{"id":340505,"date":"2022-12-10T07:07:49","date_gmt":"2022-12-10T07:07:49","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/buscando-una-vida-de-arte-en-las-historias-de-familias-judias\/"},"modified":"2022-12-10T07:07:50","modified_gmt":"2022-12-10T07:07:50","slug":"buscando-una-vida-de-arte-en-las-historias-de-familias-judias","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/buscando-una-vida-de-arte-en-las-historias-de-familias-judias\/","title":{"rendered":"Buscando una vida de arte en las historias de familias jud\u00edas"},"content":{"rendered":"


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\tEn los hogares jud\u00edos educados de clase media, no es raro que los ni\u00f1os presuman pasiones y ambiciones art\u00edsticas. A juzgar por las caracter\u00edsticas de enfoque Tiempo de Armaged\u00f3n<\/em> y Universal\u00b4s Los Fabelman<\/em>dos dramas semiautobiogr\u00e1ficos de los directores James Gray y Steven Spielberg, respectivamente, el arte es una pieza central tem\u00e1tica que abre una caja de Pandora de valores en conflicto.<\/p>\n

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\tUna variedad de dilemas pragm\u00e1ticos y morales, derivados en parte de la identidad jud\u00eda de los protagonistas, es el n\u00facleo de cada pel\u00edcula. Nuestros protagonistas y sus familiares est\u00e1n familiarizados con la vida del at\u00edpico, habiendo experimentado el antisemitismo. Muchas de sus autoevaluaciones, objetivos y respuestas a los dem\u00e1s surgen de esos eventos definitorios. Lo m\u00e1s relevante es que ambas pel\u00edculas son narrativas sobre la mayor\u00eda de edad filtradas a trav\u00e9s de la lente distorsionada de la memoria, coloreadas en diversos grados de nostalgia, embellecimiento y la necesidad de reconciliaci\u00f3n con eventos pasados \u200b\u200by otras personas significativas cuya presencia espectral persigue a sus respectivos cineastas.<\/p>\n

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\tAmbientada en los a\u00f1os 50 y 60, Los Fabelman <\/em>explora al cineasta en ciernes Sammy (Gabriel LaBelle) y los eventos traum\u00e1ticos que llevaron a la ruptura de sus padres, Mitzi y Burt (Michelle Williams y Paul Dano). Sammy filma el caos dom\u00e9stico a fuego lento para escapar de \u00e9l y, sin querer, captura una interacci\u00f3n rom\u00e1ntica entre su madre y el mejor amigo de su padre, Benny (Seth Rogen). La imagen se convierte en una revelaci\u00f3n devastadora, alimentando su ira hacia sus padres, pero especialmente hacia su padre, a quien considera el mayor responsable de la crisis matrimonial.<\/p>\n

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\tBurt Fabelman es un luchador, que define el valor por el \u00e9xito profesional. Es a la vez, parad\u00f3jicamente, un hombre com\u00fan y un arquetipo jud\u00edo. Como ingeniero el\u00e9ctrico, Burt traslada a su familia de Nueva Jersey a Arizona y luego al norte de California, como un trampol\u00edn en su carrera profesional. Con cada nuevo hogar, las fisuras familiares se agrandan. La relaci\u00f3n de Sammy con su padre se ve tensa por la opini\u00f3n de este \u00faltimo sobre el arte del cine, que Burt ve como un pasatiempo en el mejor de los casos. Sin embargo, en el giro indulgente de Spielberg, Burt est\u00e1 haciendo lo mejor que puede, incluso ense\u00f1\u00e1ndole a su hijo la ciencia de las im\u00e1genes en movimiento.<\/p>\n

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\tUna vez que puso la mira en una carrera como concertista de piano, Mitzi Fabelman lo dej\u00f3 todo para ser esposa y madre. Una mujer frustrada y decepcionada, sin embargo es egoc\u00e9ntrica. \u201cNo le debes la vida a nadie\u201d, le aconseja a su hijo. Sinti\u00e9ndose atrapada, se deshace, y la l\u00ednea entre el trastorno psiqui\u00e1trico y la excentricidad es delgada. De cualquier manera, es el artista como escama. El t\u00edo abuelo Boris (Judd Hirsch) tambi\u00e9n encarna el mundo salvaje y loco de la autoexpresi\u00f3n; \u00e9l es la apasionada oveja negra de la familia, que insta a su sobrino a seguir sus sue\u00f1os a pesar de los desgarradores sacrificios que implica. \u201cFamilia, arte\u201d, brama. \u00ab\u00a1Te arrancar\u00e1 el coraz\u00f3n!\u00bb Exagerado y al borde de la s\u00e1tira, Boris est\u00e1 mucho m\u00e1s all\u00e1 del estereotipo jud\u00edo.<\/p>\n

