REMY DE LA MAUVINI\u00c9RE\/AP<\/span> <\/figcaption><\/figure>\nEran un pu\u00f1ado al comienzo del juicio, ahora tienen al menos sesenta y cinco. En el juicio por el atentado de la rue Copernic, el n\u00famero de partes civiles sigue aumentando a lo largo de los d\u00edas de audiencia. Esta es una de las peculiaridades del juicio, hist\u00f3rico en m\u00e1s de un sentido, del primer atentado antisemita homicida cometido en Francia desde la Liberaci\u00f3n, pero tambi\u00e9n del primer atentado masivo con bomba de la historia del terrorismo en el Hex\u00e1gono.<\/p>\n
El 3 de octubre de 1980, hace una eternidad desde el punto de vista del calendario, nunca hab\u00eda parecido tan cercano como este mi\u00e9rcoles 19 de abril de 2023, cuando una decena de civiles acudi\u00f3 a declarar a la barra, seguida de otros tantos abogados que los representaban. . Ya se hab\u00eda dedicado media jornada a las partes civiles, hace unos d\u00edas, pero no fue suficiente de cara a la constituci\u00f3n de nuevas partes civiles que los letrados desgranan cada jornada al inicio de la audiencia. Por lo tanto, el Tribunal de lo Penal de Par\u00eds especialmente compuesto ha despejado una nueva ma\u00f1ana para las v\u00edctimas directas e indirectas de este ataque olvidado.<\/p>\n
\u201cAlgo muri\u00f3 por m\u00ed\u201d<\/h2>\n
METROa m\u00ed<\/sup> S. \u2013el presidente del tribunal, Christophe Petiteau, pidi\u00f3 que la prensa no publicara los apellidos de las partes civiles\u2013 recuerda haber tenido que pasar por encima de un cuerpo para salir de la sinagoga. Ella ten\u00eda 13 a\u00f1os. Cuando lleg\u00f3 a casa, su madre le dijo: \u00ab\u00bfNo est\u00e1s herido?\u00bb Entonces est\u00e1 bien. \u00bb<\/em> Luego tom\u00f3 en la cara la frase de Raymond Barre, el entonces primer ministro: \u201cEstoy lleno de indignaci\u00f3n con respecto a este ataque atroz que quer\u00eda golpear a los jud\u00edos que iban a la sinagoga y que golpe\u00f3 a los franceses inocentes que cruzaban la rue Copernic\u201d<\/em>\u00e9l dijo. \u00ab<\/em> [En une phrase,] Ya no era franc\u00e9s y ya no era inocente. A partir de entonces, nunca volv\u00ed a ser el mismo. \u00bb <\/em>Ella pas\u00f3 por un \u00abdepresi\u00f3n profunda\u00bb.<\/em><\/p>\n\nLea tambi\u00e9n:<\/span> Art\u00edculo reservado para nuestros suscriptores<\/span><\/span> Cuarenta y dos a\u00f1os despu\u00e9s del atentado de la rue Copernic, su presunto autor est\u00e1 siendo juzgado <\/span> <\/div>\n<\/section>\n\u201cMi comunidad y yo nunca hemos sido considerados v\u00edctimas\u201d<\/em>, ella est\u00e1 indignada. En ese momento, ten\u00eda que estar muerto o herido en un ataque para tener derecho a este estatus. Ser objetivo no era suficiente. Sin embargo, los aproximadamente 320 fieles de la rue Copernic resultaron poco o nada heridos por la bomba que estall\u00f3 en la calle. El falso techo y el dosel de la sinagoga se derrumbaron sobre ellos. Ya nadie soporta los ruidos de los petardos, algunos se han vuelto supersticiosos, como esta mujer que ya no se lava el cabello los viernes por la ma\u00f1ana, como lo hizo ese d\u00eda.<\/p>\nTe queda el 51,01% de este art\u00edculo por leer. Lo siguiente es solo para suscriptores.<\/strong><\/p>\n<\/p><\/div>\n
\n
Source link-5 <\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Tras el atentado de la rue Copernic en Par\u00eds el 3 de octubre de 1980. REMY DE LA MAUVINI\u00c9RE\/AP Eran un pu\u00f1ado al comienzo del juicio, ahora tienen al menos…<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":588270,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[1],"tags":[1323,85036,194,8504,9443,1564,246,9502,1776],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/588269"}],"collection":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=588269"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/588269\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":588271,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/588269\/revisions\/588271"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/588270"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=588269"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=588269"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=588269"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}