Un miserable c\u00f3ctel de ideas de otros juegos de plataformas de acci\u00f3n y las peores partes de Rick y Morty.<\/section>\nA High on Life no le importa si piensas que es terrible, entonces, \u00bfpor qu\u00e9 deber\u00eda hacerte perder el tiempo deletre\u00e1ndolo? Este es un juego de acci\u00f3n ins\u00edpido y una s\u00e1tira vac\u00eda y destartalada encerrada en una postura defensiva de indiferencia tanto hacia ti como hacia su propia existencia. Considera que jugar es un suplicio para todos los involucrados: como te dice un comerciante en el momento en que apareces, \u00abcuanto m\u00e1s tardes aqu\u00ed, m\u00e1s tiempo tendr\u00e9 que parecer que me importa una mierda\u00bb. Contar sus fallas le est\u00e1 dando a High on Life m\u00e1s atenci\u00f3n de la que el juego se propone merecer, as\u00ed que capta la indirecta y haz clic. Si buscas una comedia de videojuegos de buena calidad y consciente de ti mismo, prueba Psychonauts en su lugar o el c\u00e1ustico pero fascinante Battleblock Theatre.\n<\/p>\n\nAlta en la revisi\u00f3n de la vida<\/h2>\n\nDesarrollador:<\/b> Juegos de Squanch<\/li>\nEditor:<\/b> Juegos de Squanch<\/li>\nPlataforma:<\/b> Jugado en Xbox Serie X<\/li>\nDisponibilidad:<\/b> Disponible el 13 de diciembre en Xbox One, Series X\/S y PC<\/li>\n<\/ul>\n<\/aside>\n Insistes en detalles, bien. Este es un juego de disparos y plataformas en primera persona en el que juegas como un ni\u00f1o burbanita convertido en cazarrecompensas, persiguiendo a g\u00e1nsteres alien\u00edgenas que han descubierto que pueden fumar seres humanos como la marihuana. Hay una ciudad central con puertas de entrada dimensionales a un pu\u00f1ado de mundos selv\u00e1ticos o des\u00e9rticos, construida alrededor de caminos principales circulares con oleadas enemigas emergentes de \u00abmatar hasta que la m\u00fasica se detenga\u00bb y el extra\u00f1o objeto coleccionable oculto. Tus armas son criaturas moderadamente mejorables al estilo de Oddworld que pueden hablar, o al menos maldecir.\n<\/p>\n
Cada arma tiene su propio actor de voz, y hay cierta intriga al escuchar c\u00f3mo reacciona cada uno ante la misma situaci\u00f3n: el ca\u00f1\u00f3n de mano principal Kenny, con la voz del fundador de Squanch Games y creador de Rick and Morty, Justin Roiland, es b\u00e1sicamente Morty sin el complejo de ansiedad. Tambi\u00e9n gritan en combate para avisarte que han transcurrido los tiempos de reutilizaci\u00f3n de fuego alternativo y recordarte tus objetivos. Pero sobre todo, pasan el juego dici\u00e9ndote de varias maneras por qu\u00e9 el juego apesta, como si esto necesitara alguna elaboraci\u00f3n.\n<\/p>\nAqu\u00ed hay algunos juegos de High on Life en acci\u00f3n: ten cuidado, el di\u00e1logo es NSFW.<\/figcaption><\/figure>\nLos enemigos son una mezcla acuosa de sabores cuerpo a cuerpo, rango medio, francotirador y midboss; como Kenny observa con frecuencia, apenas vale la pena matarlos. Las secciones de plataformas son tolerables principalmente gracias a la generosidad del juego para reaparecer en las repisas cuando caes en lagos \u00e1cidos o pozos sin fondo. El humor sat\u00edrico que lo envuelve todo es un ejercicio para eliminar tab\u00faes, que van desde chistes casuales sobre el suicidio hasta un cuchillo llamado Knifey al que le encanta apu\u00f1alar a la gente (ya sabes, de una manera sexual). Todo est\u00e1 expresado con el mismo esp\u00edritu de iron\u00eda evasiva y envenenada: NPC que te dicen que solo est\u00e1n aqu\u00ed para entregar informaci\u00f3n de b\u00fasqueda y una secci\u00f3n de modo detective que demuestra que las secciones del modo detective son aburridas.\n<\/p>\n
