\n<\/figure>\nLos astr\u00f3nomos han descubierto una inusual estrella enana blanca te\u00f1ida de azul con dos \u00abcaras\u00bb distintas: un lado es hidr\u00f3geno y el otro lado es helio, seg\u00fan un nuevo art\u00edculo publicado en la revista Nature. Naturalmente, apodaron a la estrella Janus, en honor al dios romano de dos caras de la dualidad y la transici\u00f3n.<\/p>\n
Como se inform\u00f3 anteriormente, una enana blanca es esencialmente el n\u00facleo quemado de una estrella muerta. Una de las primeras estrellas enanas blancas descubiertas, denominada 40 Eridani B, ten\u00eda una densidad de m\u00e1s de 25.000 veces la del Sol, empaquetada en un volumen mucho m\u00e1s peque\u00f1o (aproximadamente del tama\u00f1o de la Tierra), una deducci\u00f3n observacional que los astr\u00f3nomos inicialmente consideraron imposible. Una segunda enana blanca, Sirius B (en \u00f3rbita alrededor de la estrella Sirius), fue descubierta poco despu\u00e9s y parec\u00eda incre\u00edblemente densa (alrededor de 200.000 veces m\u00e1s densa que la Tierra).<\/p>\n
Esa densidad extrema surge del mecanismo inusual detr\u00e1s de la presi\u00f3n interna de la estrella para evitar que colapse bajo la fuerza de la gravedad. Las estrellas regulares dependen de la energ\u00eda liberada a trav\u00e9s de la fusi\u00f3n nuclear, pero la fusi\u00f3n se ha detenido en las enanas blancas. As\u00ed que la gravedad ha compactado toda la materia de la estrella hacia el interior con tanta fuerza que sus electrones se aplastan entre s\u00ed, formando \u00abmateria degenerada de electrones\u00bb. Esto sucede debido a la mec\u00e1nica cu\u00e1ntica, en particular al principio de exclusi\u00f3n de Pauli, que sostiene que solo dos electrones pueden estar en el mismo nivel de energ\u00eda. Los gases normales no violan este principio porque hay suficiente espacio entre los electrones para evitar que se llenen todos los niveles de energ\u00eda en los \u00e1tomos. Pero en un gas degenerado, los electrones hacer<\/em> llenar todos los niveles de energ\u00eda, y esto da como resultado una fuerza de presi\u00f3n hacia afuera para detener el colapso de la estrella.<\/p>\nCuanta m\u00e1s masa tiene la enana blanca, m\u00e1s peque\u00f1a se vuelve porque tiene que crear suficiente presi\u00f3n interna para soportar toda esa masa. Y debido a que la gravedad de la superficie de la estrella es 100.000 veces mayor que la de la Tierra, los \u00e1tomos m\u00e1s pesados \u200b\u200bde su atm\u00f3sfera se hunden, dejando \u00e1tomos m\u00e1s livianos en la superficie. Por lo tanto, las atm\u00f3sferas de las enanas blancas suelen estar compuestas de hidr\u00f3geno puro o helio puro.<\/p>\n
Es por eso que este \u00faltimo descubrimiento de una enana blanca es tan intrigante. La astr\u00f3noma Ilaria Caiazzo, una posdoctorada en Caltech, vio por primera vez a Janus (designado oficialmente como ZTF J203349.8+322901.1) mientras usaba el Zwicky Transient Facility (ZTF) para buscar enanas blancas altamente magnetizadas. El ZTF es una c\u00e1mara rob\u00f3tica conectada al telescopio Samuel Oschin de 70 a\u00f1os en el Observatorio Palomar en el condado de San Diego. ZTF realiza estudios rob\u00f3ticos del cielo nocturno en busca de objetos que entran en erupci\u00f3n o var\u00edan en brillo: supernovas, estrellas devoradas por agujeros negros y asteroides y cometas, por ejemplo. Escanea todo el cielo durante tres noches y el plano visible de la galaxia dos veces cada noche.<\/p>\n\n Anuncio <\/span> <\/p>\n<\/aside>\n\n