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\tEn su escuela secundaria predominantemente WASP, Sammy soporta expresiones abiertas de antisemitismo. Pero aqu\u00ed tenemos un giro Spielbergiano: presagiando el optimismo que caracteriza a muchas de sus pel\u00edculas, el ni\u00f1o m\u00e1s antisemita cambia de opini\u00f3n despu\u00e9s de verse a s\u00ed mismo bajo una luz heroica gracias al talento cinematogr\u00e1fico de Sammy. La fant\u00e1stica pel\u00edcula termina con una nota de afirmaci\u00f3n y un poco de automitificaci\u00f3n. Todos sabemos en qui\u00e9n se convirti\u00f3 Sammy al crecer, y tambi\u00e9n lo sabe el cineasta.<\/p>\n

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\tEl alter ego de Gray en la pantalla, Paul Graff (Banks Repeta), es capturado en una edad m\u00e1s joven y formativa. Un estudiante de sexto grado en 1980 Queens, Paul es un pintor talentoso y planea ejercerlo profesionalmente. Su abuelo Aaron Rabinowitz (Anthony Hopkins) est\u00e1 totalmente detr\u00e1s de \u00e9l, mientras que sus padres conservadores, Irving (Jeremy Strong) y Esther (Anne Hathaway), quieren que su hijo elija una carrera econ\u00f3micamente solvente.<\/p>\n

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\tLa pel\u00edcula se centra en la amistad de Paul con Johnny (Jaylin Webb), uno de los pocos ni\u00f1os negros en la clase de Paul y con quien comparte una vena traviesa, aunque los castigos que recibe cada uno, del maestro, el director o la polic\u00eda, son desiguales. Gray insin\u00faa los abismos entre las comunidades negra y jud\u00eda, a pesar de su terreno com\u00fan. Es el quid inc\u00f3modo de la pel\u00edcula.<\/p>\n

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\tPol\u00edticamente, los Graff son liberales. Entienden la injusticia y ciertamente se oponen a ella en teor\u00eda, pero actuar de acuerdo con esos principios es otro asunto. Cuando atrapan a Paul fumando hierba con Johnny, sus padres lo sacan de la escuela p\u00fablica y lo inscriben en una academia cristiana conservadora para blancos. Irving cree que las aulas integradas son un obst\u00e1culo para el \u00e9xito de Paul, mientras que Paul est\u00e1 preocupado por el racismo casual de sus compa\u00f1eros de clase. Irving le dice a Paul: \u201cLa vida no es justa\u201d, pero aboga por una autoprotecci\u00f3n pragm\u00e1tica, incluso a expensas de los dem\u00e1s.<\/p>\n

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\tSi bien ambas pel\u00edculas encarnan personajes y preocupaciones jud\u00edas, ninguna agrega una nueva comprensi\u00f3n de la vida familiar jud\u00eda. Hay una falta intangible de autenticidad en cada uno (especialmente considerando los actores no jud\u00edos elegidos para papeles jud\u00edos). Uno no puede evitar comparar estas pel\u00edculas con un largometraje como el de Noah Baumbach. Las historias de Meyerowitz (nuevas y seleccionadas)<\/em>, que da en el clavo en su visi\u00f3n de una singular familia jud\u00eda y comunidad de artistas. Su especificidad suena verdadera ya que nunca apunta a su juda\u00edsmo, simplemente est\u00e1 ah\u00ed. Tiempo de Armaged\u00f3n<\/em> y Los Fabelman<\/em>por otro lado, no quieren que sus espectadores se pierdan lo obvio, lo que a su vez los hace sentir m\u00e1s gen\u00e9ricos.<\/p>\n

\n\tSimi Horwitz ha escrito para varios medios, incluidos <\/em>el poste de washington, <\/em>Entre bastidores y publicaci\u00f3n jud\u00eda independiente <\/em>el delantero.<\/em><\/p>\n

\n\tEsta historia apareci\u00f3 por primera vez en una edici\u00f3n independiente de diciembre de la revista The Hollywood Reporter. Para recibir la revista, haga clic aqu\u00ed para suscribirse.<\/em><\/p>\n<\/p><\/div>\n