{"id":474485,"date":"2023-02-21T13:16:58","date_gmt":"2023-02-21T13:16:58","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/resena-de-berlin-disco-boy-de-giacomo-abbruzzese\/"},"modified":"2023-02-21T13:17:00","modified_gmt":"2023-02-21T13:17:00","slug":"resena-de-berlin-disco-boy-de-giacomo-abbruzzese","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/resena-de-berlin-disco-boy-de-giacomo-abbruzzese\/","title":{"rendered":"Rese\u00f1a de Berl\u00edn: ‘Disco Boy’ de Giacomo Abbruzzese"},"content":{"rendered":"


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\t\u00bfQu\u00e9 tienen en com\u00fan un emigrante bielorruso y un luchador por la libertad africano? Es una pregunta que el primer largometraje de Giacomo Abbruzzese, que tuvo su estreno mundial en Competici\u00f3n en el Festival de Cine de Berl\u00edn, responde de una manera seductora, m\u00e1gico-realista y digresiva que algo as\u00ed como<\/em> suma, aunque se requiere mucha buena fe por parte del espectador para que lo haga. Para ilustrar su extra\u00f1eza, chico discoteca<\/em> podr\u00eda describirse vagamente como una mezcla de Beau Travail<\/em> y T\u00edo Boonmee que puede recordar sus vidas pasadas<\/em>, dos pel\u00edculas muy diferentes. Si bien ambos est\u00e1n firmemente anclados en la historia del cine de autor, ninguno se parece al otro, y es ese contraste, el rico potencial abierto por el espacio intermedio, lo que est\u00e1 en juego aqu\u00ed.<\/p>\n

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\tLa apertura, que sirve como una especie de obertura que establece el estado de \u00e1nimo, presenta una visi\u00f3n de hombres negros durmiendo en un entorno natural primitivo. Luego pasamos a una visi\u00f3n de hombres blancos intoxicados en un entorno urbano primitivo: un autob\u00fas lleno de alborotadores bielorrusos est\u00e1 en un viaje en autocar a Polonia para un partido de f\u00fatbol. Su estatus como invitados no deseados queda claro cuando inmigraci\u00f3n ofrece inspeccionar sus pasaportes y recordarles severamente la fecha de vencimiento de sus visas de turista. Sin embargo, dos pasajeros, Aleksei (Franz Rogowski) y Mikhail (Michal Balicki), no se inmutan y se escabullen en la primera oportunidad.<\/p>\n

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\tLos dos amigos se muestran a s\u00ed mismos como pioneros (\u201cLos que tienen miedo se quedan en casa\u201d, dicen), y su verdadero destino es Francia, donde planean establecerse y rehacer sus vidas. Ese sue\u00f1o pronto se hace a\u00f1icos cuando Mikhail se ahoga durante el cruce de un r\u00edo, y Aleksei llega a Par\u00eds solo y perdido sin su compa\u00f1ero de ala. Sin ingresos y, lo que es m\u00e1s importante, sin documentaci\u00f3n, se une a la Legi\u00f3n Extranjera notoriamente exigente, una instituci\u00f3n que har\u00e1 la vista gorda a su estatus ilegal si est\u00e1 a la altura. Y despu\u00e9s de pasar sus estrictos requisitos de ingreso (en parte prueba de resistencia, en parte novatadas en la fraternidad), es admitido y enviado en un viaje de servicio a \u00c1frica.<\/p>\n

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\tEn paralelo corre la historia de Jomo (Morr Ndiaye), quien lidera el movimiento rebelde eco-positivo MEND, que defiende la emancipaci\u00f3n del delta del N\u00edger y es \u201cel enemigo n\u00famero uno del gobierno de Nigeria\u201d. Mientras Aleksei salta a trav\u00e9s de los aros para que su oficial al mando lo castigue, vemos a Jomo participar en danzas cham\u00e1nicas ext\u00e1ticas con su hermana Udoka (La\u00ebtitia Ky), y se necesita bastante tiempo, y no poca paciencia, para ver c\u00f3mo estas dos historias alguna vez. entrelazar. Esto lo hacen finalmente en una secuencia extraordinaria, filmada con im\u00e1genes t\u00e9rmicas, que involucra a ambos hombres en una lucha a muerte, de la que Aleksei sale victorioso pero traumatizado. Estas cicatrices mentales se exacerban cuando regresa a Par\u00eds y, en una visita a un club nocturno, ve (o imagina) que Udoka tambi\u00e9n est\u00e1 all\u00ed. <\/p>\n

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\tSuena extra\u00f1o y es es<\/em> extra\u00f1o, ya que Aleksei y Udoka nunca se conocieron, pero hay un v\u00ednculo instintivo entre los dos que introduce una resaca seductora de misticismo y, por razones demasiado largas para explicarlas aqu\u00ed, respalda el t\u00edtulo aparentemente incongruente de la pel\u00edcula.<\/p>\n

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\tEs un cambio de tono audaz que, reflexion\u00e1ndolo, no funciona m\u00e1s que para encontrar un nuevo \u00e1ngulo sobre el tema del combate militar y el TEPT, pero el estilo visual din\u00e1mico de Abbruzzese es extremadamente<\/em> convincente en el momento (ganador del Premio del Jurado de Cannes 2021 de Navid Lapid La rodilla de Ahed<\/em> operado en un nivel similar). Tambi\u00e9n ayuda que Rogowski, una gran presencia en Berl\u00edn este a\u00f1o con su carism\u00e1tica aparici\u00f3n en el t\u00edtulo Panorama pasajes<\/em>\u2014tiene las habilidades para llevarlo a cabo: la c\u00e1mara claramente ama sus fascinantes rasgos angulosos (\u00bfya se cancel\u00f3 la frase \u00abpoco convencionalmente guapo\u00bb?), pero hay una emoci\u00f3n en \u00e9l que realmente se mete debajo de la piel. <\/p>\n

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\tAlgunos podr\u00edan, y probablemente lo har\u00e1n, descartarlo todo como pretencioso, pero, incluso si lo es, este es el tipo preciso de pretensi\u00f3n de la que el cine se alimenta y prospera: una flexi\u00f3n alucinante de la imaginaci\u00f3n que crea im\u00e1genes indelebles y extra\u00f1as conexiones nuevas. en el cerebro. Eso es bastante bueno para una primera caracter\u00edstica. La pregunta emocionante ahora es, \u00bfqu\u00e9 har\u00e1 Abbruzzese a continuaci\u00f3n?<\/p>\n<\/p><\/div>\n