{"id":533567,"date":"2023-03-23T21:16:03","date_gmt":"2023-03-23T21:16:03","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/cielo-en-la-tierra\/"},"modified":"2023-03-23T21:16:06","modified_gmt":"2023-03-23T21:16:06","slug":"cielo-en-la-tierra","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/cielo-en-la-tierra\/","title":{"rendered":"‘Cielo en la tierra’"},"content":{"rendered":"


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No era frecuente que un autom\u00f3vil pasara por la US 19, pero cuando el estruendo lento se acercaba a Weeki Wachee Springs, llamado as\u00ed por la tribu Seminole, las sirenas esperaban: sonriendo bellamente en sus trajes de ba\u00f1o, haciendo se\u00f1as a los veh\u00edculos para que ingresaran al estacionamiento de su empleador. . En 1946, el ex oficial de la Marina de los EE. UU. Newton Perry explor\u00f3 el manantial de Florida como un lugar ideal para construir una atracci\u00f3n en la carretera. Un a\u00f1o m\u00e1s tarde, hab\u00eda limpiado los montones de escombros y basura abandonados y construy\u00f3 un teatro rudimentario de 18 asientos en la piedra caliza, lo que permiti\u00f3 a los visitantes mirar directamente a las profundidades azules aparentemente sin fondo del manantial.<\/p>\n

Perry entren\u00f3 a mujeres locales para girar bajo el agua durante largos per\u00edodos sin tanques de ox\u00edgeno (comiendo pl\u00e1tanos, bebiendo botellas de Grapette, realizando ballet sincronizado) con sus mangueras de aire compartidas ocultas. Juntos formaron una imagen milagrosa: cobran vida sirenas folcl\u00f3ricas. En 1959, la cadena de transmisi\u00f3n ABC vio el alto potencial de ganancias de Weeki Wachee y compr\u00f3 el sitio. Se desarroll\u00f3 un nuevo teatro de un mill\u00f3n de d\u00f3lares para presentar espect\u00e1culos diarios de sirenas, con 400 asientos y un sistema de altavoces. M\u00e1s tarde, los funcionarios del estado de Florida se hicieron cargo del parque. Las sirenas nunca se fueron.<\/p>\n

A principios de 2020, la fot\u00f3grafa con sede en Los \u00c1ngeles, Chantal Anderson, pas\u00f3 varios d\u00edas documentando a los artistas en Weeki Wachee: un peque\u00f1o grupo compuesto por unas 20 sirenas y tres pr\u00edncipes. A nivel mundial, la subcultura merfolk hab\u00eda ido cobrando velocidad, popular en parte por su capacidad para liberar a los cosplayers de los confines de su forma f\u00edsica. La gente del mar acud\u00eda a los foros, como MerNetwork, para comparar tridentes, fabricantes de colas de silicona y tarifas de aparici\u00f3n en fiestas. Estaban organizando reuniones locales de \u00abvaina\u00bb a trav\u00e9s de Facebook y asistiendo a convenciones, como MerMagic Con de Washington, DC, que se anuncia a s\u00ed misma como la reuni\u00f3n de sirenas m\u00e1s grande del mundo. A medida que crece la comunidad de sirenas, Weeki Wachee representa una especie de zona cero: el hogar original de la actuaci\u00f3n submarina. Su elenco, atletas que giran y bailan de 15 a 20 pies por debajo de la superficie del agua, contra fuertes corrientes, parecen atados a trav\u00e9s del tiempo, conectados entre s\u00ed y con las profundidades burbujeantes. Cuando describen el manantial, lo hacen con una reverencia que bordea lo espiritual.<\/p>\n

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Foto: Chantal Anderson<\/span>\n <\/p>\n<\/div>\n

