PHILIPPE QUAISSE \/ PASCO<\/span> <\/figcaption><\/figure>\nCon su silueta patriarcal \u2013calva, barba blanca, ojos azules brillantes\u2013, su melodioso acento quebequense, sus palabras coloridas y precisas, encarnaba tanto al abuelo capaz de contarnos historias maravillosas en la vigilia como al druida que mezcla los ingredientes del Universo. en su caldero. Un litro de V\u00eda L\u00e1ctea, un extracto de la Luna, unos misteriosos granos de materia oscura… Nos explic\u00f3 que todos est\u00e1bamos hechos de polvo de estrellas, porque la mayor\u00eda de los elementos que nos constituyen, como el carbono, el ox\u00edgeno y el nitr\u00f3geno, , vienen directamente de las forjas estelares. Al finalizar su estancia en la Tierra, el astrof\u00edsico Hubert Reeves regres\u00f3 a este polvo c\u00f3smico el 13 de octubre. Ten\u00eda 91 a\u00f1os.<\/p>\n
Al verlo perpetuamente gris, casi olvidamos que hab\u00eda sido un ni\u00f1o. Sin embargo, Hubert Reeves, nacido el 13 de julio de 1932 en Montreal, a menudo retroced\u00eda en el tiempo hasta su juventud. Habl\u00f3 de esta gran casa familiar de madera con vistas al lago Saint-Louis, que su abuelo hizo construir a principios del siglo XX.mi<\/sup> siglo y donde ten\u00eda tantos recuerdos: los viajes en canoa, la llamada de su madre que hac\u00eda, al caer la noche, un \u00ab\u00bfHas visto el cielo?\u00bb \u00bb<\/em>el tablero de cart\u00f3n llamado \u201cbuscador de estrellas\u201d que permiti\u00f3 al joven Hubert identificar las estrellas, y finalmente su abuela materna, que es absolutamente necesario nombrar aqu\u00ed, Charlotte Tourangeau, que no tuvo igual para embellecer los cuentos de Perrault, extendi\u00e9ndolos o incluso mezcl\u00e1ndolos seg\u00fan a su imaginaci\u00f3n y a qui\u00e9n deb\u00eda su talento como narrador.<\/p>\n\nLea tambi\u00e9n:<\/span> Art\u00edculo reservado para nuestros suscriptores.<\/span><\/span> Hubert Reeves: \u201cLa historia del Universo es la historia de cada uno de nosotros\u201d <\/span> <\/div>\n<\/section>\nF\u00edsica te\u00f3rica<\/h2>\n
\u201cLo que t\u00fa valoras al decir \u201ceso es interesante\u201d, tus hijos lo encuentran valioso<\/em>nos asegur\u00f3 durante una reuni\u00f3n en 2002. A mis padres les encantaban las cosas relacionadas con las ciencias naturales y por eso se me ocurri\u00f3 muy temprano la idea de que yo har\u00eda ciencias. \u00bb <\/em>Aficionado a las matem\u00e1ticas, el joven Reeves opt\u00f3 por la f\u00edsica te\u00f3rica, que estudi\u00f3 primero en Montreal y luego en Estados Unidos, en la Universidad de Cornell, en el estado de Nueva York, donde, record\u00f3, \u201cFueron los fundadores de la astrof\u00edsica nuclear. Ha tenido lugar la magia de las grandes universidades americanas, donde te sientes capaz de hacer grandes cosas. Reinaba una creatividad contagiosa que daba alas. \u00bb <\/em>En Cornell, complet\u00f3 su tesis bajo la direcci\u00f3n de Edwin Salpeter (1924-2008), quien se hizo famoso por mostrar c\u00f3mo las estrellas, al fusionar tres \u00e1tomos de helio, dan origen a un \u00e1tomo de carbono.