{"id":480116,"date":"2023-02-24T04:36:40","date_gmt":"2023-02-24T04:36:40","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/peter-bart-en-la-temporada-de-premios-de-hollywood-los-votantes-han-aprendido-a-desconfiar-del-rumor\/"},"modified":"2023-02-24T04:36:42","modified_gmt":"2023-02-24T04:36:42","slug":"peter-bart-en-la-temporada-de-premios-de-hollywood-los-votantes-han-aprendido-a-desconfiar-del-rumor","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/peter-bart-en-la-temporada-de-premios-de-hollywood-los-votantes-han-aprendido-a-desconfiar-del-rumor\/","title":{"rendered":"Peter Bart: En la temporada de premios de Hollywood, los votantes han aprendido a desconfiar del rumor"},"content":{"rendered":"


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\tEl tumulto anual de los Oscar siempre nos recuerda este mandato: nunca creas en el \u00abzumbido\u00bb. Cada pel\u00edcula importante llega con un aura, y por lo general es incorrecta o enga\u00f1osa.<\/p>\n

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\tEl zumbido de avance en El Padrino<\/em> fue tan desastroso que incluso Francis Coppola sinti\u00f3 que estaba condenado. Este a\u00f1o, Todo calmado en el frente oeste<\/em> fue considerado demasiado violento y deprimente para ser un contendiente, pero est\u00e1 recogiendo premios BAFTA (siete) y nominaciones al Oscar (nueve).<\/p>\n

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\tA lo largo de los a\u00f1os 80, todas las pel\u00edculas populares parec\u00edan tener una maldici\u00f3n. La producci\u00f3n de Baile del destello <\/em>fue tan ca\u00f3tico que incluso los dobles de riesgo ten\u00edan dobles. <\/em>fue mal interpretado y subpresupuestado, como testific\u00f3 su director.<\/p>\n

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\tClaramente, estas dos pel\u00edculas de principios de los 80 resultaron ser \u00e9xitos, si no hitos culturales. Sin embargo, los directores de ese momento parec\u00edan m\u00e1s interesados \u200b\u200ben hacer la guerra que en hacer pel\u00edculas. En respuesta, los ejecutivos de los estudios se volvieron tan \u00fatiles como los chatbots.<\/p>\n

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\tIncluso Tom Cruise, ese maestro de la manipulaci\u00f3n medi\u00e1tica que est\u00e1 en la carrera por los Oscar este a\u00f1o con Top Gun: Inconformista<\/em>pas\u00f3 por un per\u00edodo problem\u00e1tico con sus fan\u00e1ticos: les dijo que ser\u00eda cre\u00edble como un oficial nazi (valquiria<\/em>) o como senador republicano (Leones por corderos<\/em>). no lo estaba<\/p>\n

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\tDada la nueva jerarqu\u00eda de columnistas de premios en los \u00faltimos a\u00f1os, se ha vuelto m\u00e1s dif\u00edcil que las pel\u00edculas lleguen en medio de una ambig\u00fcedad silenciosa, como Chocar <\/em>en 2000. O incluso Shakespeare enamorado<\/em> en 1998. En ese a\u00f1o, la guerra de altos decibeles que enfrent\u00f3 al campo de Steven Spielberg (por Salvando al soldado Ryan<\/em>) contra Harvey Weinstein finalmente atrajo nuestra atenci\u00f3n hacia los combatientes m\u00e1s que hacia las pel\u00edculas.<\/p>\n

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\tMuchos de nosotros fuimos tomados por sorpresa hace un a\u00f1o por lo que parec\u00eda ser el afecto repentino hacia CODA<\/em>. O a\u00f1os antes cuando Par\u00e1sito <\/em>de repente se convirti\u00f3 en un \u00abmust see\u00bb (y \u00abmust vote\u00bb).<\/p>\n

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\tEn la d\u00e9cada de 1970, las peleas entre los estudios y los cineastas a menudo dieron forma al inter\u00e9s de la audiencia: observe la batalla por la edici\u00f3n que retras\u00f3 El Padrino<\/em> desde su preciada fecha navide\u00f1a hasta marzo. El medio insinu\u00f3 que la pel\u00edcula podr\u00eda ser in\u00e9dita.<\/p>\n

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\tEn los a\u00f1os 80, cada elecci\u00f3n de reparto parec\u00eda desencadenar controversias, ya que los ejecutivos de los estudios intervinieron p\u00fablicamente con segundas conjeturas.<\/p>\n

\n\tBaile del destello <\/em>trataba sobre una soldadora en Pittsburgh (Jennifer Beals) que so\u00f1aba con convertirse en bailarina. \u00bfEn realidad?<\/p>\n

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\tEl director bastante patricio, Herb Ross, consideraba a sus personajes de cuello azul como extraterrestres, seg\u00fan los medios. La propia Beals no era bailarina: tres o cuatro profesionales la doblaban y a los medios les gustaba adivinar qui\u00e9n hac\u00eda qu\u00e9.<\/p>\n

\n\tSin piedad <\/em>se centr\u00f3 en el conflicto entre un predicador (John Lithgow) que prohibi\u00f3 bailar en su peque\u00f1o pueblo y un joven rebelde (Kevin Bacon). No solo bailaba \u00e1gilmente, sino que tambi\u00e9n dominaba las citas b\u00edblicas para contrarrestar al predicador. El director brit\u00e1nico, Adrian Lyne, parec\u00eda desconcertado por la provinciana Am\u00e9rica de los 80.<\/p>\n

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\tAmbas pel\u00edculas fueron grandes \u00e9xitos. Los cr\u00edticos estaban desconcertados; Al p\u00fablico le encant\u00f3 la m\u00fasica y el baile. Giorgio Moroder (Baile del destello<\/em>) y Kenny Loggins (Sin piedad<\/em>) se convirtieron en h\u00e9roes populares.<\/p>\n

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\tEran Sin piedad <\/em>lanzado hoy, el estudio seguramente habr\u00eda importado a la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, para dar fe de su mensaje: los conservadores en Finlandia est\u00e1n tratando de derrotarla porque los primeros ministros no deber\u00edan bailar.<\/p>\n

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\tNo hay nada como un primer ministro fotog\u00e9nico para mejorar el rumor.<\/p>\n<\/p><\/div>\n