{"id":455976,"date":"2023-02-11T06:03:58","date_gmt":"2023-02-11T06:03:58","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-terrorista-de-izquierda-suizo-que-deserto-a-la-cia\/"},"modified":"2023-02-11T06:04:00","modified_gmt":"2023-02-11T06:04:00","slug":"el-terrorista-de-izquierda-suizo-que-deserto-a-la-cia","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-terrorista-de-izquierda-suizo-que-deserto-a-la-cia\/","title":{"rendered":"El terrorista de izquierda suizo que desert\u00f3 a la CIA"},"content":{"rendered":"


\n<\/p>\n

<\/p>\n
\n
\n

En un nuevo libro, el historiador Adrian H\u00e4nni describe c\u00f3mo Bruno Breguet, el terrorista del Tesino, despu\u00e9s de a\u00f1os de luchar por la revoluci\u00f3n mundial, se ofreci\u00f3 al archienemigo estadounidense de todas las personas y luego desapareci\u00f3 misteriosamente.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

<\/p>\n

\n
<\/div>
\n
\n

Bruno Breguet (centro) en junio de 1977 en una rueda de prensa en el restaurante Cooperativo de Z\u00farich, junto a su hermano Ernesto (derecha) y un funcionario.<\/h2>\n

piedra clave<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

<\/p>\n

Bruno Breguet, un estudiante de secundaria de Ticino, tiene solo 20 a\u00f1os cuando llega temprano en la ma\u00f1ana del 23 de junio de 1970 como pasajero en el barco de vapor \u00abEnotria\u00bb en el puerto de la ciudad costera israel\u00ed de Haifa. Lleva una c\u00e1mara de v\u00eddeo Super 8 colgada del cuello, lo que hace que el discreto joven parezca uno de los numerosos turistas de Tierra Santa. Todos desembarcan para completar los tr\u00e1mites de inmigraci\u00f3n en la estaci\u00f3n de aduanas. <\/p>\n

<\/p>\n

Cuando Bruno Breguet present\u00f3 su pasaporte suizo, los funcionarios de aduanas lo llevaron aparte y, despu\u00e9s de un registro al desnudo, apuntaron con sus metralletas al estudiante de secundaria de Ticino. Debajo de su ropa, escondido en un cintur\u00f3n de tela blanca, los inspectores israel\u00edes encontraron dos kilogramos de explosivos de fabricaci\u00f3n sovi\u00e9tica. Y escondidos en la cavidad de un paquete Marlboro est\u00e1n los detonadores el\u00e9ctricos y otros utensilios con los que se pueden detonar los explosivos. <\/p>\n

<\/p>\n

Finalmente, el equipaje de Bruno Breguet tambi\u00e9n conten\u00eda peque\u00f1as placas de metal con la inscripci\u00f3n \u00abFPLP\u00bb, las siglas de Frente Popular para la Liberaci\u00f3n de Palestina. Despu\u00e9s de sus sangrientos ataques, la organizaci\u00f3n terrorista suele dejar dichas placas de metal en la escena del crimen.<\/p>\n

<\/p>\n

El hombre de Ticino escribi\u00f3 claramente en una nota c\u00f3mo deber\u00eda haber colocado la carga explosiva en la Torre Shalom en Tel Aviv, en ese momento el edificio m\u00e1s alto de Medio Oriente.<\/p>\n

<\/p>\n

Pero, \u00bfc\u00f3mo sucedi\u00f3 que un estudiante de secundaria de 20 a\u00f1os de Minusio, que deber\u00eda haber completado su Matura en el Liceo de Lugano en unos meses, entr\u00f3 a Israel con un cintur\u00f3n explosivo?<\/p>\n

<\/p>\n

\n
\"Un <\/div>
\n
\n

Un funcionario de aduanas muestra el cintur\u00f3n de tela en el que Breguet hab\u00eda escondido los explosivos cuando entr\u00f3 en Israel.<\/h2>\n

