{"id":870205,"date":"2023-11-04T09:51:59","date_gmt":"2023-11-04T09:51:59","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/cuando-la-gente-resiste-con-barricadas-y-ciudades-de-tiendas-de-campana\/"},"modified":"2023-11-04T09:52:03","modified_gmt":"2023-11-04T09:52:03","slug":"cuando-la-gente-resiste-con-barricadas-y-ciudades-de-tiendas-de-campana","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/cuando-la-gente-resiste-con-barricadas-y-ciudades-de-tiendas-de-campana\/","title":{"rendered":"Cuando la gente resiste con barricadas y ciudades de tiendas de campa\u00f1a"},"content":{"rendered":"


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En su exposici\u00f3n sobre la resistencia con barricadas o caba\u00f1as en los \u00e1rboles, el Museo Alem\u00e1n de Arquitectura cuenta la larga historia de los movimientos de protesta.<\/em><\/p>\n

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Manifestantes en Hong Kong usan m\u00e1scaras, cascos, escudos caseros y paraguas para protegerse del uso de gases lacrim\u00f3genos y ca\u00f1ones de agua por parte de la polic\u00eda. A diferencia de las estrategias locales de 2014, las protestas de 2019\/20 se caracterizaron por t\u00e1cticas \u201cfluidas\u201d bajo el lema \u201cBe Water\u201d.<\/h2>\n

Estudio Incendo<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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Quienes protestan utilizan sus cuerpos para hacer o\u00edr su voz. Los visitantes del Museo Alem\u00e1n de Arquitectura (DAM) en Frankfurt am Main pueden vivir esta experiencia f\u00edsica mientras caminan sobre un destartalado puente colgante. Inaugura la exposici\u00f3n \u201cProtesta\/Arquitectura\u201d y procede del bosque de Hambach, ocupado desde 2012 para impedir la ampliaci\u00f3n de una mina de lignito a cielo abierto. La gente ha tendido cuerdas entre los \u00e1rboles de las que cuelgan pasarelas y caba\u00f1as. En el suelo de la sala de exposici\u00f3n se encuentran todos los elementos de la caja de herramientas del elenco, desde sacos de dormir hasta botas de goma.<\/p>\n

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La protesta necesita espacio, incluso en el museo. El espect\u00e1culo ocupa toda una planta de un edificio de oficinas de la antigua empresa de venta por correo Neckermann, donde el DAM act\u00faa durante las obras de renovaci\u00f3n. La introducci\u00f3n lo deja claro: se trata principalmente de la construcci\u00f3n tangible, no del contenido pol\u00edtico de las protestas. As\u00ed que no se trata del clima, sino del pegamento que los activistas usan para adherirse a las calles. La exposici\u00f3n se centra en intervenciones espaciales, cuando la protesta se vuelve \u201csedentaria\u201d y el lugar se convierte en un argumento.<\/p>\n

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\"Una <\/div>
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Una mirada a la exposici\u00f3n con \u201cBeechtown\u201d de Stephan M\u00f6rsch de 2018 a 2023.<\/h2>\n

Moritz Bernoully<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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\"Asentamiento <\/div>
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Asentamiento de casas en los \u00e1rboles en el bosque de Hambach, una zona forestal ocupada desde 2012 en el l\u00edmite de la mina a cielo abierto de Hambach. A lo largo de los a\u00f1os se han construido all\u00ed elaboradas estructuras con puentes colgantes, paneles solares y estufas de calefacci\u00f3n. Despu\u00e9s de un desalojo en 2018, surgi\u00f3 una nueva generaci\u00f3n de casas en los \u00e1rboles interconectadas.<\/h2>\n

Tim Wagner<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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La muestra es una coproducci\u00f3n del DAM y el Museo de Artes Aplicadas de Viena, donde se mostrar\u00e1 a continuaci\u00f3n. El equipo curador que rodea a Oliver Elser se ha esforzado mucho. Un cat\u00e1logo biling\u00fce re\u00fane los t\u00e9rminos m\u00e1s importantes, desde la A para barreras hasta la Z para desobediencia civil, en un pr\u00e1ctico l\u00e9xico en el que se pueden consultar los detalles de esta impresionante investigaci\u00f3n en texto e im\u00e1genes.<\/p>\n

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Cronolog\u00eda desde 1830<\/strong><\/span><\/h2>\n

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La exposici\u00f3n muestra un amplio espectro de protestas, que van desde la lucha pol\u00edtica por la supervivencia de una democracia hasta acontecimientos sociales por una mayor conservaci\u00f3n de la naturaleza. Y eso va desde lo pac\u00edfico hasta lo b\u00e9lico. El uso de la violencia es una cuesti\u00f3n central, tanto por parte de los manifestantes como de la polic\u00eda. Cuanto mayor es la disposici\u00f3n a utilizar la violencia, m\u00e1s se convierte la arquitectura en un baluarte. Sin embargo, la mayor\u00eda de las veces se trata simplemente de bloquear un espacio p\u00fablico durante el mayor tiempo posible. El programa llama a esta t\u00e1ctica \u00abarquitectura de retraso\u00bb.<\/p>\n