A nivel de correr y disparar, al menos, no todo son malas noticias. Hay una variedad crujiente de habilidades de plataformas, que se desbloquean a medida que encuentra nuevas armas: un gancho de agarre y un jetpack, discos de cuchillas incrustables en los que puede pararse y burbujas de tiempo para reducir la velocidad de los ventiladores de conductos de aire giratorios para un paso seguro. Todo se suma a una exploraci\u00f3n cerrada moderadamente divertida, no es que los peque\u00f1os planetoides del juego tengan secretos de sobra. Algunas de las armas tambi\u00e9n son divertidas de usar, incluso si est\u00e1n arrancadas al por mayor de los arsenales de mejores juegos. Hay un lanzador de Pikmin al estilo de Seth Rogen cuyos ni\u00f1os sin ojos se aferran a los enemigos y cambian temporalmente su lealtad.\n<\/p>\n\n\n \n<\/figure>\n\n \n<\/figure> \n<\/figure>\n
De vez en cuando, el juego se siente como un juego de disparos de caja de arena relativamente inocente en la tradici\u00f3n de Halo o Far Cry, definido por la verticalidad y el encadenamiento creativo de fuegos alternativos, mientras explota elementos del terreno como ventiladores emergentes, tirolesas o jaulas rompibles de omni. -fauna hostil. Pero en general es destartalado y f\u00e1cil de olvidar, con enemigos que a veces se espacian o se atascan en la geometr\u00eda, lo que te obliga a buscarlos para iniciar la siguiente fase de la historia. Y cada vez que High on Life te pilla mirando el lado positivo, se toma un minuto para sabotearse con una broma burlona. Nunca he jugado un juego que est\u00e9 tan comprometido con se\u00f1alar y deleitarse con su propia falta de valor.\n<\/p>\n
Es probable que esto no sorprenda a nadie que haya visto Rick y Morty: una muestra de referencia man\u00edaca y autodesprecio, en la que un narcisista genio y su nieto se embarcan en aventuras sangrientas a trav\u00e9s de escenarios arrancados del canon de la ciencia ficci\u00f3n. Admitir\u00e9 una afici\u00f3n culpable por Rick y Morty, en gran parte porque pone de relieve la hinchaz\u00f3n de los videojuegos de ciencia ficci\u00f3n relativamente magros como The Callisto Protocol. En el mejor de los casos, el programa combina las sencillas reglas dram\u00e1ticas de Looney Tunes con una velocidad de alusi\u00f3n fruto de la exhaustiva y extenuante variedad de feeds de las redes sociales.\n<\/p>\n
Tiene un apetito fren\u00e9tico por cambiar las tornas en configuraciones de g\u00e9nero gastadas, habilitadas por las rupturas de la cuarta pared de un cient\u00edfico loco que siempre encuentra la manera de \u00abdeus ex machina this shit\u00bb. Hay lecciones para los constructores de mundos de videojuegos y los creadores de mitos sobre c\u00f3mo Rick and Morty establece, juega y derriba una premisa en momentos: tome el episodio de Mr Meeseeks, que me hace pensar en la t\u00e1ctica de Philip K. Dick de cambiar algo peque\u00f1o y dejar que el el mundo muta a su alrededor.\n<\/p>\n\n \n<\/figure>\n
Pero con ese ritmo viene el agotamiento terminal en l\u00ednea y una actuaci\u00f3n de desesperaci\u00f3n que bordea la seriedad, pero que con demasiada frecuencia se convierte en un cinismo extremo y el mismo humor tedioso y agresivo de South Park. Es de este lado de Rick y Morty que High on Life dibuja con m\u00e1s frecuencia. Es el episodio de mitad de temporada ostentosamente llamado por tel\u00e9fono lleno de bromas sobre masturbarse, buscadores que se enojan y bichos lindos que terminan en la picadora o se revelan como completos idiotas.\n<\/p>\n
