{"id":805889,"date":"2023-09-10T08:43:25","date_gmt":"2023-09-10T08:43:25","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/fintech-se-enfrenta-a-su-ajuste-de-cuentas-es-solo-cuestion-de-tiempo-hasta-que-el-castillo-de-naipes-se-derrumbe\/"},"modified":"2023-09-10T08:43:31","modified_gmt":"2023-09-10T08:43:31","slug":"fintech-se-enfrenta-a-su-ajuste-de-cuentas-es-solo-cuestion-de-tiempo-hasta-que-el-castillo-de-naipes-se-derrumbe","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/fintech-se-enfrenta-a-su-ajuste-de-cuentas-es-solo-cuestion-de-tiempo-hasta-que-el-castillo-de-naipes-se-derrumbe\/","title":{"rendered":"Fintech se enfrenta a su ajuste de cuentas: es s\u00f3lo cuesti\u00f3n de tiempo hasta que el castillo de naipes se derrumbe"},"content":{"rendered":"
\n<\/p>\n
\n\t\t\t\t\t\t\tMichael Sindicich<\/span> \t\tMichael Sindicich es vicepresidente ejecutivo y director general de gastos de Navan, una soluci\u00f3n todo en uno de gesti\u00f3n de gastos y viajes.\t<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/div>\n La crisis financiera mundial de 2008 fue f\u00e1cilmente la crisis econ\u00f3mica m\u00e1s destructiva desde la Gran Depresi\u00f3n. Y, sin embargo, no deja de ser ir\u00f3nico que sin \u00e9l no tendr\u00edamos un ecosistema de startups pr\u00f3spero.<\/p>\n En un intento por reiniciar la econom\u00eda global, los bancos centrales redujeron las tasas de inter\u00e9s a casi cero, lo que dio lugar a una era de dinero barato.<\/p>\n Esto result\u00f3 en dos cosas. En primer lugar, incentiv\u00f3 a los inversores a financiar empresas tecnol\u00f3gicas j\u00f3venes prometedoras (y, en muchos casos, no tan prometedoras). Pero tambi\u00e9n permiti\u00f3 la aparici\u00f3n de modelos de negocio que, en cualquier otra circunstancia, ser\u00edan completamente inviables.<\/p>\n Para ver ejemplos de esto \u00faltimo, s\u00f3lo hay que mirar el mundo fintech. Durante la \u00faltima d\u00e9cada, una vertiginosa variedad de bancos desafiantes, servicios de dinero electr\u00f3nico, billeteras digitales y m\u00e1s han logrado arrebatar participaci\u00f3n de mercado a los tradicionales.<\/p>\n Lo lograron ofreciendo un producto que, desde la perspectiva del consumidor, era indudablemente<\/em> superior.<\/p>\n Los consumidores se dejaron convencer f\u00e1cilmente por estas ingeniosas aplicaciones, tarifas bajas o inexistentes y reembolsos o tasas de inter\u00e9s m\u00e1s altas. Pero no pensaron en si los fundamentos empresariales de estas fintechs eran sostenibles a largo plazo o si podr\u00edan capear un cambio m\u00e1s amplio en las condiciones macroecon\u00f3micas. No era necesario.<\/p>\n Pero ahora las fintech se enfrentan a un ajuste de cuentas. En los \u00faltimos dos a\u00f1os, los bancos centrales han aumentado las tasas de inter\u00e9s desde sus m\u00ednimos de la era COVID hasta los niveles m\u00e1s altos en una generaci\u00f3n. Y ahora los modelos de negocio que se ganaron el afecto de los consumidores parecen cada vez m\u00e1s d\u00e9biles.<\/p>\n Es s\u00f3lo cuesti\u00f3n de tiempo hasta que el castillo de naipes se derrumbe.<\/p>\n Para innumerables proveedores de tecnolog\u00eda financiera, la principal fuente de ingresos proviene de las tarifas de intercambio. Se trata, esencialmente, de las comisiones que se pagan a los emisores de tarjetas, las redes de pago y los bancos cada vez que un consumidor compra algo.<\/p>\n Muchas empresas de tecnolog\u00eda financiera dependen de las tarifas de intercambio en diversos grados, aunque en cada caso representan una parte importante de sus ingresos. Por ejemplo, el neobanco estadounidense Chime gan\u00f3 600 millones de d\u00f3lares con comisiones de intercambio solo en 2020. Desde la perspectiva del consumidor, el intercambio es completamente invisible, aunque para muchas fintechs es un salvavidas financiero.