{"id":69005,"date":"2022-08-03T10:08:38","date_gmt":"2022-08-03T10:08:38","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/batalla-en-torno-al-futbol-entre-franceses-y-britanicos\/"},"modified":"2022-08-03T10:08:40","modified_gmt":"2022-08-03T10:08:40","slug":"batalla-en-torno-al-futbol-entre-franceses-y-britanicos","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/batalla-en-torno-al-futbol-entre-franceses-y-britanicos\/","title":{"rendered":"Batalla en torno al f\u00fatbol entre franceses y brit\u00e1nicos"},"content":{"rendered":"


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Mi s\u00e1bado por la ma\u00f1ana en Par\u00eds sigui\u00f3 m\u00e1s o menos este programa, al menos antes de que surgiera la pandemia. Despertarme demasiado temprano, movilizar a mis dos hijos y, guiados por Google Maps, cruzar la carretera de circunvalaci\u00f3n, es decir, sumergirme en un mundo completamente diferente. La separaci\u00f3n entre Par\u00eds y sus suburbios siempre me hace pensar en la que distingu\u00eda, en Sud\u00e1frica bajo el apartheid, los barrios blancos y ricos de Johannesburgo, donde viv\u00edan mis abuelos, y el municipio negro de Soweto.<\/p>\n

Todos los s\u00e1bados su nuevo suburbio, que la mayor parte del tiempo se asemeja a la superposici\u00f3n descuidada de una ciudad sovi\u00e9tica y un pueblo franc\u00e9s descolorido. Tomemos Villejuif (Val-de-Marne): despu\u00e9s de pasar restaurantes de comida r\u00e1pida y edificios de apartamentos de mala muerte, llegamos al estadio Karl-Marx, frente a la guarder\u00eda del mismo nombre. En el c\u00e9sped artificial de nueva generaci\u00f3n, financiado por el Estado, reina la jerarqu\u00eda que tradicionalmente prevalece en Francia: los padres, que son solo la familia, estacionados detr\u00e1s de una barrera, a una buena distancia, mientras que los agentes del Estado – entrenadores debidamente calificados \u2013 presidente de actividades.<\/p>\n

Muchachos de todos los colores juegan partidos de f\u00fatbol que generalmente son impresionantes. Hay que tener en cuenta el marcador, porque no se promulga ning\u00fan resultado final debido a la h\u00e1bil estrategia puesta en marcha por la Federaci\u00f3n Francesa de F\u00fatbol para apaciguar los partidos entre los jugadores j\u00f3venes. A la hora de comer, ya estamos de vuelta en casa, felices de poder entrar en calor.<\/p>\n

Estas ma\u00f1anas deportivas me ayudan a comprender c\u00f3mo Francia pudo ganar la Copa del Mundo de 2018, con un equipo rico en jugadores de los suburbios de Par\u00eds. Como expatriado brit\u00e1nico en Francia, poco a poco me doy cuenta de algo m\u00e1s: si ustedes son los campeones del mundo sobre el terreno, nosotros tambi\u00e9n lo somos, pero en las gradas. Las habilidades cruciales que requiere el f\u00fatbol se comparten por igual entre nuestros dos pueblos.<\/p>\n

El estadio sustituye a la masa<\/h2>\n

Los brit\u00e1nicos victorianos inventaron la mayor\u00eda de los deportes de la era moderna, pero no vieron ning\u00fan sentido en competir contra los forasteros. Era prerrogativa de la burgues\u00eda parisina organizar las primeras competiciones internacionales, desde la Copa del Mundo de f\u00fatbol hasta los Juegos Ol\u00edmpicos. Los brit\u00e1nicos continuaron felizmente practicando deporte, especialmente en la escuela, hasta que la primera ministra Margaret Thatcher vendi\u00f3 miles de canchas deportivas escolares en la d\u00e9cada de 1980. Si alguna vez se encuentra empujando un carrito en un supermercado en el Reino Unido, t\u00f3mese un momento para honrar la memoria de la incontables goles que alguna vez se marcaron aqu\u00ed.<\/p>\n

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