<\/picture>\n <\/div>\n<\/p><\/div>\nEl mercado navide\u00f1o de Bryant Park est\u00e1 lleno de intensidad por la tarde, ya que los compradores saltan fren\u00e9ticamente de un puesto a otro para comprar regalos de \u00faltima hora. Eludiendo el tr\u00e1fico peatonal, veo a Zoey Deutch cerca de la pista de patinaje sobre hielo: su energ\u00eda brillante y contagiosa brilla tanto en persona como en la pantalla. Se mueve r\u00e1pido y con toda su fuerza, igualando el ritmo de Nueva York, lo que tal vez pueda explicarse por sus ra\u00edces familiares aqu\u00ed: sus parientes paternos viven en Long Island y su abuela creci\u00f3 en Brooklyn. \u201cEl lado de mi padre tiene la cl\u00e1sica historia familiar jud\u00eda de Nueva York\u201d, bromea.<\/p>\n
La \u00faltima pel\u00edcula de Deutch, algo de tiffany<\/em>‘s, le permite a la carism\u00e1tica int\u00e9rprete aprovechar su lado bufonesco. Interpreta a Rachel Meyer, una restauradora que dirige un puesto de pasteler\u00eda en el mismo mercado navide\u00f1o donde nos encontramos a principios de diciembre. La primera comedia rom\u00e1ntica que hizo, la de Netflix. Prepararlo<\/em>dej\u00f3 en claro que tiene las habilidades para interpretar la historia de \u00ablo har\u00e1n o no lo har\u00e1n\u00bb que es t\u00edpica del g\u00e9nero, y algo de tiffany<\/em>‘s, que ahora se transmite en Prime Video, es una entrada al canon con tem\u00e1tica festiva. Ir\u00f3nicamente, Deutch no ve muchas comedias rom\u00e1nticas. \u201cNo soy una cin\u00e9fila\u201d, me dice, y agrega que solo est\u00e1 agradecida de ser conocida por pel\u00edculas que traen alegr\u00eda.<\/p>\nComo una comedia rom\u00e1ntica navide\u00f1a, algo de tiffany’s <\/em>est\u00e1 obligado a incluir algunos<\/em> l\u00edneas cursis (\u00abMe encanta que siempre salga algo hermoso del desastre\u00bb, dice Rachel en un momento), pero las actuaciones de Deutch y sus compa\u00f1eros de reparto Kendrick Sampson, Jojo T. Gibbs y Shay Mitchell inyectan algo de realismo a los personajes. La pel\u00edcula comienza en una joyer\u00eda Tiffany’s en Soho, donde dos hombres hacen compras navide\u00f1as: Ethan (Sampson) est\u00e1 comprando un anillo de compromiso con su hija para una propuesta de matrimonio para la ma\u00f1ana de Navidad a Vanessa (Mitchell), y el artista del tatuaje ensimismado Gary ( Ray Nicholson) est\u00e1 buscando la opci\u00f3n m\u00e1s \u201crazonable\u201d que Tiffany’s tiene para ofrecer, un par de aretes de $300, como regalo de Navidad para Rachel. Un accidente justo afuera de la tienda nos prepara para las siguientes travesuras. Ethan accidentalmente toma el bolso de Gary en lugar del suyo, y Gary sufre una peque\u00f1a p\u00e9rdida de memoria, lo que le permite olvidar que en realidad no ten\u00eda planes para proponerle matrimonio. Probablemente puedas adivinar c\u00f3mo transcurre la historia, pero la premisa original de algo de tiffany’s<\/em> presenta algunos giros sorprendentes antes de que lleguemos al final feliz.<\/p>\nPaseando por la pista de patinaje sobre hielo, Deutch se\u00f1ala el puesto de su personaje Rachel en el mercado. Rodaje algo de tiffany’s<\/em> aqu\u00ed \u201cera incluso m\u00e1s<\/em> ca\u00f3tico\u201d el a\u00f1o pasado, dice ella. Pasamos por algunos puestos que ofrecen bombolini, y ella me cuenta un secreto: originalmente, se supon\u00eda que el producto horneado exclusivo que se ofrec\u00eda en el puesto de su personaje era bombolini, pero convenci\u00f3 a la producci\u00f3n de que un cornetto, el primo italiano menos conocido del croissant. , fue la elecci\u00f3n correcta. \u00abPresent\u00e9 un caso bastante s\u00f3lido de por qu\u00e9 no deber\u00eda ser bombolini, y ahora sigo viendo bombolini en todas partes\u00bb, dice ella. \u201cSoy el publicista no oficial de los cornettos\u201d.<\/p>\n