{"id":263471,"date":"2022-10-28T16:13:24","date_gmt":"2022-10-28T16:13:24","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/esa-vez-que-bo-jackson-trato-de-matar-a-kevin-seitzer\/"},"modified":"2022-10-28T16:13:26","modified_gmt":"2022-10-28T16:13:26","slug":"esa-vez-que-bo-jackson-trato-de-matar-a-kevin-seitzer","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/esa-vez-que-bo-jackson-trato-de-matar-a-kevin-seitzer\/","title":{"rendered":"Esa vez que Bo Jackson trat\u00f3 de matar a Kevin Seitzer"},"content":{"rendered":"


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Imagen: punto de acceso<\/figcaption><\/p>\n<\/div>\n

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En el verano de 1986, Bo Jackson y Kevin Seitzer jugaron codo con codo en los Memphis Chicks, el equipo de campo Doble-A de Kansas City. Y aunque no hubo animosidad notable, los hombres, ahora compa\u00f1eros de equipo en los Reales de 1988, ten\u00edan poco en com\u00fan. A diferencia de Jackson, bendecido por los dioses para ser un atleta, Seitzer era el prototipo de peleador (tambi\u00e9n conocido como clich\u00e9): el chico blanco de una peque\u00f1a universidad (Eastern Illinois) que fue reclutado bastante tarde (und\u00e9cima ronda), pero vivi\u00f3 y muri\u00f3 en la jaula. . Tambi\u00e9n a diferencia de Jackson, Seitzer grap\u00f3 cada emoci\u00f3n, sentimiento y opini\u00f3n en su frente. Durante su temporada de novato, por ejemplo, la ciudad natal de Seitzer, Middletown, Illinois, plane\u00f3 organizar un desfile en su honor, hasta que Seitzer dej\u00f3 en claro que no le gustaba su ciudad natal, Middletown, Illinois. \u201cDudo que alguna vez tengan un d\u00eda de Kevin Seitzer\u201d, dijo, m\u00e1s amenaza que reacci\u00f3n.<\/p>\n

Seitzer era descarado. Alto. Desagradable. Si ten\u00edas una espinilla en la nariz, te lo dec\u00eda. Si te tiraste un pedo, \u00e9l fue el primero en anunciarlo. \u201cEra un mosquito\u201d, dijo Danny Tartabull, el jardinero. \u201cYa sabes, la abeja ocupada en la conversaci\u00f3n de todos. La mayor\u00eda de los chicos, antes de decir algo, tomaban la temperatura. Kevin no.<\/p>\n

\u201cKevin era molesto\u201d, dijo Jeff Montgomery, un joven relevista. \u201cNo es una mala persona. Pero empuj\u00f3 las cosas cuando era mejor alejarse\u201d.<\/p>\n

Debido a que en gran medida se mantuvo reservado, Jackson podr\u00eda ser dif\u00edcil de leer. \u00bfEras su amigo? \u00bfNo eras su amigo? A veces se le o\u00eda re\u00edr. Otras veces mostraba la severidad de un juez. Su tama\u00f1o lo hizo lo suficientemente intimidante como para que rara vez el Real lo desafiara. \u201cLa \u00fanica vez que realmente vi a alguien enfrentarse a Bo fue [pitcher] Steve Farr\u201d, dijo Montgomery. \u201cA Bo le hab\u00edan dicho que Steve estaba hablando mal de \u00e9l y que estaba enojado. Pero eso molest\u00f3 a Steve. Fue directo a Bo y le dijo: ‘\u00bfTienes alg\u00fan problema? Si es as\u00ed, v\u00e1monos, t\u00fa y yo. Bo podr\u00eda haber envuelto a Steve como un pretzel, pero no lo hizo porque respetaba a Steve por mantenerse firme\u201d.<\/p>\n

Sin embargo, Bo no respetaba a Seitzer. \u201cEs uno de los mayores lameculos que tenemos en el equipo\u201d, dijo Jackson. \u201c\u00c9l siempre pone su granito de arena. Y los muchachos dicen, ‘\u00bfQuieres cerrar la boca?’ \u201d<\/p>\n

