{"id":359802,"date":"2022-12-20T04:02:22","date_gmt":"2022-12-20T04:02:22","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/jugar-sexy-en-la-television-no-es-poca-cosa\/"},"modified":"2022-12-20T04:02:24","modified_gmt":"2022-12-20T04:02:24","slug":"jugar-sexy-en-la-television-no-es-poca-cosa","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/jugar-sexy-en-la-television-no-es-poca-cosa\/","title":{"rendered":"Jugar sexy en la televisi\u00f3n no es poca cosa"},"content":{"rendered":"


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\tUno de los momentos televisivos m\u00e1s estremecedores del a\u00f1o fue una escena en el ba\u00f1o de un hotel en la que una mujer busca protector solar. En la apertura de la segunda temporada de HBO el loto blanco<\/em>Harper, el abogado de Aubrey Plaza, decididamente no quiere estar en un viaje de pareja en Sicilia con el amigo de la universidad de finanzas de su esposo y su esposa trofeo burbujeante. En primer lugar, no leen. En segundo lugar, son irritantemente h\u00e1biles entre ellos. Pero all\u00ed est\u00e1 ella en su suite, entregando a rega\u00f1adientes a Cameron (Theo James) un par de ba\u00f1adores para que los preste y aceptando a medias su gratitud por haber hecho el viaje, especialmente porque, como \u00e9l insin\u00faa, su marido era un nerd que no pod\u00eda recuperar a las chicas en el d\u00eda.<\/p>\n

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\tMientras est\u00e1 de pie frente a su espejo, manoseando sus lociones, ve el reflejo de Cameron detr\u00e1s de ella: en un movimiento r\u00e1pido, \u00e9l se quita los pantalones cortos, revelando un trasero musculoso como una escultura del Renacimiento italiano y, m\u00e1s sorprendentemente, su prodigioso sexo. Organo. Harper, sorprendido, mira furtivamente al sujeto mientras aparentemente permanece inconsciente. Casualmente, le pide que verifique si los ba\u00fales est\u00e1n demasiado ajustados. Apenas puede articular una respuesta. El momento fue una violaci\u00f3n con seguridad, pero no uno que ella rechace por completo.<\/p>\n

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\tNo se puede negar que la din\u00e1mica de poder en esta escena es convincentemente er\u00f3tica, en gran parte gracias a la actuaci\u00f3n discreta de Plaza y James. Cameron es un fiasco y un semental a la vez, cuya mera existencia es un anatema para todo lo que Harper valora. Harper no est\u00e1 seguro de si est\u00e1 coqueteando con ella, intimid\u00e1ndola o simplemente inconsciente de sus acciones. \u00c9l la silencia con su f\u00edsico y la forma subrepticia en que la despliega y la controla con \u00e9l. El tropo de la perra fr\u00edgida y el tonto Adonis que la saca de su castillo de hielo funciona por una raz\u00f3n: muchas personas que se atrincheran detr\u00e1s de paredes de ladrillo no quieren ser arrancadas de ellos en secreto.<\/p>\n

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\tEl reciente regreso de la televisi\u00f3n convencional a la intriga er\u00f3tica y sexual es uno de los grandes \u00e9xitos narrativos del a\u00f1o. La sexualidad nunca desapareci\u00f3 realmente de la televisi\u00f3n: las escenas de sexo animadas y aceleradas siempre ser\u00e1n esenciales para los desgarradores de corpi\u00f1os, las comedias obscenas y los dramas de prestigio por igual. Pero en 2022, una avalancha de series fue m\u00e1s all\u00e1 de la excitaci\u00f3n superficial gracias a las complejas actuaciones detr\u00e1s de ellas. Ser capaz de crear un personaje \u00absexy\u00bb requiere una habilidad ilimitada. No puedes ser solo una cara bonita o un cuerpo duro: debes superponer la emotividad y el poder social con la carga er\u00f3gena, todo mientras tu personaje baila con tab\u00faes culturales como la infidelidad, el incesto y el sexo pagado.<\/p>\n

