\u00c1frica Estudio\/Shutterstock.com<\/span><\/figcaption><\/figure>\n\u00bfAlguna vez te has encontrado con antojos de bocadillos azucarados o grasos? Tal vez despu\u00e9s de comerlos, te das cuenta de que quieres m\u00e1s y m\u00e1s. En algunos escenarios, es posible que no le gusten otros alimentos ricos en nutrientes que tienen cantidades m\u00e1s bajas de az\u00facar o grasa.<\/p>\n
\u00bfPor qu\u00e9 es esto? \u00bfEs posible que el az\u00facar est\u00e9 alterando tus preferencias alimenticias? En realidad, hay algo de potencial para eso.<\/p>\n
Un nuevo estudio que examin\u00f3 a un peque\u00f1o grupo de personas encontr\u00f3 que ciertos tipos de refrigerios con alto contenido de az\u00facar y grasa tienen el potencial de alterar el funcionamiento del cerebro de una persona. Para algunos, hace que anhelen y prefieran alimentos con alto contenido de az\u00facar y grasas.<\/p>\n
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Si bien el estudio no es concluyente, los hallazgos sugieren que los alimentos grasos y azucarados estimulan el sistema de dopamina del cerebro humano. Esto significa que este tipo de alimentos dan al consumidor una sensaci\u00f3n de recompensa, llev\u00e1ndolo a desear a\u00fan m\u00e1s ese alimento para producir m\u00e1s dopamina.<\/p>\n
Sin embargo, antes de tirar sus alimentos reconfortantes o evitar la venta de panader\u00eda local, tenga en cuenta que este estudio involucr\u00f3 a un grupo limitado de participantes. Se necesita m\u00e1s investigaci\u00f3n para comprender completamente el v\u00ednculo entre el az\u00facar, la grasa y el cerebro humano.<\/p>\n
Dicho esto, es probable que nuestros h\u00e1bitos diet\u00e9ticos tengan un mayor impacto en nuestros cerebros de lo que pens\u00e1bamos anteriormente. Si se encuentra constantemente buscando refrigerios azucarados o grasosos, podr\u00eda valer la pena completar su dieta con otros alimentos ricos en nutrientes (incluidas las grasas saludables) para alimentar adecuadamente su cuerpo y cerebro.<\/p>\n<\/div>\n