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G\/O Media puede recibir una comisi\u00f3n<\/p>\n

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Un d\u00eda, a principios de la temporada de 1988, los Reales realizaron una pr\u00e1ctica de bateo antes del juego en el interior, en las jaulas debajo del estadio. El equipo se dividi\u00f3 en grupos de cuatro, y el cuarteto de Jackson inclu\u00eda a Seitzer, el receptor Ed Hearn y el jugador de cuadro Bill Pecota. \u201c[Kevin] siempre es el primero en la jaula\u201d, dijo Jackson. \u201cTiene que ser el primero en batear. As\u00ed que todos estamos all\u00ed atr\u00e1s, toma sus hacks y miro hacia abajo. no tengo nada [on] pero mis pantalones deslizantes.<\/p>\n

Jackson se retir\u00f3 a la casa club y se puso los pantalones cortos. Cuando regres\u00f3, Hearn estaba envolviendo sus swings. Al ver a Jackson, Seitzer salt\u00f3 teatralmente a la jaula.<\/p>\n

\u00abDisculpe\u00bb, dijo Jackson, \u00ab\u00bfpero no acaba de tomar su puto turno?\u00bb<\/p>\n

\u201cBueno\u201d, dijo Seitzer, \u201cdeber\u00edas haber estado aqu\u00ed. . .\u201d<\/p>\n

Tres o cuatro entrenadores, as\u00ed como un pu\u00f1ado de compa\u00f1eros de equipo, estaban parados cerca. Jackson pens\u00f3 que Seitzer estaba (como siempre) tratando de pavonearse. \u201cMira, hombre\u201d, dijo Jackson, \u201c\u00bfquieres cerrar la boca y largarte?\u201d.<\/p>\n

Luego entr\u00f3 en la jaula, donde Seitzer, a cent\u00edmetros de distancia, continu\u00f3 conferencia sobre protocolo. \u00abKevin le dijo a Bo: ‘Vete a la mierda, no estabas aqu\u00ed'\u00bb, dijo Brian Watley, un bateador de los Reales. \u00abDecirle ‘vete a la mierda’ a Bo parec\u00eda un poco arriesgado\u00bb.<\/p>\n

Jackson no estaba contento.<\/p>\n

\u00abMira, ser\u00e1 mejor que dejes de hablarme\u00bb, dijo.<\/p>\n

Seitzer sigui\u00f3 ladrando.<\/p>\n

\u201cEsta es la \u00faltima vez que te lo digo\u201d, dijo Jackson. \u00abNo me digas nada m\u00e1s, o te patear\u00e9 el trasero\u00bb.<\/p>\n

Seitzer sali\u00f3 de la jaula, Jackson agarr\u00f3 su Louisville Slugger, intervino y fall\u00f3 el primer lanzamiento. Seitzer se ri\u00f3.<\/p>\n

Jackson arroj\u00f3 su bate, camin\u00f3 hacia Seitzer (\u00abCon fuego en los ojos\u00bb, record\u00f3 Hearn), lo agarr\u00f3 por el cuello con la mano izquierda y empuj\u00f3 su cabeza contra la pared de concreto. Nadie con los Reales hab\u00eda sido testigo de este ayuno de metamorfosis de Bo. En cuesti\u00f3n de segundos, los ojos de Seitzer se pusieron en blanco.<\/p>\n

\u00ab\u00a1Mira, elegiste al hijo de puta equivocado para joderte en el d\u00eda equivocado!\u00bb Jackson grit\u00f3. \u201cMientras est\u00e9s respirando aire, \u00a1nunca me vuelvas a hablar as\u00ed! \u00a1Hijo de puta, te romper\u00e9 el cuello!\u201d<\/p>\n

Remont\u00e1ndose a su ni\u00f1ez en Bessemer, Alabama, la filosof\u00eda de Jackson sobre repartir patadas en el trasero era bastante simple: si alguien interviene para poner fin a las patadas en el trasero, las patadas en el trasero se intensifican. Mientras varios de los entrenadores y jugadores intentaban separar a los combatientes, el agarre de Jackson se hizo m\u00e1s fuerte.<\/p>\n