<\/p>\nHubert Reeves, a su vez, se sumerge en el pasado del Universo, entendiendo que ser astrof\u00edsico es convertirse en historiador del cosmos y de la materia. Est\u00e1 particularmente interesado en tres elementos ligeros, litio, berilio y boro, demasiado grandes para haber sido fabricados durante el Big Bang pero demasiado fr\u00e1giles para haber sido dise\u00f1ados en el fuego termonuclear de las estrellas. Junto con Jean Audouze, el investigador canadiense demuestra que estos elementos se crean cuando los rayos c\u00f3smicos de alta energ\u00eda descomponen n\u00facleos de carbono, ox\u00edgeno o nitr\u00f3geno presentes en el espacio. \u201cEs un art\u00edculo que marc\u00f3 una \u00e9poca, <\/em>nos asegur\u00f3 en 2018 el astrof\u00edsico Michel Cass\u00e9, uno de los estudiantes de doctorado de Hubert Reeves. Hubert ten\u00eda una manera muy penetrante de pensar sobre las cosas en el cielo.<\/em>. No era sofisticado, no era un dandy: realmente iba directo al grano sin cargarse de adornos. \u00bb<\/em><\/p>\nA principios de la d\u00e9cada de 1960, Hubert Reeves ense\u00f1\u00f3 en Montreal y se convirti\u00f3 en asesor cient\u00edfico de la NASA. All\u00ed form\u00f3 profesores para los departamentos de ciencia espacial que entonces se creaban en gran n\u00famero en las universidades americanas, a medida que despegaba la conquista del espacio. Pero, inc\u00f3modo con la atm\u00f3sfera nacionalista de Quebec y deseoso de explorar otros horizontes, quer\u00eda Europa. En 1964 se tom\u00f3 un a\u00f1o sab\u00e1tico y ense\u00f1\u00f3 f\u00edsica nuclear en la Universidad Libre de Bruselas. Luego fue invitado a compartir sus conocimientos en Francia. Es un punto de inflexi\u00f3n en su existencia, no se ir\u00e1 m\u00e1s.<\/p>\n
el divulgador<\/h2>\n
Hubert Reeves, director de investigaciones del CNRS y asesor cient\u00edfico de la Comisi\u00f3n de Energ\u00eda At\u00f3mica, tiene una carrera bien definida. Su segunda vida, la de divulgador, favorito de los medios y narrador estrella, le lleg\u00f3 un poco por casualidad. Animado por sus amigos, escribi\u00f3 un primer manuscrito titulado Paciencia en el azul, <\/em>en referencia a un poema de Paul Val\u00e9ry. Lo present\u00f3 a una treintena de editores, quienes se negaron a publicarlo, creyendo est\u00fapidamente que la astronom\u00eda no interesaba a nadie a pesar de las preguntas universales sobre el origen del mundo a las que daba respuesta.<\/p>\n\nLea tambi\u00e9n:<\/span> Art\u00edculo reservado para nuestros suscriptores.<\/span><\/span> Hubert Reeves, en sus Memorias de 2008: \u201cNunca pens\u00e9 en convertirme en un divulgador cient\u00edfico\u201d <\/span> <\/div>\n<\/section>\nHubert Reeves se dispone a guardar su manuscrito en un caj\u00f3n y seguir siendo el investigador casi an\u00f3nimo que es cuando el f\u00edsico Jean-Marc L\u00e9vy-Leblond, que dirige la colecci\u00f3n \u201cCiencia Abierta\u201d de Editions du Seuil, le ofrece… ‘escribir un libro. \u00a1Milagro, ya est\u00e1 listo! Paciencia en el azul <\/em>Se public\u00f3 en 1981 y los franceses descubrieron, en el programa \u201cAp\u00f3strofes\u201d de Bernard Pivot, a este quebequense que cuenta el cosmos como se lee una novela.<\/p>\n\u201cMe dijeron que tendr\u00eda suerte si vend\u00edan tres mil. Hoy hemos superado el mill\u00f3n de ejemplares y ha sido traducido a m\u00e1s de treinta idiomas\u2026\u201d<\/em>nos cont\u00f3 Hubert Reeves en 2002. A principios de los a\u00f1os 1980, la fama cay\u00f3 sobre \u00e9l como un ave de rapi\u00f1a sobre un rat\u00f3n de campo, pero sab\u00eda que deb\u00eda tener cuidado con ella, mantenerla a raya: \u201cLa fama es desestabilizadora, embriagadora y un poco peligrosa: corres el riesgo de tener una gran cabeza. Afortunadamente, mi esposa y mis amigos me est\u00e1n observando. \u00bb<\/em> Comienza el ciclo libro-televisi\u00f3n-conferencias. Seguir\u00e1n una treintena de obras Paciencia en el azul, <\/em>entre los que podemos citar polvo de estrellas <\/em>(Umbral, 1984), \u00daltimas noticias del cosmos. <\/em>(Seuil, 1994), o sus Memorias tituladas no tendr\u00e9 tiempo <\/em>(Umbral, 2008).<\/p>\nDefensor Ambiental<\/h2>\n