El problema es en parte que no vale la pena celebrar el juego debajo de la metacomedia t\u00f3xica, y en parte que los principios dram\u00e1ticos de Rick y Morty no funcionan del todo cuando los envuelves en una campa\u00f1a de disparos est\u00e1ndar. Una vez m\u00e1s, el espect\u00e1culo tiene que ver con la velocidad. Ponga a un jugador a cargo y crear\u00e1 tiempo de inactividad y reversiones: retroceder a \u00e1reas con una nueva capacidad de plataformas, caminar hacia un punto de referencia en lugar de conjurar un portal o saltar. Los bulliciosos arcos de 22 minutos de Rick y Morty se basan en la capacidad de Rick para editar esencialmente cualquier cosa obsoleta, a menos que Rick est\u00e9 aburrido es la broma, por supuesto. High on Life son de 10 a 15 horas de cosas que \u00e9l eliminar\u00eda, raz\u00f3n por la cual se odia tanto a s\u00ed mismo.\n<\/p>\n\n\n \n<\/figure>\n\n \n<\/figure> \n<\/figure>\n
El juego aborda esto no solo descifrando el contenido repetitivo al estilo de Borderlands, sino tambi\u00e9n dise\u00f1ando activamente retrasos para ponerte nervioso: escenarios como ese boceto del modo detective y caricaturas de improvisaci\u00f3n que hablan desagradablemente. Si hay algo genuinamente divertido en High on Life, es ver que este deseo de perder el tiempo choca con la necesidad de ser legible y coherente. Por un lado, hay parodias sobre la interfaz de usuario superada por spam y una secci\u00f3n en la que una cabeza voladora imposible de matar bloquea tu ret\u00edcula, chillando sobre sus problemas de mam\u00e1. Por otro lado, hay ventanas de tutoriales sencillas y consejos de HUD, lo que sugiere que un equipo de control de calidad se infiltra despu\u00e9s de horas para modificar el documento de dise\u00f1o y, a pesar de todo el nihilismo ostensible, sus armas tambi\u00e9n lo rega\u00f1an por tratar de derribar personajes de la historia.\n<\/p>\n
Hay una cierta cantidad de promesa creativa en los escenarios y niveles: indicios del mismo esp\u00edritu experimental e independiente del g\u00e9nero que ves en muchos juegos en primera persona de los 90. Entre misiones, puedes resolver las discusiones entre tu malcriada hermana y un ocupante ilegal extraterrestre (un ligero toque de la din\u00e1mica de la comedia de situaci\u00f3n de Mass Effect) y ver pel\u00edculas B de acci\u00f3n en vivo en el televisor de tu sal\u00f3n: el tipo de floritura multimedia que no he visto desde The Oscuridad. Es gracias a High on Life que s\u00e9 de Tammy y el T-Rex de Denise Richards, por lo que vale. Tambi\u00e9n es gracias a High on Life que he visto el interior de un (Space) Applebees, donde har\u00e1s clic en una escena de confesi\u00f3n mientras pides un dip.\n<\/p>\n\n \n<\/figure>\n
A veces, volver a visitar \u00e1reas vale la pena por algo m\u00e1s que baratijas. Durante una misi\u00f3n, te teletransportas a un trozo gigante y aleatorio de la calle principal de la ciudad para salvar un abismo. A su regreso, todos los conductores abandonados han convertido su embotellamiento en un extra\u00f1o pueblecito. Me hubiera gustado m\u00e1s ese tipo de cosas, donde la escritura desarrolla en\u00e9rgicamente algunas implicaciones divertidas y menos chistes d\u00e9bilmente \u00abprovocativos\u00bb sobre matar ni\u00f1os.\n<\/p>\n
Adem\u00e1s de un intento fallido de volver a embotellar a Rick y Morty como un juego de disparos en primera persona, High on Life es un manifiesto jugable encubierto para los juegos en general como insensibles, expl\u00edcitos y hechos de elecciones falsas: tanques de incubaci\u00f3n, en resumen, para idiotas caballerosos. Si se tomara a s\u00ed mismo lo suficientemente en serio como para hacer declaraciones, podr\u00eda ofrecerse como una expresi\u00f3n de la peor forma de arte. Sin embargo, no quiere estar terminado, de verdad. Al igual que el oso de peluche dividido en dos que encuentras desangr\u00e1ndose en un ca\u00f1\u00f3n en particular, High on Life solo quiere salir de su miseria.\n<\/p>\n<\/p><\/div>\n