Los gobiernos locales en China aprobaron m\u00e1s energ\u00eda de carb\u00f3n nueva en los primeros tres meses de 2023 que en todo 2021, seg\u00fan documentos oficiales.<\/p>\n Las aprobaciones, analizadas por Greenpeace, revelan que entre enero y marzo de este a\u00f1o se aprobaron al menos 20,45 gigavatios de carb\u00f3n, frente a los 8,63 GW del mismo per\u00edodo de 2022. En todo 2021 se aprobaron 18 GW de carb\u00f3n.<\/p>\n Un plan quinquenal del Partido Comunista Chino (PCCh) de 2016 hab\u00eda puesto un gran \u00e9nfasis en reducir el uso de carb\u00f3n y desarrollar fuentes de energ\u00eda limpia. En 2020, Xi Jinping, el l\u00edder de China, prometi\u00f3 que el pa\u00eds ser\u00eda neutral en carbono para 2060.<\/p>\n Esto provoc\u00f3 una era de aprobaciones de energ\u00eda de carb\u00f3n reducidas a medida que los gobiernos locales buscaban mantener sus econom\u00edas locales en control con las prioridades de Beijing. Se produjo un aumento en las aprobaciones de energ\u00eda de carb\u00f3n en 2020 cuando finaliz\u00f3 el plan de cinco a\u00f1os, ya que los gobiernos locales anticiparon restricciones a\u00fan m\u00e1s estrictas sobre la expansi\u00f3n del carb\u00f3n en la pr\u00f3xima ronda.<\/p>\n Pero en 2021, China sufri\u00f3 enormes cortes de energ\u00eda, lo que provoc\u00f3 un cambio dram\u00e1tico en las prioridades energ\u00e9ticas del PCCh. En septiembre, el precio de la electricidad se dispar\u00f3 cuando las f\u00e1bricas reabrieron para atender la demanda mundial mientras el resto del mundo sal\u00eda de la pandemia de Covid-19. Pero el gobierno hab\u00eda limitado los precios, por lo que muchas centrales el\u00e9ctricas redujeron la producci\u00f3n en lugar de operar con p\u00e9rdidas.<\/p>\n China depende del carb\u00f3n para m\u00e1s de la mitad de su consumo de energ\u00eda. Mientras los hogares en el norte m\u00e1s fr\u00edo del pa\u00eds enfrentaban la perspectiva de un invierno agotador sin calefacci\u00f3n, la ret\u00f3rica del gobierno pas\u00f3 de reducir el carb\u00f3n a priorizar la seguridad energ\u00e9tica. Eso result\u00f3 en un \u00abmito de que si construyes m\u00e1s plantas de energ\u00eda, traer\u00e1 m\u00e1s seguridad energ\u00e9tica\u00bb, dijo Xie Wenwen, un activista clim\u00e1tico y energ\u00e9tico de Greenpeace.<\/p>\n La guerra en Ucrania, que dispar\u00f3 los precios mundiales de la energ\u00eda, fue \u201cotro gran evento que aliment\u00f3 la narrativa de la seguridad energ\u00e9tica\u201d.<\/p>\n Los activistas argumentan que para satisfacer las crecientes necesidades energ\u00e9ticas de China, no se necesita m\u00e1s carb\u00f3n, sino una red m\u00e1s flexible. Un informe publicado este mes por el Centro de Investigaci\u00f3n sobre Energ\u00eda y Aire Limpio se\u00f1al\u00f3 que las tecnolog\u00edas para almacenar energ\u00eda limpia \u201ca\u00fan no est\u00e1n lo suficientemente maduras como para implementarse a la escala considerada esencial\u201d para los planes de China de expandir el uso de energ\u00eda renovable.<\/p>\n