<\/p>\n \t\t\tEn \u00faltima instancia, las fintech deben recordar que son, ante todo, empresas de tecnolog\u00eda.\t\t\t\t\t<\/p><\/blockquote><\/div>\n Hay dos cosas que necesita saber aqu\u00ed: primero, aunque las tarifas de intercambio var\u00edan seg\u00fan el tipo de tarjeta, por ejemplo si es una tarjeta de d\u00e9bito o cr\u00e9dito, y la jurisdicci\u00f3n donde se realiz\u00f3 el pago, est\u00e1n limitadas a un porcentaje fijo de el precio de la transacci\u00f3n.<\/p>\n \u00bfLa otra cosa? Las tasas de inter\u00e9s, por su propia definici\u00f3n, no lo son. Los fijan los bancos centrales y la tasa porcentual est\u00e1 influenciada principalmente por las condiciones econ\u00f3micas externas. Cuando los tiempos son dif\u00edciles, como una recesi\u00f3n o una pandemia \u00fanica en la vida, bajan para estimular el gasto y reforzar la confianza de los consumidores. Cuando la inflaci\u00f3n aumenta, tambi\u00e9n lo hacen las tasas de inter\u00e9s, ya que los bancos centrales intentan frenar la actividad econ\u00f3mica (y, por tanto, la demanda).<\/p>\n Por s\u00ed solo, esto presenta un serio dilema para las fintechs que dependen total o principalmente de las tarifas de intercambio. Si bien su potencial de ingresos est\u00e1 limitado a un porcentaje fijo de la actividad de compra de sus clientes, sus costos de endeudamiento pueden salirse peligrosamente de control.<\/p>\n Este problema se ve agravado a\u00fan m\u00e1s por el hecho de que, en muchos casos, estas fintechs no se quedan con las tarifas de intercambio. Como hemos visto durante la \u00faltima d\u00e9cada, uno de los bar\u00f3metros m\u00e1s valiosos de las perspectivas futuras de una startup es su tasa de adquisici\u00f3n de clientes, y la forma m\u00e1s f\u00e1cil de aprovechar esta m\u00e9trica es ofrecer reembolsos o tasas de inter\u00e9s generosas.<\/p>\n Y entonces, para mantener las luces encendidas, est\u00e1n quemando su pista o buscando financiaci\u00f3n a trav\u00e9s de acuerdos de capital o deuda. Pero la pista no dura para siempre y, a medida que la situaci\u00f3n macroecon\u00f3mica general empeora, se ha vuelto m\u00e1s dif\u00edcil obtener financiaci\u00f3n adicional y probablemente sea menor o se conceda en condiciones menos ventajosas.<\/p>\n Vale la pena se\u00f1alar que esta crisis es compartida casi exclusivamente por las nuevas empresas de tecnolog\u00eda financiera y no, como quiz\u00e1s se podr\u00eda esperar, por las instituciones financieras heredadas. Una raz\u00f3n, aunque peque\u00f1a, es que estas empresas no tienen la misma necesidad apremiante de adquirir nuevos clientes. Un banco con un legado de cien a\u00f1os no tiene que depender de registros para demostrar su viabilidad a largo plazo como negocio.<\/p>\n Pero la mayor ventaja de la que disfrutan estos titulares es el hecho de que, como empresas, est\u00e1n incre\u00edblemente diversificadas. El tiempo les ha permitido ofrecer una amplia gama de servicios, desde pr\u00e9stamos y seguros hasta tarjetas de cr\u00e9dito e hipotecas. Esta diversificaci\u00f3n ofrece cierto grado de aislamiento frente a los cambios en las tasas de inter\u00e9s y es la raz\u00f3n por la que el notoriamente pesado sector financiero tradicional resistir\u00e1 los pr\u00f3ximos a\u00f1os.<\/p>\n Adem\u00e1s, los bancos han disfrutado tradicionalmente de las formas m\u00e1s baratas de financiaci\u00f3n, porque almacenan y mantienen dep\u00f3sitos, y a menudo pagan tasas de inter\u00e9s a sus clientes muy inferiores a las establecidas por los bancos centrales.