Panam\u00e1<\/strong><\/em> es un actor de finales de los ochenta cargado de drogas, sexo y rock and roll. Cole Hauser y Mel Gibson interpretan a agentes de la CIA que negocian un acuerdo de armas en el narcoestado antes de que Estados Unidos derribe a Manuel Noriega. Toda la pel\u00edcula se siente como un episodio de Miami Vice con esteroides. Mujeres escasamente vestidas con flequillo rociado y capos de la droga con camisas abiertas y pantalones color pastel matan por el todopoderoso d\u00f3lar. El tiroteo est\u00e1 mal editado, pero obtuve un placer culpable de la narrativa s\u00f3rdida y sangrienta.<\/p>\n <\/p>\n Panam\u00e1<\/em> abre en 1989 Texas con Stark (Gibson) reclutando a un borracho y abatido James Becker (Hauser) para una misi\u00f3n de operaciones encubiertas. Todav\u00eda afligido por su esposa asesinada, Becker es un ex-marine de \u00e9lite con olfato para navegar en situaciones peligrosas. Es informado por otro esp\u00eda, Hank Burns (Charlie Weber), tambi\u00e9n encubierto en el pa\u00eds centroamericano. La CIA quiere comprar clandestinamente un helic\u00f3ptero sovi\u00e9tico a funcionarios gubernamentales corruptos. Estados Unidos estaba canalizando ilegalmente armas a los contras nicarag\u00fcenses.<\/p>\n <\/p>\n