{"id":752432,"date":"2023-07-31T17:46:20","date_gmt":"2023-07-31T17:46:20","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-ascenso-politico-de-walter-ulbricht-fue-todo-menos-planificado-un-funcionario-aleman-por-la-gracia-de-moscu\/"},"modified":"2023-07-31T17:46:25","modified_gmt":"2023-07-31T17:46:25","slug":"el-ascenso-politico-de-walter-ulbricht-fue-todo-menos-planificado-un-funcionario-aleman-por-la-gracia-de-moscu","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-ascenso-politico-de-walter-ulbricht-fue-todo-menos-planificado-un-funcionario-aleman-por-la-gracia-de-moscu\/","title":{"rendered":"El ascenso pol\u00edtico de Walter Ulbricht fue todo menos planificado: un funcionario alem\u00e1n por la gracia de Mosc\u00fa"},"content":{"rendered":"


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El historiador Ilko-Sascha Kowalczuk se dedica al futuro jefe de estado de la RDA en los a\u00f1os del exilio hasta 1945. La biograf\u00eda de aproximadamente 1.000 p\u00e1ginas es rica en detalles y, sin embargo, permanece ajena a su tema.<\/p>\n

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Walter Ulbricht, condecorado con la Medalla Karl Marx.<\/h2>\n

Bettman\/Getty<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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Cuando los nacionalsocialistas asumieron el gobierno en Alemania el 30 de enero de 1933, Walter Ulbricht estaba en cama con neumon\u00eda. Si lo desea, puede verlo como un s\u00edntoma del estado de la izquierda alemana en ese momento.<\/p>\n

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Las semanas y los meses anteriores hab\u00edan agotado las fuerzas de Ulbricht. Como miembro del Comit\u00e9 Central del KPD y l\u00edder del partido en Berl\u00edn-Brandeburgo hasta 1932, perteneci\u00f3 a la primera guardia de los comunistas en Alemania. Su oponente del lado de los nacionalsocialistas no era otro que el Gauleiter del NSDAP de Berl\u00edn y futuro ministro de Propaganda Joseph Goebbels. En los a\u00f1os previos a 1933, Ulbricht se bati\u00f3 en numerosos duelos con \u00e9l, que a menudo degeneraban en sangrientas batallas entre nazis y comunistas.<\/p>\n

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Las descripciones biogr\u00e1ficas del posterior secretario general del Partido de Unidad Socialista de Alemania, que marc\u00f3 el destino de la RDA hasta 1971, oscilaron entre dos extremos hasta 1990: la glorificaci\u00f3n hagiogr\u00e1fica en Oriente y la demonizaci\u00f3n simult\u00e1nea en Occidente. Despu\u00e9s de la reunificaci\u00f3n, Ulbricht desapareci\u00f3 en gran medida de la memoria p\u00fablica, se quitaron las placas conmemorativas, se cambiaron los nombres de las calles y se revocaron las ciudadan\u00edas honorarios.<\/p>\n

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Una biograf\u00eda minuciosa<\/strong><\/span><\/h2>\n

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Esto es comprensible en vista de la responsabilidad de Ulbricht por el r\u00e9gimen injusto de la RDA y la construcci\u00f3n del Muro. Sin embargo, esto no hace justicia a su importancia hist\u00f3rica. El historiador contempor\u00e1neo de Hamburgo Ilko-Sascha Kowalczuk coloca a Ulbricht en la misma l\u00ednea que pol\u00edticos como Adenauer, Brandt y Kohl, pero tambi\u00e9n Hitler y Hindenburg. Kowalczuk aborda tentativamente el tema de su investigaci\u00f3n. En lugar de juicios r\u00e1pidos, conf\u00eda en la meticulosidad y la profundidad de los detalles. Ulbricht siempre fue un extra\u00f1o para \u00e9l, admite Kowalczuk, y en realidad nunca se acerc\u00f3 a \u00e9l mientras escrib\u00eda el libro.<\/p>\n

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La biograf\u00eda de mil p\u00e1ginas, que cubre el per\u00edodo hasta el final de la guerra en 1945 y se completar\u00e1 con un segundo volumen el pr\u00f3ximo a\u00f1o, se lee sin esfuerzo a pesar de su naturaleza acad\u00e9mica. Esto tambi\u00e9n se debe al hecho de que Kowalczuk no condena prematuramente a Ulbricht con el conocimiento actual, sino que entiende c\u00f3mo entrelazar su vida con las circunstancias de la \u00e9poca, es decir, la historia de la Rep\u00fablica de Weimar, el nacionalsocialismo y la Internacional Comunista. Tambi\u00e9n es gratificante que el autor admita abiertamente cuando la situaci\u00f3n original no permite un juicio claro, por ejemplo, sobre la cuesti\u00f3n de si Ulbricht particip\u00f3 activamente en el asesinato de dos polic\u00edas en la B\u00fclowplatz de Berl\u00edn en 1931.<\/p>\n