<\/p>\n Por el contrario, la mayor\u00eda de las nuevas empresas de tecnolog\u00eda financiera que retaron carecen de ese grado de diversidad de productos. Es posible que dependan exclusivamente de las tarifas de intercambio para obtener ingresos o, si tienen productos alternativos, a\u00fan no han alcanzado ning\u00fan nivel de masa cr\u00edtica o adopci\u00f3n. A menudo, esto se debe a que a\u00fan no se han registrado y regulado, o han elegido voluntariamente centrarse en un segmento particular del mercado.<\/p>\n En Estados Unidos, los bancos son las \u00fanicas instituciones que pueden retener fondos de los depositantes. Tienen m\u00e1s libertad en los tipos de productos que pueden ofrecer y, por tanto, tienen mayores oportunidades de diversificaci\u00f3n. Pero el proceso formal para convertirse en banco es largo, tedioso y costoso, y cada vez es m\u00e1s dif\u00edcil. Para las fintech, simplemente no vale la pena el esfuerzo o, m\u00e1s bien, es un problema que deben sortear asoci\u00e1ndose con un banco amigo de las fintech.<\/p>\n Convertirse en banco tambi\u00e9n conlleva algunas desventajas graves. Implica un alto grado de supervisi\u00f3n, que a muchas empresas emergentes les puede resultar demasiado dif\u00edcil de soportar. \u00bfY qu\u00e9 pasa si una fintech cambia de opini\u00f3n? Entonces las cosas se ponen complicadas.<\/p>\n Renunciar a un estatuto bancario es una pesadilla log\u00edstica y conlleva cierto grado de estigma, ya que a menudo es el resultado de alg\u00fan tipo de fracaso o mala conducta. Eso no quiere decir que no suceda o que no haya razones leg\u00edtimas (e incluso estrat\u00e9gicamente s\u00f3lidas) para hacerlo. El Marlin Bank, con sede en Utah, renunci\u00f3 a su estatuto estatal para fusionarse con un fondo de inversi\u00f3n m\u00e1s grande. Pero estos divorcios (a falta de un t\u00e9rmino mejor) nunca son f\u00e1ciles. Est\u00e1 el espinoso tema de qu\u00e9 hacer con las cuentas de los clientes o los productos que ya no puede vender ni administrar. La transici\u00f3n requiere tiempo, esfuerzo y dinero.<\/p>\n El pecado original de muchas nuevas empresas (incluidas, entre otras, las empresas de tecnolog\u00eda financiera) es creer que las condiciones macroecon\u00f3micas optimistas de la d\u00e9cada de 2010 continuar\u00edan indefinidamente. Que la inflaci\u00f3n y las tasas de inter\u00e9s se mantendr\u00e1n bajas para siempre y que nunca se quedar\u00e1n sin capital asequible y de f\u00e1cil acceso.<\/p>\n Que no habr\u00eda pandemia. No hay guerra en Ucrania. Nada que pueda hacer tambalear los cimientos de sus negocios.<\/p>\n Para muchas empresas, esta miop\u00eda ser\u00e1 su perdici\u00f3n. Se han encerrado, ya sea ofreciendo una l\u00ednea limitada de productos o ofreciendo incentivos que sus clientes se mostrar\u00e1n reacios a abandonar. Esto es especialmente cierto para aquellas empresas en el mercado de tarjetas corporativas que dependen principalmente de las tarifas de intercambio pero dan la mayor parte o la totalidad de sus ingresos a los clientes en forma de reembolsos y tasas de inter\u00e9s.<\/p>\n Este temor es compartido por McKinsey, que, en su Informe de pagos globales de 2022, advirti\u00f3 sobre el impacto del aumento de las tasas de inter\u00e9s y las tarifas de intercambio fijas en las fintech, se\u00f1alando que los modelos de negocios de muchas nuevas empresas de fintech (particularmente para las empresas que compran ahora y pagan despu\u00e9s) todav\u00eda tienen que demostrar su viabilidad en condiciones macroecon\u00f3micas tan inestables.<\/p>\n Una cosa est\u00e1 clara: las tasas de inflaci\u00f3n persistentemente altas no son, como alguna vez se pens\u00f3, un problema transitorio, sino algo que nos acompa\u00f1ar\u00e1 durante mucho tiempo. Esto significa que es poco probable que veamos tasas bajas en los bancos centrales (el ingrediente secreto que permiti\u00f3 que estos modelos de negocios fundamentalmente precarios duraran tanto) durante varios a\u00f1os. Las fintech que sobrevivan a este per\u00edodo ser\u00e1n aquellas que se adapten, ya sea tomando decisiones dif\u00edciles sobre los incentivos que ofrecen a los clientes o ampliando su cartera de productos.