Anuncio <\/span> <\/p>\n<\/aside>\nAunque la transmisi\u00f3n web continu\u00f3 durante aproximadamente media hora m\u00e1s, Virgin Orbit no proporcion\u00f3 m\u00e1s informaci\u00f3n sobre la anomal\u00eda que caus\u00f3 que la etapa superior y sus cargas \u00fatiles no pudieran alcanzar la \u00f3rbita.<\/p>\n
Es probable que este sea un fracaso de lanzamiento devastador para Virgin Orbit, una peque\u00f1a empresa de lanzamiento con sede en EE. UU. que intenta encontrar su nicho en el mercado de lanzamiento. Antes del lanzamiento del lunes, la empresa lleg\u00f3 a la \u00f3rbita en cuatro de sus primeros cinco intentos, un buen r\u00e9cord para una empresa de cohetes de nueva creaci\u00f3n. Pero estaba luchando por alcanzar una alta cadencia de misiones, un requisito previo para alcanzar el punto de equilibrio financiero al cobrar los cheques del contrato de lanzamiento.<\/p>\n
El intento del lunes desde el Reino Unido, un primer intento hist\u00f3rico de lanzamiento orbital desde esa naci\u00f3n, fue una oportunidad de alto perfil para mostrar a los inversionistas de lo que era capaz la compa\u00f1\u00eda y para impresionar a los funcionarios brit\u00e1nicos que estaban presentes para ver despegar el avi\u00f3n que transportaba cohetes. fuera de un puerto espacial en el suroeste de Inglaterra.<\/p>\n
Los funcionarios del Reino Unido trabajaron durante ocho a\u00f1os para llevar una capacidad de lanzamiento horizontal a Spaceport Cornwall, que se encuentra en el sitio del aeropuerto de Newquay, una antigua estaci\u00f3n de la Royal Air Force. Durante ese tiempo, los funcionarios del puerto espacial, la Agencia Espacial del Reino Unido y Virgin Orbit trabajaron para abordar las preocupaciones regulatorias sobre el manejo del cohete en Cornualles y su lanzamiento sobre aguas internacionales al suroeste de Irlanda.<\/p>\n
Ahora, el primer intento de lanzamiento orbital desde el Reino Unido ha terminado en fracaso. Los funcionarios brit\u00e1nicos a los que habr\u00eda que convencer para ayudar a mantener la estabilidad financiera de la empresa probablemente no quedaron impresionados. Tambi\u00e9n lo eran los clientes del cohete, que inclu\u00edan a los gobiernos de los Estados Unidos y el Reino Unido. Para Virgin Orbit, su primer intento de lanzamiento desde el Reino Unido fue un mont\u00f3n de tonter\u00edas.<\/p>\n<\/p><\/div>\n