Fue principalmente la m\u00fasica de cine lo que hizo famoso a Sakamoto. En 1983 tambi\u00e9n fue visto como actor en \u00abFuryo – Merry Christmas, Mr. Lawrence\u00bb junto a David Bowie. Ya sea por \u00abEl \u00faltimo emperador\u00bb (por cuya banda sonora recibi\u00f3 un Oscar en 1987), \u00abEl cielo protector\u00bb (1990) o \u00abEl renacido\u00bb (2015), Sakamoto siempre logr\u00f3 sumergirse en una obra en t\u00e9rminos de atm\u00f3sfera. Esto llev\u00f3 al director Alejandro Gonz\u00e1lez I\u00f1\u00e1rritu a felicitarlo: \u201cNecesitaba un compositor que entendiera el silencio. Ryuichi Sakamoto fue la primera opci\u00f3n\u00bb.<\/p>\n
Sakamoto sab\u00eda sobre el silencio. Inspirado por el impresionismo de Claude Debussy, el pianista y compositor japon\u00e9s se convirti\u00f3 en un especialista en sonidos que fluyen con calma. A menudo difund\u00eda amplios paisajes sonoros en los que uno pod\u00eda sumergirse y que adornaba con tonos de piano escasamente punteados, lo que le convert\u00eda, junto a Brian Eno, en un destacado representante de la m\u00fasica ambiental.<\/p>\n
Sin embargo, Sakamoto ten\u00eda muchas caras. Nacido en Tokio en 1952, desarroll\u00f3 un gran inter\u00e9s por los instrumentos electr\u00f3nicos mientras estudiaba en la escuela de arte. A los 18 a\u00f1os ya estaba experimentando con las posibilidades de los primeros modelos de sintetizadores. La pasi\u00f3n por las innovaciones tecnol\u00f3gicas iba a durar toda su vida. Al mismo tiempo se destac\u00f3 como pianista solista. <\/p>\n