<\/p>\n Pueden lograr esto sin socavar fundamentalmente sus propuestas de valor. Como lo demuestran algunas de las empresas de tecnolog\u00eda financiera m\u00e1s exitosas, la mejor manera de generar volumen es ofrecer una experiencia al cliente que sea inequ\u00edvocamente mejor que las alternativas heredadas.<\/p>\n En \u00faltima instancia, las fintech deben recordar que son, ante todo, empresas de tecnolog\u00eda. Y la forma de ganar es crear un software incre\u00edble.<\/p>\n Un buen software ofrece a los consumidores una raz\u00f3n para pagar en lugar de utilizar una alternativa gratuita. Desbloquea nuevos modelos de ingresos m\u00e1s all\u00e1 de depender de tarifas de intercambio u otros pagos basados \u200b\u200ben comisiones. Al pensar en su empresa como una que intenta identificar y resolver problemas, en lugar de centrarse en la adquisici\u00f3n de clientes y los vol\u00famenes de transacciones, resulta mucho m\u00e1s sencillo identificar nuevas oportunidades, ya sean nuevas caracter\u00edsticas para distinguir su empresa de la competencia o nuevos productos que puede aumentar las ventas a clientes existentes.<\/p>\n Fundamentalmente, al tratar el software como un ciudadano de primera clase, las fintechs pueden otorgar licencias de su software a otras organizaciones, desbloqueando un flujo de ingresos adicional. Si la mayor amenaza para las empresas fintech existentes es una excesiva dependencia de las tasas de intercambio, la forma m\u00e1s f\u00e1cil de lograr resiliencia es buscar agresivamente la diversificaci\u00f3n.<\/p>\n Este no es un concepto inherentemente novedoso. Mire a Microsoft, que gana dinero a partir de diversas fuentes: sistemas operativos, software de oficina, computaci\u00f3n en la nube, consolas de juegos y computadoras port\u00e1tiles. Lo mismo podr\u00eda decirse de Google, Apple, Amazon y muchos otros. Aunque la naturaleza altamente regulada del sector de servicios financieros hace que la expansi\u00f3n sea un proceso complicado y a menudo burocr\u00e1tico, de ninguna manera es imposible.<\/p>\n Obviamente, se necesita tiempo para crear nuevas funciones y desbloquear modelos de ingresos adicionales. Un gran software, un software verdaderamente excelente, requiere talento, dinero y una hoja de ruta que se extienda m\u00e1s all\u00e1 de un solo trimestre. Para muchas organizaciones, lograr esta sostenibilidad es una ambici\u00f3n a largo plazo. Pero vale la pena recordar que todav\u00eda estamos en un entorno macroecon\u00f3mico dif\u00edcil y que rentabilidad ya no es una mala palabra para los inversores o, al menos, algo secundario respecto del crecimiento.<\/p>\n Demostrar que se toma en serio la sostenibilidad a largo plazo y que tiene un camino hacia la rentabilidad le resultar\u00e1 muy \u00fatil en su pr\u00f3xima ronda de financiaci\u00f3n.<\/p>\n Y, por \u00faltimo, deber\u00edan considerar si los incentivos que ofrecen todav\u00eda tienen sentido, dada la agitaci\u00f3n que hemos visto en el sector de servicios financieros. Este a\u00f1o a\u00fan no ha terminado y ya hemos sido testigos de tres quiebras bancarias importantes y del colapso o adquisici\u00f3n de innumerables otros proveedores m\u00e1s peque\u00f1os. Dada la consternaci\u00f3n actual, la estabilidad (y, lo que es m\u00e1s importante, la capacidad de proyectar una imagen de estabilidad) puede ser una herramienta de marketing \u00fatil.<\/p>\n<\/p><\/div>\n
\n\t\t\t\t\t\tContribuyente<\/span>\n\t\t<\/p>\n<\/p><\/div>\nEl tal\u00f3n de Aquiles de las fintech<\/h2>\n
\n
Falta de flexibilidad<\/h2>\n
El dif\u00edcil camino por delante<\/h2>\n