\n<\/aside>\n<\/p>\n
Los placebos han ocupado un lugar cada vez m\u00e1s inc\u00f3modo en el panorama m\u00e9dico durante las \u00faltimas d\u00e9cadas. Incluso cuando los ensayos controlados con placebo se han aceptado como el est\u00e1ndar de oro para la evidencia, hemos llegado a apreciar cu\u00e1n poderoso puede ser el efecto placebo. Para confundir a\u00fan m\u00e1s las cosas, un nuevo estudio ha ampliado un hallazgo anterior: el efecto placebo de los tratamientos antidepresivos parece fortalecerse con el tiempo.<\/p>\n
Trabajos anteriores hab\u00edan demostrado que esto suced\u00eda con las pastillas de placebo. El nuevo estudio muestra que esto sucede con un tratamiento llamado estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal. Afortunadamente, los tratamientos efectivos parecen estar mejorando en paralelo, por lo que esto obviamente no ha interferido con ning\u00fan resultado todav\u00eda.<\/p>\n
Imanes estimulantes<\/h2>\n La estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal es, en principio, bastante sencilla. Es posible utilizar campos magn\u00e9ticos para inducir corrientes en muchos materiales. Uno de los materiales donde esto funciona es el cerebro, donde la actividad neuronal depende de la presencia de voltaje entre una c\u00e9lula y su entorno. As\u00ed, modelando cuidadosamente el campo magn\u00e9tico, es posible influir en la actividad en \u00e1reas espec\u00edficas del cerebro. Fundamentalmente, esto se puede hacer con equipos colocados fuera del cr\u00e1neo y, por lo tanto, no es invasivo en comparaci\u00f3n con muchas otras intervenciones.<\/p>\n
Sin embargo, existen una serie de limitaciones de la t\u00e9cnica. Es un desaf\u00edo apuntar a \u00e1reas profundas del cerebro y es algo inexacto: es dif\u00edcil apuntar a una regi\u00f3n lo suficientemente peque\u00f1a como para alterar el comportamiento de las neuronas involucradas en un solo proceso. Adem\u00e1s, hay muchas opciones para variar la duraci\u00f3n, la intensidad y la cantidad de pulsos magn\u00e9ticos que crea. Descubrir la combinaci\u00f3n que mejor se enfocar\u00e1 y tratar\u00e1 un trastorno espec\u00edfico requiere mucho trabajo.<\/p>\n\n Anuncio <\/span> <\/p>\n<\/aside>\nSin embargo, se han realizado ensayos cl\u00ednicos para una gran variedad de trastornos, uno de ellos es la depresi\u00f3n. Y muchos de ellos han tenido un control con placebo; Estos pueden implicar colocar hardware inactivo al lado del cr\u00e1neo u orientar los campos magn\u00e9ticos de modo que cualquier estimulaci\u00f3n se produzca al lado del cr\u00e1neo, en lugar de debajo de \u00e9l.<\/p>\n
Sin embargo, cuando se trata de la depresi\u00f3n, los placebos han estado actuando un poco extra\u00f1o en las \u00faltimas d\u00e9cadas: se han vuelto m\u00e1s potentes desde al menos la d\u00e9cada de 1980. Varios estudios han demostrado que este es el caso de los placebos basados \u200b\u200ben pastillas, y algunos han insinuado que tambi\u00e9n se aplica a la estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal. El nuevo estudio pretende ser un metan\u00e1lisis integral que sea lo suficientemente grande como para probar si la mejora realmente existe y para determinar si est\u00e1 asociada con alg\u00fan tipo de estudio espec\u00edfico.<\/p>\n
Mejor con el tiempo<\/h2>\n Los investigadores comenzaron con un conjunto de m\u00e1s de 2700 estudios individuales que utilizaban estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal para tratar la depresi\u00f3n. Despu\u00e9s de seleccionar datos de ensayos cl\u00ednicos de alta calidad que inclu\u00edan aleatorizaci\u00f3n y cegamiento, solo les quedaron 52 ensayos y un total de 4.500 participantes, aproximadamente la mitad de los cuales recibieron un tratamiento con placebo.<\/p>\n
Estos placebos siempre involucraban hardware, pero el hardware pod\u00eda no funcionar o estar mal dirigido. Los tratamientos sin placebo incluyeron una variedad de enfoques diferentes de estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal.<\/p>\n
