\n<\/aside>\n<\/p>\n
En noviembre de 2016, el vir\u00f3logo David Evans viaj\u00f3 a Ginebra para asistir a una reuni\u00f3n de un comit\u00e9 de la Organizaci\u00f3n Mundial de la Salud sobre investigaci\u00f3n de la viruela. El virus mortal hab\u00eda sido declarado erradicado 36 a\u00f1os antes; las \u00fanicas muestras vivas conocidas de viruela estaban bajo la custodia de los gobiernos de Estados Unidos y Rusia.<\/p>\n
Sin embargo, Evans hizo un anuncio sorprendente: meses antes de la reuni\u00f3n, \u00e9l y un colega hab\u00edan creado un pariente cercano del virus de la viruela, efectivamente desde cero, en su laboratorio en Canad\u00e1. En un informe posterior, la OMS escribi\u00f3 que el m\u00e9todo del equipo \u201cno requer\u00eda conocimientos o habilidades bioqu\u00edmicas excepcionales, fondos significativos o tiempo significativo\u201d.<\/p>\n
Evans no est\u00e1 de acuerdo con esa caracterizaci\u00f3n: el proceso \u00abrequiere una enorme cantidad de habilidad t\u00e9cnica\u00bb, le dijo a Undark. Pero ciertas tecnolog\u00edas facilitaron el experimento. En particular, Evans y su colega pudieron simplemente pedir largas extensiones del ADN del virus por correo a GeneArt, una subsidiaria de Thermo Fisher Scientific.<\/p>\n
Si el ADN es el c\u00f3digo de la vida, entonces equipos como GeneArt son imprentas: sintetizan hebras personalizadas de ADN y las env\u00edan a los cient\u00edficos, quienes pueden usar el ADN para hacer que una c\u00e9lula de levadura brille en la oscuridad o para crear una bacteria que se alimenta de pl\u00e1stico. , o para construir un virus desde cero. Hoy hay docenas, tal vez cientos, de empresas que venden genes, ofrecen ADN a precios cada vez m\u00e1s bajos. (Si el ADN se parece a un texto largo, las tarifas actuales suelen ser inferiores a 10 centavos por letra; a esta tarifa, el material gen\u00e9tico necesario para comenzar a construir un virus de influenza costar\u00eda menos de $1500). Y las nuevas tecnolog\u00edas de escritorio, esencialmente, port\u00e1tiles impresoras gen\u00e9ticas: prometen hacer que el ADN sint\u00e9tico est\u00e9 a\u00fan m\u00e1s disponible.<\/p>\n
Pero, al menos desde la d\u00e9cada de 2000, el campo se ha visto ensombrecido por los temores de que alguien use estos servicios para causar da\u00f1o, en particular, para fabricar un virus mortal y usarlo para cometer un acto de bioterrorismo.<\/p>\n\n Anuncio <\/span> <\/p>\n<\/aside>\nMientras tanto, Estados Unidos impone pocas normas de seguridad a los proveedores de ADN sint\u00e9tico. Es perfectamente legal hacer un lote de genes del \u00e9bola o la viruela y enviarlo a una direcci\u00f3n de EE. UU., sin hacer preguntas, aunque en realidad crear el virus a partir de ese material gen\u00e9tico puede ser ilegal seg\u00fan las leyes que rigen la posesi\u00f3n de ciertos pat\u00f3genos.<\/p>\n
Se debate si esa es una causa leg\u00edtima de alarma. Algunos expertos dicen que crear un virus a partir de ADN sint\u00e9tico sigue siendo prohibitivamente dif\u00edcil para la mayor\u00eda de los cient\u00edficos, y que los temores de un ataque a menudo son exagerados. Al mismo tiempo, nuevas iniciativas sin fines de lucro, impulsadas por el dinero de los fil\u00e1ntropos de Silicon Valley y que, en ocasiones, evocan los peores escenarios, est\u00e1n presionando para obtener protecciones m\u00e1s estrictas contra el uso indebido del ADN sint\u00e9tico. Sin embargo, implementar una seguridad efectiva es dif\u00edcil, al igual que hacer cumplir cualquier tipo de norma en una industria multinacional en expansi\u00f3n.<\/p>\n
\u201cNo es que me preocupe que algo suceda ma\u00f1ana. Pero la realidad es que esta capacidad es cada vez m\u00e1s poderosa en t\u00e9rminos de cu\u00e1nto pueden durar los fragmentos de ADN, qu\u00e9 se puede crear con ellos, la capacidad de los receptores para luego ensamblar los fragmentos de ADN en un nuevo virus\u201d, dijo Gregory Koblentz, un especialista en biodefensa. investigador de la Universidad George Mason. \u201cEste es el tipo de cosas en las que realmente deber\u00edamos ser m\u00e1s proactivos y tratar de adelantarnos a la curva\u201d.<\/p>\n
Quiz\u00e1s el cient\u00edfico m\u00e1s destacado que advierte sobre el peligro de la s\u00edntesis de ADN sin control es Kevin Esvelt, un biotecn\u00f3logo del MIT. En una conversaci\u00f3n, Esvelt se mueve r\u00e1pidamente entre los detalles t\u00e9cnicos y la alarma tipo Cassandra. A menudo habla de Seiichi Endo, un vir\u00f3logo japon\u00e9s que, en 1987, se uni\u00f3 a la apocal\u00edptica secta Aum Shinrikyo. Endo ayud\u00f3 a llevar a cabo un ataque con gas venenoso en el metro de Tokio, y el grupo intent\u00f3, pero aparentemente fracas\u00f3, obtener el virus del \u00c9bola.<\/p>\n
Desde entonces, la creaci\u00f3n de pat\u00f3genos se ha vuelto m\u00e1s f\u00e1cil, gracias en parte a la mayor disponibilidad de ADN sint\u00e9tico. \u201cEs realmente dif\u00edcil para m\u00ed imaginar que un vir\u00f3logo graduado de la Universidad de Kyoto no pueda ensamblar un virus de influenza hoy\u201d, dijo Esvelt.<\/p>\n
Como lo describe Esvelt, el problema de la biolog\u00eda sint\u00e9tica tiene que ver con el poder: las nuevas tecnolog\u00edas le han entregado a un grupo de cient\u00edficos las claves para construir bichos insondablemente peligrosos. Muy pocos, tal vez ninguno, de esos cient\u00edficos tiene alg\u00fan deseo de ejercer este sombr\u00edo superpoder. Pero, argumenta Esvelt, es solo cuesti\u00f3n de tiempo antes de que aparezca el pr\u00f3ximo Endo.<\/p>\n<\/p><\/div>\n
\nSource link-49<\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Agrandar \/ Ilustraci\u00f3n de un virus de la viruela (variola). Una membrana (transparente) derivada de su c\u00e9lula hu\u00e9sped cubre la part\u00edcula del virus. En su interior se encuentra el n\u00facleo…<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":373142,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[21980],"tags":[12227,7878,194,7301,2653,8,2628,9229],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/373141"}],"collection":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=373141"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/373141\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":373143,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/373141\/revisions\/373143"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/373142"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=373141"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=373141"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=373141"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}