Este final ca\u00f3tico de la velada es el ep\u00edlogo de una semana donde los debates sobre el presupuesto se han estancado d\u00eda a d\u00eda. Si bien a\u00fan quedan m\u00e1s de 2100 enmiendas por examinar, de las 3300 presentadas, la fatiga y el cansancio han comenzado a aparecer entre los parlamentarios despu\u00e9s de cinco d\u00edas y noches de debates. \u201cLlevamos aqu\u00ed desde el lunes por la noche. No podemos decir que vamos bien\u201d,<\/em> aliento, mientras iba a la sesi\u00f3n, la diputada (Les R\u00e9publicains, LR) del Jura Marie-Christine Dalloz.<\/p>\nSi todo el mundo reconoce que los debates son \u201cinteresante en sustancia\u201d<\/em>los diputados electos de la oposici\u00f3n temen ahora que el ritmo de las discusiones les impida debatir los temas m\u00e1s divisivos de este presupuesto. \u201cEsperamos que llegue hasta las enmiendas sobre \u201csuperganancias\u201d; tenemos mucho que decir\u201d<\/em>, avanza la diputada (LFI) de Seine-Maritime Alma Dufour. Pero para algunos cargos electos, este lento avance en los debates -se reanudar\u00e1n el lunes por la tarde- podr\u00eda permitir a Elisabeth Borne justificar el uso del 49,3 a principios de la pr\u00f3xima semana. Entonces, si el resultado parece inevitable, cada lado trata de pasar la responsabilidad.<\/p>\nLe queda por leer el 47,17% de este art\u00edculo. Lo siguiente es solo para suscriptores.<\/strong><\/p>\n<\/p><\/div>\n