\u00ab\u00a1Bo!\u00bb grit\u00f3 Bob Schaefer, el entrenador de primera base. \u201c\u00a1Bo! Bo! \u00a1Lo dej\u00f3 ir! Bo!\u201d<\/p>\n

Jackson no estaba escuchando. Lo venci\u00f3 la rabia. Demasiado Kevin Seitzer. Sus brazos, record\u00f3 Schaefer, parec\u00edan estar creciendo en grosor por segundos. Las venas sobresal\u00edan de su b\u00edceps izquierdo.<\/p>\n

\u201cCuanto m\u00e1s apretaba, sus ojos se pon\u00edan en blanco\u201d, dijo Jackson. \u201cY cuanto m\u00e1s tiraban de m\u00ed, m\u00e1s r\u00edgido se pon\u00eda mi brazo\u201d.<\/p>\n

A estas alturas, los pies de Seitzer ya no tocaban el suelo. Su rostro era de un azul viol\u00e1ceo.<\/p>\n

\u201cEra como una pel\u00edcula de terror\u201d, dijo Tartabull. \u201cBo era Jason en el viernes 13, y Kevin era el chico del campamento a punto de ser asesinado\u201d.<\/p>\n

Finalmente, despu\u00e9s de lo que pareci\u00f3 una hora, Jackson solt\u00f3 su agarre, dej\u00f3 caer a Seitzer al suelo y regres\u00f3 a su casillero. Cogi\u00f3 un bate y golpe\u00f3 la pared m\u00e1s cercana. La madera y el yeso explotaron en peque\u00f1os pedazos.<\/p>\n

Mientras tanto, Seitzer fue escoltado a la sala de entrenamiento, donde descans\u00f3 con una bolsa de hielo colocada en el cuello. Un Jackson todav\u00eda humeante se levant\u00f3 de su taburete y entr\u00f3 en la habitaci\u00f3n, seguido por media docena de compa\u00f1eros de equipo curiosos\/aterrorizados\/muy entretenidos. Jackson se par\u00f3 sobre el maltrecho Seitzer.<\/p>\n

\u201cNo vuelvas a cruzarte conmigo nunca m\u00e1s\u201d, le sermone\u00f3. \u201cSi lo haces, no voy a darles a esos entrenadores el tiempo suficiente para agarrarme. Voy a romperte el culo, y lo digo desde el fondo de mi coraz\u00f3n. No vuelvas a cruzarte conmigo nunca m\u00e1s.<\/p>\n

Seitzer asinti\u00f3. Aproximadamente media hora m\u00e1s tarde, se acerc\u00f3 de puntillas a Jackson. La arrogancia se hab\u00eda ido. \u00abBo\u00bb, dijo, \u00ab\u00bfpodemos simplemente olvidar lo que pas\u00f3 all\u00ed y ser amigos?\u00bb<\/p>\n

\u201cNo\u201d, dijo Jackson. \u201cLa mierda no funciona de esa manera. Dijiste lo que quer\u00edas decir, y lo dices en serio, \u00bfpero ahora quieres volver y lamerme el culo y decir que lo sientes? No.\u00bb<\/p>\n

A\u00f1os m\u00e1s tarde, Seitzer se refiri\u00f3 a Jackson como \u201cun muy buen compa\u00f1ero de equipo, pero no alguien a quien conociera tan bien. No \u00e9ramos cercanos\u201d.<\/p>\n

Jackson fue m\u00e1s directo.<\/p>\n

Kevin Seitzer podr\u00eda irse a la mierda.<\/p>\n


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Extra\u00eddo del libro <\/em>EL \u00daLTIMO H\u00c9ROE POPULAR<\/em><\/span> por <\/em>jeff perlaman<\/em><\/span>. Derechos de autor \u00a9 2022 por Jeff Pearlman. De Mariner Books, un sello de HarperCollins Publishers. Reimpreso con permiso.<\/em><\/p>\n<\/div>\n


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