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Cuando United Airlines le dijo a Valerie Szybala que le entregar\u00edan su equipaje retrasado, ella les crey\u00f3. Sin embargo, las AirTags de Apple en su maleta contaban una historia diferente.<\/p>\n
Despu\u00e9s de aterrizar la semana pasada en el Aeropuerto Nacional Reagan en Washington, DC, Szybala se enter\u00f3 de que su bolso, lleno de recuerdos de las vacaciones, no hab\u00eda hecho el mismo vuelo. Para hacer las paces, United prometi\u00f3 dejar la bolsa directamente.<\/p>\n
Szybala, como muchos viajeros modernos, hab\u00eda equipado su maleta con un rastreador AirTag en forma de disco, dise\u00f1ado para ayudar a los usuarios a localizar art\u00edculos extraviados o robados a trav\u00e9s de la aplicaci\u00f3n Find My iOS. El diminuto accesorio utiliza tecnolog\u00eda de banda ultraancha y una red de igual a igual que aprovecha miles de millones de dispositivos Apple para encontrar los elementos que faltan.<\/p>\n
Entonces, cuando la maleta etiquetada de Szybala parti\u00f3 del aeropuerto de DC el 29 de diciembre, pudo seguir su viaje de entrega a unas pocas millas de distancia. Pero el equipaje no lleg\u00f3 ese d\u00eda; en cambio, parec\u00eda pasar la noche en un complejo de apartamentos residenciales.<\/p>\n