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Seg\u00fan las autoridades, el incendio provoc\u00f3 once heridos leves entre los bomberos. Un camping y una playa fluvial fueron evacuados el mi\u00e9rcoles y un total de 26 personas fueron desplazadas temporalmente de sus hogares y dos segundas residencias sufrieron da\u00f1os. En el vecino pueblo de Verdelhos, afectado por el incendio del martes, los habitantes vivieron all\u00ed momentos de p\u00e1nico. \u00abEl fuego ven\u00eda de todos lados. Parec\u00eda que se iba a tragar a Verdelhos. Fue horrible\u00bb.<\/em>recuerda Sandra Marcelino, due\u00f1a de un caf\u00e9 de 43 a\u00f1os.<\/p>\n Como ella, muchos vecinos del lugar se mostraron muy cr\u00edticos con el mando de protecci\u00f3n civil por no haber podido evitar la propagaci\u00f3n del fuego en la monta\u00f1a m\u00e1s alta de la pen\u00ednsula portuguesa, que culmina a unos 2.000 metros. El alcalde de Manteigas, Flavio Massano, tambi\u00e9n critic\u00f3 a los servicios de salvamento, acus\u00e1ndolos de haber concentrado sus esfuerzos en la protecci\u00f3n de las zonas por donde pas\u00f3 este fin de semana la Vuelta Ciclista a Portugal, en detrimento del bosque. En un comunicado de prensa, el Ministerio del Interior reconoci\u00f3 que habr\u00eda que analizar la gesti\u00f3n de operaciones. <\/p>\n<\/div>\n