PD\/Universidad de Harvard<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

<\/p>\n

Busca pistas sobre el terrorista<\/span><\/h2>\n

<\/p>\n

El historiador suizo Adrian H\u00e4nni, especializado desde hace mucho tiempo en terrorismo y servicios secretos, se ha lanzado en busca de pistas. Por un lado, evalu\u00f3 meticulosamente una gran cantidad de material de archivo y literatura especializada de varios pa\u00edses. Por otro lado, busc\u00f3 y entrevist\u00f3 a amigos, familiares y compa\u00f1eros de Breguet.<\/p>\n

<\/p>\n

Probablemente gracias a su genuina curiosidad, H\u00e4nni logr\u00f3 entablar una conversaci\u00f3n con los protagonistas que anteriormente se hab\u00edan negado en gran medida a hablar con los medios.<\/p>\n

<\/p>\n

El historiador ha combinado esta mezcla de fuentes escritas y orales en un denso retrato en un nuevo libro. M\u00e1s all\u00e1 de Breguet como persona, proporciona una visi\u00f3n profunda de la turbulencia de los a\u00f1os 70 y 80, cuando un n\u00famero sorprendente de hilos de terrorismo internacional convergieron en Suiza.<\/p>\n

<\/p>\n

Y a H\u00e4nni se le ocurre una primicia: al final de la carrera de Breguet como terrorista, tras m\u00e1s de veinte a\u00f1os de lucha por la ansiada revoluci\u00f3n mundial, el Ticino cambi\u00f3 de bando: en la embajada de EE.UU. en Berna sirvi\u00f3 como esp\u00eda para el servicio de inteligencia exterior estadounidense CIA.<\/p>\n

<\/p>\n

Pero hasta entonces fue un largo camino. <\/p>\n

<\/p>\n

Mao y Lenin sobre el lago Maggiore<\/span><\/h2>\n

<\/p>\n

Bruno Breguet era un ni\u00f1o de 1968. Como muchos de su generaci\u00f3n, el t\u00edmido y bastante taciturno estudiante de secundaria fue politizado por la guerra de Vietnam. En la casa de sus padres en Minusio, con una vista despejada sobre el lago Maggiore, no solo devor\u00f3 los escritos de Mao y Lenin. El adolescente inquisitivo pronto se suscribi\u00f3 a revistas relevantes de Cuba y Vietnam. Su lectura reforz\u00f3 su creencia de que, gracias a los grupos armados de izquierda, la revoluci\u00f3n mundial era inminente.<\/p>\n

<\/p>\n

La radicalizaci\u00f3n silenciosa de Breguet recuerda procesos similares entre los islamistas contempor\u00e1neos. En el caso del Ticino, el proceso se aceler\u00f3 cuando el terrorismo en 1969 incluso sobresalt\u00f3 a la anteriormente pac\u00edfica Suiza. Desde la distancia, Breguet sigui\u00f3 con gran inter\u00e9s el juicio de los tres terroristas palestinos que atacaron un avi\u00f3n de la aerol\u00ednea israel\u00ed El Al en el aeropuerto de Z\u00farich Kloten. El hecho de que un jurado en Winterthur la encontrara culpable, pero al mismo tiempo absolviera a un guardia de seguridad israel\u00ed que hab\u00eda matado a uno de los asesinos, Breguet sinti\u00f3 que era una flagrante injusticia.<\/p>\n

<\/p>\n

Si bien el estudiante de secundaria era percibido por quienes lo rodeaban en Ticino como extremadamente amigable, cort\u00e9s y reacio a los conflictos, Breguet estaba seguro despu\u00e9s del juicio del tribunal de Winterthur de que a partir de ahora quer\u00eda participar activamente en la lucha del FPLP por un estado palestino. Un d\u00eda de febrero de 1970, en lugar de ir al Liceo de Lugano, viaj\u00f3 a Beirut, donde se present\u00f3 en la oficina de reclutamiento del FPLP. All\u00ed fue muy bien recibido como un occidental discreto con pasaporte suizo. Cuatro meses despu\u00e9s, Breguet, equipado con el cintur\u00f3n explosivo, fue arrestado por las autoridades aduaneras de Haifa.<\/p>\n

