Adem\u00e1s de los proyectiles asignados a los Himar, Estados Unidos anunci\u00f3 el env\u00edo de 75.000 proyectiles nuevos de 155 mm, que complementar\u00e1n las entregas estadounidenses anteriores de 486.000 proyectiles del mismo calibre. Estos proyectiles est\u00e1n destinados principalmente a los 126 ca\u00f1ones M777 suministrados por Washington desde el inicio del conflicto y considerados imprescindibles en la guerra de artiller\u00eda en la que rusos y ucranianos se han enfrascado desde hace meses. Washington tambi\u00e9n prometi\u00f3 veinte morteros de 120 mm (acompa\u00f1ados de 20.000 proyectiles) y 1.000 misiles antitanque Javelin port\u00e1tiles (se hab\u00edan entregado 6.500 anteriormente).<\/p>\n
El Pent\u00e1gono tambi\u00e9n anunci\u00f3 por primera vez la entrega \u00abmisiles anti-radar\u00bb<\/em> para equipar los aviones de la Fuerza A\u00e9rea de Ucrania, sin especificar su n\u00famero ni su naturaleza. Seg\u00fan expertos militares, se tratar\u00eda del AGM-88 High Speed \u200b\u200bAnti-Radiation Missile (HARM), un proyectil fabricado por la estadounidense Raytheon capaz de detectar y destruir los radares de las bater\u00edas de defensa antia\u00e9rea, en particular las famosas rusas. S-300 y S-400, hasta m\u00e1s de 100 kil\u00f3metros de distancia. Los AGM-88 tambi\u00e9n pueden apuntar a los radares de contrabater\u00eda enemigos, esenciales en la guerra de artiller\u00eda.<\/p>\nTe queda por leer el 38,56% de este art\u00edculo. Lo siguiente es solo para suscriptores.<\/strong><\/p>\n<\/p><\/div>\n