\u201cEstoy fascinado por la relaci\u00f3n c\u00edclica entre las personas y sus paisajes\u201d, dice Anderson. \u201cVivir cerca de un elemento natural, como un cuerpo de agua, puede afectar radicalmente el bienestar de una persona. Puede dar forma a toda su vida. Realmente nunca he estado en ning\u00fan lugar como Weeki Wachee. El agua es turquesa. Es tan id\u00edlico que se siente artificial\u201d.<\/p>\n

Muchos de los sujetos de Anderson ya no trabajan en el parque (sus colas pertenecen a una nueva generaci\u00f3n), pero permanecen paralizados por la pr\u00edstina caverna subacu\u00e1tica. Algunos, como la veterana Vicki Smith, de 83 a\u00f1os, han pensado en el antiguo manantial durante d\u00e9cadas. \u201cVicki vive en un r\u00edo cercano que se conecta con el manantial\u201d, dice Anderson. \u201cY ha nadado todos los d\u00edas en esa agua durante la mayor parte de su vida. Su casa est\u00e1 llena de recuerdos de sirenas: pinturas de sirenas, almohadas y carteles, \u00e1lbumes de fotos de sus a\u00f1os actuando. Pens\u00e9 que era una vida tan hermosa interactuar \u00edntimamente con este cuerpo de agua durante tanto tiempo\u201d.<\/p>\n

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\u201cHab\u00eda una verdadera camarader\u00eda entre las sirenas que no esperaba\u201d, dice la fot\u00f3grafa Chantal Anderson. \u201cEstos momentos antes del espect\u00e1culo se sintieron tan \u00edntimos y serenos. Las sirenas se maquillan ellas mismas: era tan fraternal y dulce, todas ellas sentadas juntas mientras se arreglaban. Me record\u00f3 cuando te maquillas con amigas, practicando juntas frente al espejo\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cDurante el tiempo que estuve en Weeki, cos\u00ed y remend\u00e9 muchos de los disfraces\u201d, dice Elizabeth Wilder, nativa de Florida y ex sirena que creci\u00f3 visitando el parque. \u201cLas colas las hace una costurera local a la medida de cada ni\u00f1a. A medida que pasan los a\u00f1os, ciertas colas se transmiten de generaci\u00f3n en generaci\u00f3n. En lugar de decir, soy talla mediana<\/em>dir\u00edamos, Soy una talla Taylor<\/em>. Para el desgaste diario, aprendimos a repararlos por nuestra cuenta\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cHay mucha confianza entre las sirenas\u201d, dice Wilder. \u201cLo que hacemos es \u00fanico y tenemos que ser capaces de trabajar juntos. Hay un sentido de familia que va m\u00e1s all\u00e1 de un trabajo normal\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cEs como volar\u201d, contin\u00faa Wilder. \u201cCon el tiempo, ya ni siquiera sientes que est\u00e1s bajo el agua\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Las sirenas realizan tres espect\u00e1culos de 45 minutos por d\u00eda en un auditorio de 400 asientos. La exalumna