<\/p>\n

Despu\u00e9s de siete a\u00f1os en prisiones israel\u00edes, Breguet fue liberado en junio de 1977 despu\u00e9s de que sus padres pidieran clemencia. De vuelta en Suiza, da una rueda de prensa en el restaurante Cooperativo de Z\u00farich. Sali\u00f3 de prisi\u00f3n como palestino, dice. No hay duda de que al tesino le gustar\u00eda seguir participando en su lucha militante por un estado independiente. <\/p>\n

<\/p>\n

Pronto busc\u00f3 contacto con el FPLP nuevamente en Suiza a trav\u00e9s de intermediarios. Pero tiene que darse cuenta de que los palestinos ya no est\u00e1n interesados \u200b\u200ben \u00e9l. Su nombre es \u00abquemado\u00bb, como un \u00abperro abigarrado\u00bb, es extremadamente inadecuado para operaciones secretas.<\/p>\n

<\/p>\n

\n
\"Despu\u00e9s <\/div>
\n
\n

Despu\u00e9s de que Israel haya concedido su solicitud de indulto, los padres reciben a su hijo Bruno (centro) en el aeropuerto de Z\u00farich Kloten. A la izquierda el hermano de Bruno.<\/h2>\n

Candid Lang \/ RDB \/ NZZ Libro<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

<\/p>\n

As\u00ed que en 1979 se uni\u00f3 a otro hijo pr\u00f3digo de la resistencia palestina, el venezolano Illich Ram\u00edrez S\u00e1nchez, m\u00e1s conocido como \u201cCarlos\u201d. Con este paso, Breguet se aleja a kil\u00f3metros de su ideal original, la lucha revolucionaria por un orden mundial m\u00e1s justo. En esos a\u00f1os, \u00abCarlos\u00bb era solo el jefe de un grupo mercenario que hac\u00eda negocios sucios para turbios servicios secretos y d\u00e9spotas rebeldes.<\/p>\n

<\/p>\n

Para este grupo de desperados, Breguet act\u00faa como centro en Europa. Un atentado con bomba perpetrado por los mercenarios en Munich en febrero de 1981 es un ejemplo de la insensatez de su trabajo. Cuando estallaron 20 kilogramos de explosivos, que Breguet activ\u00f3 con un detonador remoto, ocho empleados de la sede de Radio Free Europe resultaron heridos, algunos de gravedad.<\/p>\n

<\/p>\n

El servicio secreto rumano Securitate fue el responsable del ataque. En nombre del gobernante Nicolae Ceausescu, la estaci\u00f3n de radio de oposici\u00f3n financiada por los EE. UU., que transmit\u00eda detr\u00e1s de la Cortina de Hierro durante la Guerra Fr\u00eda, iba a ser clausurada. A cambio, \u00abCarlos\u00bb y sus c\u00f3mplices recibieron grandes cantidades de armas, explosivos y pasaportes falsificados profesionalmente.<\/p>\n

<\/p>\n

Sin embargo, el escuadr\u00f3n de mercenarios cometi\u00f3 un flagrante error t\u00e9cnico: en lugar de en el departamento rumano de Radio Free Europe, la devastadora bomba estall\u00f3 en el estudio checoslovaco.<\/p>\n

<\/p>\n

Un ba\u00fal lleno de explosivos<\/span><\/h2>\n

<\/p>\n

Un a\u00f1o despu\u00e9s, en febrero de 1982, otro plan de ataque fue igual de amateur. En forma de sicariato, se supon\u00eda que Bruno Breguet matar\u00eda al editor de un peri\u00f3dico en el exilio iraqu\u00ed en Par\u00eds haciendo estallar la oficina editorial del peri\u00f3dico. Afortunadamente para \u00e9l tambi\u00e9n, Breguet, junto con un c\u00f3mplice, fue interceptado en un estacionamiento cerca de los Campos El\u00edseos poco antes de que se llevara a cabo el crimen. El maletero de su coche estaba cargado de explosivos.<\/p>\n

<\/p>\n

Esta vez Breguet pas\u00f3 tres a\u00f1os y medio en prisi\u00f3n. Hasta el final, acus\u00f3 al estado franc\u00e9s de no apegarse a un acuerdo t\u00e1cito que supuestamente permit\u00eda que la resistencia palestina operara en Francia. <\/p>\n