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Una cronolog\u00eda muestra los movimientos de protesta m\u00e1s importantes desde la Revoluci\u00f3n de julio de 1830 en Par\u00eds. Los ejemplos van desde los bloqueos de camioneros en Ottawa hasta los flash mobs en las calles de Myanmar. En los pa\u00edses de habla alemana, la arquitectura de protesta est\u00e1 estrechamente ligada a la protecci\u00f3n del medio ambiente, especialmente el movimiento antinuclear, que se convirti\u00f3 en un acontecimiento medi\u00e1tico en Gorleben en 1980. Suiza est\u00e1 representada por los disturbios en la \u00f3pera de 1980, durante los cuales se construy\u00f3 una \u201caldea ca\u00f3tica\u201d en el Sihl. La urbanizaci\u00f3n aut\u00f3noma de izquierdas Zaffaraya se construy\u00f3 en Berna en 1985 y todav\u00eda existe.<\/p>\n

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\"Dos <\/div>
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Dos residentes del \u201cVillage 1004\u201d en Gorleben se ba\u00f1an el domingo en el campamento de caba\u00f1as. El agua del ba\u00f1o se calentaba con un peque\u00f1o fuego debajo de la ba\u00f1era.<\/h2>\n

Hans Hermann M\u00fcller<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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\"Arquitectura <\/div>
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Arquitectura sin arquitectos: chozas hechas por ellos mismos, telas tendidas, torres improvisadas.<\/h2>\n

Moritz Bernoully<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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La rese\u00f1a hist\u00f3rica es completa pero no exhaustiva. Por ejemplo, las manifestaciones contra el SIDA que pasaron a la historia del dise\u00f1o con los edredones hechos por ellos mismos no se celebran en Estados Unidos. Tampoco hay ejemplos actuales que superen los l\u00edmites de la protesta f\u00edsica. Por ejemplo, la ocupaci\u00f3n en Seattle durante las manifestaciones del BLM, donde varias manzanas se convirtieron en una zona sin ley. Tampoco hay ninguna pintura manchada de Vincent van Gogh colgada en la exposici\u00f3n.<\/p>\n

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Prefabricaci\u00f3n y profesionalizaci\u00f3n<\/strong><\/span><\/h2>\n

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Por ut\u00f3picas que sean algunas de las demandas de los manifestantes, sus interpretaciones son igualmente pragm\u00e1ticas. Son arquitecturas sin arquitectos, como dijo una vez Bernard Rudofsky: chozas hechas por uno mismo, telas tendidas, torres improvisadas. Definitivamente hay expertos involucrados. Ya en 1849, durante el Levantamiento de Mayo en Dresde, Gottfried Semper dio instrucciones de reforzar las barricadas que m\u00e1s tarde llevar\u00edan su nombre.<\/p>\n

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Desde entonces, la arquitectura de protesta se ha profesionalizado. En la Marcha de los Pobres de 1968 en Washington DC, se construyeron viviendas temporales con marcos de madera prefabricados dise\u00f1ados por arquitectos. El sitio de las carpas para las manifestaciones \u201cPovo Sem Medo\u201d de 2018 en S\u00e3o Paulo sigue una estructura regular porque est\u00e1n planificadas con anticipaci\u00f3n y, por lo tanto, ponen en perspectiva la imagen rom\u00e1ntica de la autoorganizaci\u00f3n.<\/p>\n

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\"Casas <\/div>
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Casas con estructura en A de dise\u00f1o diferente en Resurrection City, Washington, DC, 1968.<\/h2>\n

Marion S. Trikosko<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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\"La <\/div>
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La exposici\u00f3n muestra elementos de la caja de herramientas de los manifestantes para una ocupaci\u00f3n.<\/h2>\n

Moritz Bernoully<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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Adem\u00e1s del conocimiento estructural, aumenta el sentido de misi\u00f3n. Gracias a las redes sociales se puede conseguir el m\u00e1ximo impacto en Internet con la m\u00ednima intervenci\u00f3n en la sala. Esto simplifica la participaci\u00f3n, pero tambi\u00e9n influye en la legitimidad democr\u00e1tica: mientras que antes un movimiento ten\u00eda que movilizar a miles de personas para ser escuchado, hoy, gracias al eco de Twitter, bastan unas pocas personas.<\/p>\n

