Dado mi trabajo como escritor de audio, no es raro que un par de contendientes nuevos para nuestro mejor resumen de auriculares lleguen a mi escritorio y se me pasen por la cabeza (por m\u00ed, no necesito un sirviente para todo) y proceder a envolverme en una gloriosa burbuja s\u00f3nica durante varias horas.<\/p>\n
Al final de esos d\u00edas, mucho despu\u00e9s de que deber\u00eda haberme ido a casa, llega el inevitable suspiro y asombro sobre cu\u00e1nto cuestan estos hermosos servidores s\u00f3nicos. Y luego est\u00e1 la gran decisi\u00f3n: \u00bfmerecen estas latas una conversaci\u00f3n delicada con el director de mi banco o, de hecho, con mi sufrido prometido? <\/p>\n