Cada d\u00eda llega a su correo una solicitud de conferencias y se somete a una estricta disciplina, a quien una excesiva implicaci\u00f3n en su trabajo le ha costado un divorcio seguido de una depresi\u00f3n: ser\u00e1, por tanto, una conferencia por semana en Francia, una por mes. en el extranjero. En total, don\u00f3 m\u00e1s de 2.500.<\/p>\n
Como si sus dos vidas \u2013investigador y divulgador\u2013 no fueran suficientes, Hubert Reeves asumi\u00f3 una tercera: defensor del medio ambiente. En 2001, sucedi\u00f3 a Th\u00e9odore Monod al frente de la Liga de la Rep\u00fablica de China para la preservaci\u00f3n de la vida silvestre. Unos a\u00f1os m\u00e1s tarde, la asociaci\u00f3n tom\u00f3 el nombre de Humanidad y Biodiversidad y \u00e9l se convirti\u00f3 en su presidente honorario. Su amor por la naturaleza, heredado de sus padres, nunca lo abandon\u00f3.<\/p>\n
Con su segunda esposa, la periodista Camille Scoffier, compr\u00f3 \u201cuna antigua granja en ruinas en Malicorne en Puisaye\u201d, <\/em>como relata en sus Memorias. All\u00ed hay robles centenarios pero Hubert Reeves quiere ir m\u00e1s all\u00e1 creando lo que \u00e9l llama \u201cel bosque milenario, \u00e1rboles que pueden vivir m\u00e1s de mil a\u00f1os: cedros libaneses, secuoyas, tilos, ginkgos\u201d.<\/em><\/p>\nAngustiado por el calentamiento global, la contaminaci\u00f3n y la p\u00e9rdida de biodiversidad que \u00e9l mismo observa en el jard\u00edn de su casa de campo, pone su notoriedad al servicio de la lucha ecol\u00f3gica. Escribe columnas, llama a alcaldes, parlamentarios y candidatos a las elecciones presidenciales de 2012. \u201cEn Malicorne, lo vi durante mucho tiempo interesarse profundamente por las plantas y los p\u00e1jaros, lo que signific\u00f3 mucho para \u00e9l\u201d. <\/em>Michel Cass\u00e9 nos lo dijo en 2018. Lo que resumi\u00f3 el viaje de su amigo de la siguiente manera: \u201cDespu\u00e9s de rozar el cielo, se apasion\u00f3 por la Tierra. \u00bb<\/em><\/p>\n\nLea tambi\u00e9n:<\/span> Hubert Reeves: \u201cEn el fondo de un valle el tiempo pasa m\u00e1s lentamente que en la cima de una monta\u00f1a\u201d <\/span> <\/div>\n<\/section>\nDentro no tendr\u00e9 tiempo, <\/em>Hubert Reeves asegur\u00f3 que podremos ver astronom\u00eda y ecolog\u00eda \u201ccomo dos partes de un mismo tema: nuestra existencia. La astronom\u00eda, al contarnos la historia del Universo, nos dice de d\u00f3nde venimos, c\u00f3mo llegamos a estar aqu\u00ed hoy. La ecolog\u00eda, al hacernos conscientes de las amenazas que pesan sobre nuestro futuro, pretende decirnos c\u00f3mo permanecer all\u00ed. \u00bb<\/em><\/p>\n\nHubert Reeves en algunas fechas<\/p>\n
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13 de julio de 1932 <\/strong>Nacimiento en Montreal<\/p>\n1965<\/strong> Director de investigaci\u00f3n del CNRS<\/p>\n1981<\/strong> Publica \u201cPaciencia en el azur\u201d<\/p>\n1994 <\/strong>\u201c\u00daltimas noticias del cosmos\u201d<\/p>\n2008<\/strong> \u00abNo tendr\u00e9 tiempo\u00bb<\/p>\n13 de octubre de 2023 <\/strong>Muerte en Par\u00eds<\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/section>\n\n Pierre Barth\u00e9l\u00e9my<\/span><\/span> <\/p>\n<\/section>\n <\/section>\n<\/p><\/div>\n
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