Catherine LaMondra recuerda la rutina previa al espect\u00e1culo: \u201cLlegaba a las 9 am Cuando empezaba por primera vez, estaba practicando una coreograf\u00eda en seco frente a un espejo o meti\u00e9ndose al agua para practicar durante los primeros 30 minutos. A las 10 am, todos nos maquill\u00e1bamos y discut\u00edamos qu\u00e9 color de cola \u00edbamos a usar para el espect\u00e1culo. A las 10:45, nos dirig\u00edamos al muelle trasero para ponernos las colas\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Las audiciones de sirenas actuales de Weeki Wachee son un proceso de tres partes, organizadas una o dos veces al a\u00f1o para llenar un pu\u00f1ado de lugares. (Alrededor de 50 aspirantes se postulan cada vez). La primera ronda consiste en un nado de resistencia cronometrado de 400 yardas. En la segunda ronda, las aspirantes a sirenas realizan habilidades simples bajo el agua; aqu\u00ed, se las juzga menos por la competencia t\u00e9cnica y m\u00e1s por la fluidez con la que se mueven a trav\u00e9s del agua. La \u00faltima ronda ocurre en tierra: una entrevista en persona. Despu\u00e9s de la selecci\u00f3n, comienza el entrenamiento.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Para Kourtney Ellinghuysen, Weeki Wachee fue su primer trabajo como sirena. Nad\u00f3 en su azul profundo durante media d\u00e9cada y, como muchos de sus compa\u00f1eros, descubri\u00f3 algo transformador debajo de la l\u00ednea de flotaci\u00f3n. \u201cEn el momento en que el agua toc\u00f3 mi piel, sent\u00ed este fr\u00edo manto de ingravidez. La corriente en ciertos lugares era tan fuerte que se sent\u00eda como si me estuvieran arrastrando detr\u00e1s de un avi\u00f3n, y mi cabello flu\u00eda detr\u00e1s de m\u00ed tan r\u00e1pido. A medida que ascend\u00eda, haciendo ballet y volteretas hacia atr\u00e1s, se sent\u00eda como si flotara hacia arriba\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cAprendimos cu\u00e1nto puede afectar la cantidad de ox\u00edgeno en tus pulmones: tu movimiento, tu posici\u00f3n en el agua y c\u00f3mo realizas los trucos. Puedes exhalar aire para que tu cuerpo se hunda. Inhalas para montar y girar\u201d, dice Ellinghuysen.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cMe gradu\u00e9 de la escuela secundaria a los 17 a\u00f1os. Fui animadora durante los cuatro a\u00f1os… Dos de mis amigas m\u00e1s cercanas se hab\u00edan graduado el a\u00f1o anterior y estaban nadando en Weeki Wachi Spring como sirenas\u201d, recuerda Vicki Smith, una ex sirena. \u201cMe llamaron con historias de lo divertido que fue: conocer estrellas de cine, tomarse una foto, firmar aut\u00f3grafos. Pero sobre todo, hab\u00edan descubierto la magia<\/em>. Su alegr\u00eda, emoci\u00f3n y amor por Weeki se convirtieron en los m\u00edos\u201d. <\/p>\n

