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Taryn Foster cree<\/span> Los arrecifes de coral moribundos de Australia a\u00fan pueden ser rescatados, si ella puede acelerar los esfuerzos para salvarlos. Durante a\u00f1os, bi\u00f3logos como ella han ayudado a los arrecifes que luchan contra el aumento de las temperaturas y la acidez del oc\u00e9ano: han recolectado fragmentos de coral y los han cortado en pedazos para propagarlos y cultivarlos en viveros en tierra; tienen especies cruzadas para desarrollar resistencia al calor; han experimentado con probi\u00f3ticos como defensa contra enfermedades mortales.<\/p>\n Pero incluso trasplantar miles de estos corales sanos y mejorados a arrecifes da\u00f1ados no ser\u00e1 suficiente para salvar ecosistemas enteros, dice Foster. \u201cNecesitamos alguna forma de desplegar corales a escala\u201d. Suena como un trabajo para algunos robots.<\/p>\n En un oc\u00e9ano saludable, los corales individuales llamados p\u00f3lipos construyen su esqueleto extrayendo carbonato de calcio del agua de mar. Luego se fusionan con corales de la misma composici\u00f3n gen\u00e9tica para formar enormes colonias: arrecifes de coral. Pero a medida que el oc\u00e9ano absorbe m\u00e1s di\u00f3xido de carbono de la atm\u00f3sfera, el agua se vuelve m\u00e1s \u00e1cida, lo que dificulta que los p\u00f3lipos construyan sus esqueletos o eviten que se disuelvan. La acidificaci\u00f3n inhibe el crecimiento de los arrecifes y, con el aumento de la temperatura global de los oc\u00e9anos, los corales luchan por sobrevivir.<\/p>\n En la Gran Barrera de Coral, por ejemplo, el crecimiento de los corales se ha ralentizado en las \u00faltimas d\u00e9cadas, en parte porque durante las olas de calor los corales expulsan las diminutas algas que viven dentro de sus tejidos y les proporcionan nutrientes, lo que hace que se decoloren. Los corales blanqueados no est\u00e1n muertos, pero corren un mayor riesgo de inanici\u00f3n y enfermedades, y la p\u00e9rdida de los arrecifes de coral tiene un impacto devastador en los miles de peces, cangrejosc y otros animales marinos que dependen de ellos para refugiarse y alimentarse.<\/p>\n Cultivar corales de reemplazo en un vivero e injertarlos manualmente en los arrecifes existentes requiere mucho trabajo, es costoso y lento. Los corales crecen lentos por naturaleza: tardan de tres a diez a\u00f1os, seg\u00fan la especie, en construir un esqueleto de tama\u00f1o adulto. Con su empresa, Coral Maker, Foster est\u00e1 tratando de acelerar este proceso. Antes de su investigaci\u00f3n sobre los arrecifes de coral y el cambio clim\u00e1tico, Foster trabaj\u00f3 en el negocio de alba\u00f1iler\u00eda de su familia. Ahora est\u00e1 usando las m\u00e1quinas de vaciado en seco de la familia para producir formas de piedra caliza que se asemejan a los esqueletos naturales de los corales; el plan es proporcionar a los corales j\u00f3venes una base adecuada a partir de la cual puedan crecer m\u00e1s r\u00e1pido.<\/p>\n El primer prototipo del esqueleto Coral Maker tiene forma de c\u00fapula y seis tapones donde se pueden colocar fragmentos de coral vivo. El dise\u00f1o del esqueleto se inspira en la naturaleza: muchas especies, como los corales cerebro, crecen en forma de c\u00fapula, mientras que los corales ramificados o de placa crecen hacia arriba desde una base s\u00f3lida. Pero tambi\u00e9n existen desaf\u00edos con los esqueletos en forma de c\u00fapula, dice Foster. \u00abNo son tan f\u00e1ciles de fabricar como algo con una superficie plana, no son tan f\u00e1ciles de empacar en un pal\u00e9, no son tan f\u00e1ciles de pegar\u00bb. Es por eso que Foster contin\u00faa jugando con el dise\u00f1o para que la maquinaria de alba\u00f1iler\u00eda pronto pueda producir hasta 10,000 piezas por d\u00eda por solo unos pocos d\u00f3lares. Luego, el proceso podr\u00eda replicarse en otras f\u00e1bricas.<\/p>\n<\/div>\n