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Nacido en 1893, Ulbricht comenz\u00f3 su carrera pol\u00edtica en el Imperio Alem\u00e1n. De joven se uni\u00f3 a la socialdemocracia y al movimiento sindical. Se distingui\u00f3 desde temprano por el talento organizativo y la voluntad de trabajo, dos cualidades que impulsaron decisivamente su ascenso pol\u00edtico a lo largo de su vida.<\/p>\n

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Funcionario profesional leal a Mosc\u00fa<\/strong><\/span><\/h2>\n

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A diferencia de la mayor\u00eda de sus contempor\u00e1neos, no sucumbi\u00f3 al patriotismo hurra al estallar la Primera Guerra Mundial en 1914. La experiencia de la guerra y el fracaso de la revoluci\u00f3n de 1918\/1919, de la que culp\u00f3 al SPD, se convirtieron en experiencias pol\u00edticas clave con influencia para toda la vida. Despu\u00e9s de 1945, esto result\u00f3 en la convicci\u00f3n de que ning\u00fan estado socialista podr\u00eda establecerse en suelo alem\u00e1n con compromisos y flexibilidad.<\/p>\n

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Como fabricante de muebles capacitado, Ulbricht solo trabaj\u00f3 por un corto tiempo. Desde la d\u00e9cada de 1920 fue un funcionario profesional del KPD. En innumerables discursos y art\u00edculos period\u00edsticos difundi\u00f3 la cosmovisi\u00f3n comunista de la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica en Alemania. Si Mosc\u00fa cambiaba la direcci\u00f3n de la marcha, la segu\u00eda de inmediato.<\/p>\n

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Ulbricht ciertamente no era un intelectual, lo que lo puso en conflicto repetidamente con aquellos en el partido que no ve\u00edan el dogma del Kremlin como la \u00faltima palabra para Alemania. La acusaci\u00f3n de ser un apparatchik oportunista y controlado externamente se qued\u00f3 con Ulbricht toda su vida, y no sin raz\u00f3n. Pero lo ayud\u00f3 a sobrevivir ileso a las purgas y juicios de la era de Stalin.<\/p>\n

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El alcance del fracaso de la izquierda pol\u00edtica en la lucha contra el nacionalsocialismo es bien conocido y, una vez m\u00e1s, sorprendente. Ulbricht, como diputado del KPD desde 1926 en el parlamento estatal de Turingia y poco tiempo despu\u00e9s tambi\u00e9n en el Reichstag, desempe\u00f1\u00f3 un papel central. El odio a la democracia ya los \u201csocialfascistas\u201d del SPD era tan profundo que el parlamento prefiri\u00f3 votar con el NSDAP en lugar de apoyar posiciones socialdem\u00f3cratas.<\/p>\n

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Por el Pacto Hitler-Stalin<\/strong><\/span><\/h2>\n

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Incluso despu\u00e9s de 1933 y ya en el exilio en Par\u00eds, Ulbricht estaba dispuesto, como mucho, a aceptar ocasionalmente restricciones a la doctrina pura en favor de una pol\u00edtica de Frente Popular antinazi. La iron\u00eda de la historia: su lealtad a la l\u00ednea del partido, entre todas las cosas, lo llev\u00f3 a la mayor calamidad en 1939 cuando, asumiendo que representaba la posici\u00f3n de Mosc\u00fa, escribi\u00f3 un art\u00edculo period\u00edstico sobre la independencia de Polonia poco despu\u00e9s de que se conociera el Pacto Hitler-Stalin. .<\/p>\n

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La carrera de Ulbricht dentro del partido fue de la mano con la expansi\u00f3n de su red en la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica. Viajaba a Mosc\u00fa con regularidad. A partir de 1939 vivi\u00f3 permanentemente en Rusia, donde se le asignaron tareas de organizaci\u00f3n y propaganda en los campos de prisioneros de guerra alemanes y en el frente seg\u00fan sus capacidades.<\/p>\n

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El ascenso pol\u00edtico de Walter Ulbricht fue todo menos planeado. Su biograf\u00eda, como muestra de manera impresionante el libro de Kowalczuk, est\u00e1 llena de escollos que probablemente traer\u00edan un final abrupto no solo a su carrera sino tambi\u00e9n a su vida. El hecho de que no llegara a eso, y de que fuera considerado el \u00abcomunista alem\u00e1n m\u00e1s poderoso\u00bb por gracia de Mosc\u00fa al final de la guerra, se debi\u00f3 a su adaptabilidad y mucha suerte.<\/p>\n

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Ilko-Sascha Kowalczuk: Walter Ulbricht. El comunista alem\u00e1n (1893-1945). C.-H.-Beck-Verlag, M\u00fanich 2023. 1006 p\u00e1ginas, CHF 79,90.<\/p>\n

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