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Fotograf\u00edas del archivo personal de Vicki Smith.<\/p>\n<\/div><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Mermaid Stayce, una artista actual en el parque.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cEl proceso de capacitaci\u00f3n fue largo y desafiante\u201d, dice LaMondra. \u201cEmpiezas como presentador y posador, y haces entrenamiento en la superficie. Un anfitri\u00f3n sienta a la gente en el teatro de sirenas bajo el agua; un poser usa una cola de sirena y toma fotos con los invitados. El entrenamiento de superficie implica aprender los movimientos b\u00e1sicos y la coreograf\u00eda utilizada en los espect\u00e1culos. Alrededor de un mes despu\u00e9s obtuvimos la certificaci\u00f3n de buceo. Alcanzar el ‘estado de sirena’ toma hasta dos a\u00f1os. Cuando nad\u00e9 en mi primer espect\u00e1culo, me sent\u00eda c\u00f3moda con mi cola de tela. Aprender a nadar con las piernas atadas se convierte en una segunda naturaleza\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cEl truco en el que todos estamos conectados y sosteni\u00e9ndonos de la cola se llama rueda de la fortuna\u201d, dice Ellinghuysen. \u201cMi favorita era una rueda de la fortuna con patas, cambiando la posici\u00f3n de las piernas mientras rem\u00e1bamos\u201d. <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cCuando est\u00e1s entrenando por primera vez, es muy dif\u00edcil recordar poner todos los elementos juntos\u201d, explica LaMondra. \u201cEst\u00e1 la coreograf\u00eda, respirar, mantener la cara relajada, luego sonriendo<\/em>, cantando las palabras, la colocaci\u00f3n de la manguera de aire, la flotabilidad, el conocimiento de d\u00f3nde est\u00e1n las otras ni\u00f1as y el tiempo. Cuando eres una sirena mayor, definitivamente puedes divertirte m\u00e1s con eso\u201d. <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cHay un momento del d\u00eda\u201d, explica Smith, \u201calrededor de las 2 pm o las 3 pm en un d\u00eda despejado, cuando el sol arroja rayos hacia el agujero profundo. El movimiento del for\u00fanculo lo hace bailar y balancearse. Hay d\u00edas en que llueve y puedes mirar hacia la superficie y ver un mill\u00f3n de estrellas bailando cuando las gotas golpean la superficie. Pero lo mejor de todo, la m\u00e1s alegre, pac\u00edfica e inolvidable de mis experiencias como sirena, es ser el \u00faltimo en salir despu\u00e9s de que todos los dem\u00e1s hayan salido. No quiero irme, pero s\u00e9 que debo hacerlo\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cCuando ABC compr\u00f3 la primavera en 1959, \u00a1todo cambi\u00f3! Ten\u00edamos hermosos y elegantes trajes de ba\u00f1o\u201d, recuerda Smith. \u201cUna Rockette jubilada de Nueva York vino a ense\u00f1arnos movimientos de ballet. Tambi\u00e9n cre\u00f3 el primer espect\u00e1culo disfrazado, Las sirenas y los piratas<\/em> \u2026 Recuerdo nadar para Elvis en el 61: hablaba muy suavemente y era educado. Nos dio a cada uno de nosotros un \u00e1lbum autografiado de sus \u00faltimos \u00e9xitos. El m\u00edo dec\u00eda: ‘Para Vicki, Saludos cordiales, Elvis’\u201d. <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cMi mam\u00e1 me inspir\u00f3 para hacer una audici\u00f3n\u201d, dice Wilder. \u201cElla quer\u00eda ser una sirena cuando ten\u00eda mi edad, pero nunca tuvo la oportunidad, en ese entonces eran audiciones cerradas. Era una gran nadadora y buceadora, as\u00ed que me ense\u00f1\u00f3 a nadar cuando era joven. Tengo buenos recuerdos de tener fiestas de t\u00e9 bajo el agua con ella en el fondo de nuestra piscina. En 2019, mi madre vio que se anunciaban audiciones al p\u00fablico y me pidi\u00f3 que lo hiciera por ella. Cuanto m\u00e1s avanzaba en el proceso, m\u00e1s me enamoraba\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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Smith comenz\u00f3 en el parque en 1957 y, hasta hace poco, todav\u00eda actuaba espor\u00e1dicamente como parte de Legendary Sirens. \u201cA veces la gente no entiende del todo cuando decimos: ‘Una vez sirena, siempre sirena’. Pero las sirenas de los manantiales de Weeki Wachee son las \u00fanicas personas en el mundo que han experimentado la alegr\u00eda de flotar ingr\u00e1vidamente en un \u00fanico manantial de agua dulce a 72 grados. Todo lo que siempre so\u00f1\u00e9 fue volver a Weeki una vez m\u00e1s. La libertad de la ingravidez. La tranquilidad. La sensaci\u00f3n del agua en tu cuerpo. Incluso con la visi\u00f3n borrosa, es el cielo en la tierra\u201d.<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n

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\u201cReconozco la comunidad y el estilo de vida de las sirenas en l\u00ednea\u201d, dice LaMondra. \u201cSin embargo, las sirenas Weeki Wachee son mundialmente famosas. Siento que estamos apartados, la \u00e9lite… Ser una sirena nunca ser\u00e1 ‘solo un trabajo’. Me siento verdaderamente honrado de haber sido parte de la historia. Apreciar\u00e9 mis d\u00edas all\u00ed mientras viva\u201d.<\/p>\n

\n Fotograf\u00edas por<\/span> Chantal Anderson\n <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/div><\/div>\n<\/div><\/div>\n


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