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\u00abLas protestas tienen que ser disruptivas, de lo contrario ser\u00edan ineficaces\u00bb, dice en la introducci\u00f3n. El DAM ha domesticado el factor perturbador y lo ha llevado al museo. \u00c9l mismo pertenece al establishment cultural. Durante las protestas de 2014, el Museo Maidan de Kiev recogi\u00f3 coladores de pasta y otros utensilios que los manifestantes utilizaban para protegerse de la violencia estatal.<\/p>\n

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Si los movimientos de protesta tienen especial \u00e9xito, sus propios objetos pueden convertirse en fetiches. Los emblemas de Occupy Wall Street se venden ahora a precios elevados en el mercado del arte y, por lo tanto, se han convertido en parte de los excesos capitalistas que critican.<\/p>\n

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todo es arquitectura<\/strong><\/span><\/h2>\n

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El museo presenta una muestra diversa e importante que ilumina en detalle un tema relevante a trav\u00e9s de la arquitectura. Una exposici\u00f3n de arquitectura puede ser muy pol\u00edtica y de actualidad, aunque el t\u00e9rmino se est\u00e1 ampliando ampliamente. Pero como dijo una vez Hans Hollein: \u201cTodo es arquitectura\u201d. Aunque la atenci\u00f3n se centra en la construcci\u00f3n, la exposici\u00f3n gira en \u00faltima instancia en torno a cuestiones sociales que han dominado el discurso arquitect\u00f3nico durante varios a\u00f1os, incluso en la Bienal de Venecia de este a\u00f1o.<\/p>\n

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\"Textos <\/div>
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Textos y fotograf\u00edas cuelgan torcidos de las tablas, que parecen caba\u00f1as improvisadas.<\/h2>\n

Moritz Bernoully<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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\"Occupy <\/div>
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Occupy Wall Street, Nueva York, 2011: Manifestantes en el parque Zuccotti cubierto de nieve, una plaza en el centro financiero de Manhattan. El campamento de protesta ocup\u00f3 el parque durante nueve semanas y provoc\u00f3 un movimiento de protesta mundial junto con muchos otros campamentos.<\/h2>\n

David Shankbone<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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Los objetos y estructuras originales, as\u00ed como las fotograf\u00edas period\u00edsticas, hacen tangible el tema. Los carteles cuelgan torcidos y torcidos sobre las tablas, que parecen caba\u00f1as improvisadas. Los bocetos trazan meticulosamente los tipos de edificios e ilustran la complejidad. Una pel\u00edcula de Oliver Hardt muestra las operaciones de desalojo en las que las personas arriesgan sus vidas. Algunos de los modelos detallados de las chozas y ciudades de tiendas de campa\u00f1a, por otro lado, amenazan con trivializar el tema, a veces brutal, incluso si lo transmiten de manera particularmente clara.<\/p>\n

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\u00bfA qui\u00e9n pertenece la habitaci\u00f3n? La exposici\u00f3n plantea una cuesti\u00f3n fundamental de planificaci\u00f3n, aunque s\u00f3lo toca de pasada los aspectos legales. Deja claro lo importante que sigue siendo el espacio f\u00edsico en la era digital. Las im\u00e1genes del Maidan asediado o del Par\u00eds en llamas dieron la vuelta al mundo. Las ciudades necesitan espacios p\u00fablicos que sean de todos. Y que tienen un efecto simb\u00f3lico. No es lo mismo manifestarse en la Bundesplatz de Berna o en la Turbinenplatz de Zurich.<\/p>\n

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Los objetos simples a menudo se convierten en s\u00edmbolos de una protesta. Por ejemplo, los paraguas que utilizaron los manifestantes en Hong Kong para protegerse de las c\u00e1maras de vigilancia. En Viena, un edificio con forma de pir\u00e1mide se convirti\u00f3 en un s\u00edmbolo ic\u00f3nico del movimiento que quiere salvar una zona de llanura aluvial de la destrucci\u00f3n causada por una v\u00eda de acceso a la autopista. La geometr\u00eda reconocible hace de la arquitectura el portador ideal del mensaje de protesta.<\/p>\n

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\"Vista <\/div>
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Vista de la exposici\u00f3n con la maqueta reconstruida de un campamento de protesta.<\/h2>\n

Moritz Bernoully<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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\"La <\/div>
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La rotonda con la gran escultura de la perla fue el centro del conflicto de un mes de duraci\u00f3n en Bahr\u00e9in en 2011, que comenz\u00f3 como una reacci\u00f3n local a los acontecimientos de la Primavera \u00c1rabe en T\u00fanez y Egipto.<\/h2>\n

Bahr\u00e9in Viewbook<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n

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Museo Alem\u00e1n de Arquitectura Ostende, Frankfurt am Main. Hasta el 14 de enero de 2024. Publicaci\u00f3n. \u00abArquitectura de protesta: barricadas, campamentos, t\u00e1cticas expansivas 1830-2023\u00bb. 528 p., Libros del Parque 2023, 19 euros.<\/p>\n

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