farich en el Rathausbr\u00fccke a partir de las 14:00 horas, en Berna en la Bundesplatz a partir de las 13:30 horas.<\/p>\n
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\u201cSi hay algo que deseo\u201d, dice Sedighzadeh, \u201ces que ya no me encuentre solo con iran\u00edes all\u00ed. Necesitamos el apoyo de los suizos\u201d.<\/p>\n
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Muchos en la di\u00e1spora iran\u00ed se quejan de la falta de apoyo en las publicaciones y conversaciones de las redes sociales. Esto ha estado creciendo en Suiza durante a\u00f1os. Hubo una primera ola de migraci\u00f3n en la d\u00e9cada de 1980 y una segunda comenz\u00f3 en 2010. Hoy en d\u00eda, alrededor de 6.500 personas con nacionalidad iran\u00ed viven en Suiza, m\u00e1s que nunca.<\/p>\n
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La di\u00e1spora iran\u00ed est\u00e1 creciendo<\/h3>\n Personas con ciudadan\u00eda iran\u00ed en Suiza, 1980-2021\n <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n
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Para muchos de ellos, las protestas actuales tienen que ver con todo: los derechos de las mujeres, la democracia, la justicia y el derrocamiento de un r\u00e9gimen que se interpone en el camino de todo.<\/p>\n
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\u00abSe trata de mucho m\u00e1s que el velo\u00bb, dice Sedighzadeh. \u00abEstamos viviendo algo hist\u00f3rico aqu\u00ed\u00bb.<\/p>\n
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Seg\u00fan grupos de derechos humanos, 185 personas han muerto a manos de las fuerzas de seguridad durante las protestas, incluidos menores de edad. Cientos resultaron heridos y miles arrestados.<\/p>\n
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Cerca – y sin embargo lejos<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
Sedighzadeh y sus compa\u00f1eros de armas presenciaron de cerca lo que estaba sucediendo en Ir\u00e1n a trav\u00e9s de Instagram, Whatsapp y Twitter. Y, sin embargo, no pueden luchar, no pueden estar all\u00ed. Las acciones en Suiza -manifestaciones de solidaridad, sentadas, publicaciones en las redes sociales- son tambi\u00e9n un remedio para la di\u00e1spora contra este sentimiento de impotencia.<\/p>\n
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\u201cCrec\u00ed aqu\u00ed, Suiza es mi hogar\u201d, dice Sedighzadeh. \u201cPero desde el comienzo de las protestas, ella tambi\u00e9n se ha convertido en una extra\u00f1a para m\u00ed. En Ir\u00e1n es al rev\u00e9s: me siento muy cerca de la gente de all\u00ed, aunque solo he estado all\u00ed tres veces en los \u00faltimos veinte a\u00f1os y apenas conozco a mi familia all\u00ed\u00bb.<\/p>\n
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\u00abEse podr\u00eda ser yo\u00bb: Eso es lo que piensa la ciudadana iran\u00ed-suiza Sadaf Sedighzadeh cuando ve a los manifestantes en Ir\u00e1n.<\/h2>\n <\/p>\n<\/figcaption><\/figure>\n
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Cuando era ni\u00f1a y sus padres le hablaban farsi, Sedighzadeh siempre respond\u00eda en alem\u00e1n suizo. Hoy responde en farsi. Pero nunca aprendi\u00f3 a escribir en el idioma de sus padres. Y as\u00ed hoy entiende lo que dicen los manifestantes iran\u00edes en los videos que se cuelgan a diario en las redes sociales.<\/p>\n
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Pero no puede responder en su lengua materna.<\/p>\n
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