Dado que realmente no se puede hacer un control de placebo para un placebo, el trabajo simplemente se centr\u00f3 en si los participantes informaron mejoras en sus condiciones. Y, de hecho, los placebos lo hicieron, de manera bastante consistente, aunque el tratamiento real generalmente tuvo un efecto mayor. (Utilizando una medida llamada \u00abmagnitud de la respuesta\u00bb, el placebo obtuvo una calificaci\u00f3n del 24 por ciento, mientras que el tratamiento real alcanz\u00f3 el 38 por ciento).<\/p>\n\n Anuncio <\/span> <\/p>\n<\/aside>\nPara comprobar si las cosas estaban cambiando con el tiempo, los investigadores dividieron los ensayos en dos lotes, uno que abarc\u00f3 los a\u00f1os entre 1999 y 2007, y un segundo que abarc\u00f3 de 2018 a 2022. El efecto tanto del placebo como del tratamiento aument\u00f3 con el tiempo. . Sin embargo, los dos aumentaron en paralelo, por lo que el cambio no afect\u00f3 los resultados del ensayo.<\/p>\n
Los investigadores realizaron un an\u00e1lisis de regresi\u00f3n para descubrir qu\u00e9 factores podr\u00edan estar influyendo en estas correlaciones. Como era de esperar, este an\u00e1lisis mostr\u00f3 una correlaci\u00f3n entre el efecto placebo y el impacto del tratamiento real. Los ensayos realizados en Am\u00e9rica del Norte y del Sur tambi\u00e9n tendieron a tener un efecto mayor, al igual que una medici\u00f3n del riesgo de sesgo en cada uno de los estudios.<\/p>\n
El placebo es real<\/h2>\n Eso no significa que aqu\u00ed no se produzca el efecto placebo. Los investigadores estiman que se necesitar\u00edan casi 7.500 nuevos estudios que demuestren que no existe un efecto placebo para que desaparezca por completo. Pero s\u00ed sugiere que al menos algunas de las diferencias entre los ensayos anteriores y posteriores pueden deberse al dise\u00f1o del estudio. \u00abDurante los \u00faltimos 20 a\u00f1os, las poblaciones de pacientes, los protocolos de estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal, los equipos y la tecnolog\u00eda, los procedimientos simulados, la metodolog\u00eda de los ensayos y la ejecuci\u00f3n han experimentado cambios significativos\u00bb, se\u00f1alan.<\/p>\n
Y estas son algunas de las cosas que potencialmente pueden influir en c\u00f3mo las personas perciben el tratamiento falso. Despu\u00e9s de todo, el efecto placebo est\u00e1 mediado en gran medida por la creencia de que se est\u00e1 aplicando alg\u00fan tipo de tratamiento. La estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal, que implica que personal m\u00e9dico y algunos equipos de aspecto serio se coloquen junto a la cabeza de una persona, se presta muy f\u00e1cilmente a esa creencia. Si en los \u00faltimos a\u00f1os se han puesto m\u00e1s esfuerzos en hacer que el placebo sea convincente, esto podr\u00eda explicar f\u00e1cilmente el cambio que estamos viendo.<\/p>\n
Desafortunadamente, los detalles sobre los procedimientos con placebo a menudo no se informan detalladamente en los estudios, lo que hace m\u00e1s dif\u00edcil comprender qu\u00e9 cambios espec\u00edficos podr\u00edan estar provocando este efecto.<\/p>\n
Nature Mental Health, 2023. DOI: 10.1038\/s44220-023-00118-9 (Acerca de los DOI).<\/p>\n<\/p><\/div>\n
\nSource link-49<\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Agrandar \/ Es dif\u00edcil distinguir una configuraci\u00f3n decente de placebo para la estimulaci\u00f3n magn\u00e9tica transcraneal del tratamiento real. Los placebos han ocupado un lugar cada vez m\u00e1s inc\u00f3modo en el…<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":824400,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[21980],"tags":[439,4747,10399,19007,4208,8,84,8216,15,3612,440],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/824399"}],"collection":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=824399"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/824399\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":824401,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/824399\/revisions\/824401"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/824400"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=824399"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=824399"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/magazineoffice.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=824399"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}