{"id":560732,"date":"2023-04-07T12:14:21","date_gmt":"2023-04-07T12:14:21","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/en-los-campos-de-bretana-la-industria-alimentaria-y-la-cultura-del-miedo\/"},"modified":"2023-04-07T12:14:25","modified_gmt":"2023-04-07T12:14:25","slug":"en-los-campos-de-bretana-la-industria-alimentaria-y-la-cultura-del-miedo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/en-los-campos-de-bretana-la-industria-alimentaria-y-la-cultura-del-miedo\/","title":{"rendered":"En los campos de Breta\u00f1a, la industria alimentaria y la cultura del miedo"},"content":{"rendered":"
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Es un rompecabezas de sufrimientos y silencios cuyas piezas est\u00e1n esparcidas por Breta\u00f1a. Un caleidoscopio de destinos m\u00e1s o menos abollados. Al principio, hay rumores: parece que fulano ha \u00ablo viv\u00ed\u00bb<\/em>que otro conoce a alguien que \u00absabe\u00bb<\/em>\u2026 El mundo<\/em> Sigui\u00f3 estas pistas, cotej\u00f3 la informaci\u00f3n para llegar a cuarenta y ocho testimonios de mujeres y hombres que se opon\u00edan, de una forma u otra, a las reglas t\u00e1citas del complejo agroindustrial bret\u00f3n, o que, simplemente, no las cumpl\u00edan. todos hubieran sabido \u00abconcordancia de hechos desafortunados\u00bb<\/em>, para usar el eufemismo de un hijo de campesinos del pa\u00eds de Le\u00f3n. Enti\u00e9ndase: presiones, intimidaciones, trabas, hostigamientos, sabotajes\u2026 Estos relatos tienden a mostrar que la agroindustria local debe su sustentabilidad, en proporciones dif\u00edciles de definir, al uso de diversas formas de violencia. Muchas presuntas v\u00edctimas afirman haber vivido \u00bb un infierno \u00ab<\/em>algunos confiados en que incluso han considerado el suicidio.<\/p>\n \u00abA los que se oponen al sistema, los llamamos ‘terroristas suicidas'\u00bb<\/em>, explica, amargada, Christine Meignan. Este ex criador, director de una organizaci\u00f3n de productores de leche, intercambia constantemente con los ganaderos. Se codea con muchos que ya no se encuentran en su profesi\u00f3n y su evoluci\u00f3n hacia estructuras cada vez m\u00e1s grandes, m\u00e1s endeudadas, m\u00e1s expuestas a los vaivenes de los mercados y m\u00e1s dependientes de actores ajenos a las fincas. Pero la mayor\u00eda habr\u00eda renunciado a la lucha: \u201cMe dicen: \u00a1est\u00e1 bien, tengo una vida, estoy cansado! Estoy cansado. \u00bb<\/em> Aquellos que, \u00abpor coraje o por imprudencia\u00bb<\/em>no te rindas frente a un sistema \u00abpoderoso y violento\u00bb.<\/em><\/p>\n Michel es uno de estos \u201cterroristas suicidas\u201d. Con varios compa\u00f1eros, este agricultor cre\u00f3, en la d\u00e9cada de 2010, una estructura diferente para dejar de depender de las empresas y cooperativas de las que acusa\u00abexplotar a los campesinos\u00bb<\/em>. Al pasar por alto a los sectores tradicionales, \u00e9l y sus compa\u00f1eros han interferido en la geopol\u00edtica agroindustrial. Su iniciativa se convirti\u00f3 en las Estaciones de la Cruz.<\/p>\n Todo comenz\u00f3 con una llamada telef\u00f3nica de un ejecutivo de una instituci\u00f3n agr\u00edcola. \u201c\u00c9l me dijo: ‘Te pondremos de rodillas, te romperemos la espalda’. \u00bb<\/em> Posteriormente, los procedimientos bancarios y administrativos habr\u00edan resultado interminables. A estos obst\u00e1culos se habr\u00eda sumado la intimidaci\u00f3n: \u201cRecib\u00ed amenazas de muerte, an\u00f3nimas o no. Recib\u00ed cientos de mensajes de texto de todo tipo\u2026\u201d<\/em> Finalmente, los sabotajes: \u201cNos pusieron antibi\u00f3ticos en la leche. Probablemente sucedi\u00f3 de noche: los muchachos llegan a la granja y vac\u00edan las jeringas en el tanque de leche. Finalmente, los antibi\u00f3ticos son detectados por la lecher\u00eda y el productor es sancionado. M\u00e9todos secretos. \u00bb<\/em> Michel dice que nunca present\u00f3 una denuncia por temor a represalias. \u00ab\u00a1No tienes pruebas y nunca las tendr\u00e1s! <\/em>el Advierte. Lo que nos salv\u00f3 fue nuestro silencio. \u00bb<\/em><\/p>\n