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Lo que sucede a continuaci\u00f3n muestra las habilidades de Rugna como creadora de miedo.<\/p>\n
Mientras Pedro y Sabrina se gritan el uno al otro, y el marido de Sabrina habla por tel\u00e9fono mientras intenta calmar la situaci\u00f3n, Rugna sigue llev\u00e1ndonos de regreso a una habitaci\u00f3n contigua donde la peque\u00f1a Vicky primero juega y luego se sienta junto al querido canino de la familia (un fornido Dogo de Burdeos). Nadie le presta atenci\u00f3n a Vicky ni al perro, y la c\u00e1mara nos asegura que algo terrible suceder\u00e1.<\/p>\n
El insoportable juego de espera genera suspenso (hay m\u00e1s en el clip de arriba). Sabemos que algo terrible est\u00e1 a punto de suceder y estamos bastante seguros de que tambi\u00e9n sabemos lo que suceder\u00e1, pero Rugna nos hace contener la respiraci\u00f3n con impaciencia hasta que la anticipaci\u00f3n casi nos mata.<\/p>\n
El susto es la peor pesadilla de cualquier padre o due\u00f1o de un perro. La inocente Vicky est\u00e1 tranquilamente sentada all\u00ed, casi a la misma altura que el enorme perro, y luego sale de la nada con ferocidad animal. Se olvida la domesticaci\u00f3n. El perro pose\u00eddo act\u00faa seg\u00fan sus instintos salvajes y ataca a Vicky debajo de la mesa del comedor. El hermano de Vicky, Santino (Marcelo Michinaux), se acerca horrorizado mientras observa al perro azotar a Vicky como si fuera un juguete para masticar, una imagen morbosa que es dif\u00edcil de olvidar.<\/p>\n<\/p><\/div>\n