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\tLos tab\u00faes impregnan los de HBO Casa del Drag\u00f3n<\/em> con su atractivo amoroso. En sus primeros episodios, el Game of Thrones<\/em> La precuela sobre la dinast\u00eda gobernante de Westeros enfrenta a la inexperta princesa adolescente Rhaenyra (Milly Alcock) contra su sanguinario t\u00edo, el pr\u00edncipe Daemon (Matt Smith), mientras compiten por ser nombrado heredero de la corona. Nunca est\u00e1s seguro de si sus conversaciones uno a uno en su lengua ancestral, el valyrio, son intensas debido a la competencia pol\u00edtica, la intimidad familiar o, lo que es bastante inquietante, la tensi\u00f3n sexual. Pero cuando el p\u00edcaro Daemon lleva a una Rhaenyra disfrazada fuera del palacio y la lleva a la ciudad en busca de desventuras en un burdel local, su fricci\u00f3n lleva a una ardiente sesi\u00f3n de besos que casi termina con su corrupci\u00f3n. M\u00e1s tarde, una Rhaenyra mayor (Emma D’Arcy) seduce a su t\u00edo a plena luz del d\u00eda en una playa despu\u00e9s del funeral de su esposa.<\/p>\n

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\tMuchos hombres heterosexuales que conozco se enfurecen ante la cara \u201ccuadrada\u201d de Smith y su cuerpo alto y delgado, sin entender c\u00f3mo un hombre con aspecto de espantap\u00e1jaros puede arder sin llama de la forma en que lo hace el furioso Daemon. Pero no lo hace solo. Tanto Alcock como D’Arcy, interpretando a una realeza que hace alarde de su sexualidad empoderada tanto como su madrastra, la Reina Alicent (interpretada en los primeros episodios por Emily Carey y m\u00e1s tarde por Olivia Cooke), interpreta p\u00fablicamente a la cari\u00f1osa y obediente esposa, arde junto a \u00e9l. La belleza cruda y la mand\u00edbula helada de D’Arcy contrastan particularmente con la personalidad abiertamente hambrienta de su personaje, lo que realza el impacto cuando reclama a sus diversos amantes.<\/p>\n

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\tLas mujeres que no pueden contener su deseo sexual por hombres t\u00f3xicos fueron algunos de los aspectos m\u00e1s destacados de los esfuerzos de segundo a\u00f1o del drama de la escuela secundaria de HBO. Euforia<\/em> y el romance de Regencia de Netflix Bridgerton<\/em>. Euforia<\/em>‘s Cassie (Sydney Sweeney), una adolescente de coraz\u00f3n puro que tiene una aventura de una noche con el abusivo novio intermitente de su mejor amiga, Nate (Jacob Elordi), pronto se convierte en una pila petulante y alegre. de lodo sobre el inter\u00e9s amoroso emocionalmente retenido. Bridgerton<\/em>la reservada Kate Sharma (Simone Ashley) se siente atra\u00edda de mala gana por el libertino vizconde con el que su hermana menor quiere casarse (Jonathan Bailey); despu\u00e9s de que los dos comparten una explosiva escena de amor en el jard\u00edn, Ashley debe equilibrar el anhelo doloroso de Kate y su terror social. Donde Sweeney cae en la man\u00eda lujuriosa, Ashley vadea en la verg\u00fcenza lujuriosa.<\/p>\n

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\tPersonalmente, mis actuaciones er\u00f3ticas favoritas del a\u00f1o han sido las trabajadoras apresuradas: Alice Englert como una ambiciosa trabajadora sexual francesa del siglo XVIII en Starz’s Las amistades peligrosas<\/em>Brandee Evans como stripper de Mississippi en Starz’s Valle P<\/em> y Simona Tabasco como una escort italiana de ojos saltones en el loto blanco<\/em>. Cada actriz debe, de escena a escena, representar la verdadera naturaleza privada de su personaje, encarnar confianza en su m\u00edstica visual y t\u00e9cnicas f\u00edsicas y, finalmente, mantener una personalidad profesional atractiva para atraer a los clientes. Englert, Evans y Tabasco juntos logran una tarea imposible: hacer que el espectador quiera dormir con ellos o ser ellos.<\/p>\n

\n\tEsta historia apareci\u00f3 por primera vez en una edici\u00f3n independiente de diciembre de la revista The Hollywood Reporter. Para recibir la revista, haga clic aqu\u00ed para suscribirse.<\/em><\/p>\n<\/p><\/div>\n