<\/p>\n

Incluso despu\u00e9s de su liberaci\u00f3n, Breguet inicialmente se mud\u00f3 de nuevo a Ticino, pero viaj\u00f3 regularmente a Oriente Medio, Libia, L\u00edbano, Ir\u00e1n y, sobre todo, a Damasco en nombre de \u201cCarlos\u201d, donde pas\u00f3 casi un a\u00f1o en total. Bajo el paraguas protector del r\u00e9gimen de Asad y, en \u00faltima instancia, de la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica, \u201cCarlos\u201d y sus camaradas de armas m\u00e1s cercanos utilizaron la capital siria como lugar de refugio desde mediados de la d\u00e9cada de 1980. Con el final de la Guerra Fr\u00eda, este lugar de retiro tambi\u00e9n desapareci\u00f3.<\/p>\n

<\/p>\n

\n
\"Esposado, <\/div>
\n
\n

Esposado, Breguet fue llevado ante un tribunal militar israel\u00ed en el oto\u00f1o de 1970.<\/h2>\n

NZZ Libro<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

<\/p>\n

El camino a la CIA<\/span><\/h2>\n

<\/p>\n

El nuevo orden mundial puede haber jugado un papel importante en la decisi\u00f3n de Breguet de cambiar de bando y traicionar a sus compa\u00f1eros de toda la vida. En su libro, Adrian H\u00e4nni trata de descubrir qu\u00e9 fue lo que realmente llev\u00f3 al nativo de Ticino a ofrecerse a la CIA por un salario mensual de $ 3,000. Puede basarse en material de los Archivos Nacionales de los EE. UU. que a\u00fan no ha sido evaluado.<\/p>\n

<\/p>\n

Por supuesto, el hecho de que Breguet estuviera a sueldo de la CIA alimenta las conjeturas sobre su desaparici\u00f3n. El 10 de noviembre de 1995 abord\u00f3 el ferry a Italia en Grecia. Debido a que se le neg\u00f3 la entrada a su llegada a Ancona debido a su pasado, los funcionarios fronterizos italianos lo enviaron de regreso a Grecia, donde nunca llegar\u00eda. Desde entonces, se da por desaparecido a Bruno Breguet.<\/p>\n

<\/p>\n

El historiador H\u00e4nni considera tres escenarios en su libro: Breguet se escondi\u00f3, la CIA lo ayud\u00f3 a encontrar una nueva identidad en los EE. UU. o \u00abCarlos\u00bb se veng\u00f3 de \u00e9l por su traici\u00f3n.<\/p>\n

<\/p>\n

Despu\u00e9s de discutir todas las variantes, H\u00e4nni llega a una conclusi\u00f3n sorprendente, que no permitir\u00e1 que la especulaci\u00f3n se apague incluso 27 a\u00f1os despu\u00e9s de la misteriosa desaparici\u00f3n de Breguet.<\/p>\n

<\/p>\n

Adrian H\u00e4nni: terrorista y agente de la CIA: la incre\u00edble historia del suizo Bruno Breguet. NZZ Libro, Schwabe-Verlagsgruppe AG, Basilea 2023. 291 p\u00e1ginas, Fr. 36.\u2013.<\/p>\n

<\/p>\n

<\/p>\n
<\/p>\n
\n
<\/p>\n
<\/p>\n

<\/p>\n

Misterios sobre los terroristas suizos<\/span><\/h2>\n

<\/p>\n

<\/a> <\/p>\n

\n
<\/p>\n

B\u00e1rbara Hofman<\/span>

<\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/article>\n<\/div>\n

<\/div>\n


\n
Source link-58 <\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

En un nuevo libro, el historiador Adrian H\u00e4nni describe c\u00f3mo Bruno Breguet, el terrorista del Tesino, despu\u00e9s de a\u00f1os de luchar por la revoluci\u00f3n mundial, se ofreci\u00f3 al archienemigo estadounidense…<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":455977,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[1],"tags":[28512,77269,726,7270,12555],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/455976"}],"collection":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=455976"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/455976\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":455978,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/455976\/revisions\/455978"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/455977"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=455976"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=455976"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=455976"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}