Los cient\u00edficos se preguntan una vez m\u00e1s si ‘podr\u00edan’ y no si ‘deber\u00edan’: un equipo de investigadores de la \u00abstartup de computaci\u00f3n biol\u00f3gica\u00bb Cortical Labs ha ense\u00f1ado a las c\u00e9lulas cerebrales cultivadas en laboratorio a jugar Pong. Al distribuir alrededor de 800 000 neuronas a trav\u00e9s de un chip de silicio y dispararles se\u00f1ales el\u00e9ctricas, las c\u00e9lulas pudieron demostrar un \u00abaprendizaje aparente en cinco minutos\u00bb, seg\u00fan los cient\u00edficos involucrados. (se abre en una pesta\u00f1a nueva)<\/span>. As\u00ed es como comenz\u00f3 Deus Ex, ya sabes.<\/p>\n Los cient\u00edficos llaman a su conglomerado de silicio\/neuronas DishBrain. Y para ser claros, el proceso fue un poco m\u00e1s abstracto que simplemente colocar una placa de Petri frente a una copia de Video Olympics para el Atari 2600. DishBrain no respond\u00eda a las entradas visuales como t\u00fa o yo lo har\u00edamos, sino a una serie de se\u00f1ales el\u00e9ctricas alternas que simularon una ronda de Pong, que los investigadores luego convirtieron en una representaci\u00f3n visual del juego.<\/p>\n