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Recientemente se ha cultivado arroz h\u00famedo en la Suiza alemana. Con \u00e9xito, porque de ello no s\u00f3lo se beneficia la agricultura, sino tambi\u00e9n el medio ambiente.<\/p>\n
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Cultivo de arroz en Haut-Vully, en el cant\u00f3n de Friburgo (foto tomada en agosto de 2019).<\/h2>\n Jean-Christophe Bott \/ Keystone<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n
No puedes saberlo mir\u00e1ndolos. Las plantas de arroz parecen bastante discretas, como la mayor\u00eda de las hierbas dulces. Pero la primera impresi\u00f3n es muy enga\u00f1osa. Oryza sativa<\/em>El arroz asi\u00e1tico es una de las plantas cultivadas m\u00e1s antiguas y actualmente es el tercer cultivo m\u00e1s importante del mundo en t\u00e9rminos de volumen de producci\u00f3n. Cientos de millones de personas viven de ello. En Asia, los arrozales, los \u201carrozales\u201d, dan forma a paisajes culturales enteros. El grano blanco se cultiva desde hace mucho tiempo en Am\u00e9rica del Norte, Brasil y el valle italiano del Po. Y ahora tambi\u00e9n en el Mittelland suizo.<\/p>\n <\/p>\n
Esto puede parecer una broma: \u00bfarroz suizo? Pero s\u00ed, realmente existe. En 2017, un equipo de expertos del instituto de investigaci\u00f3n Agroscope llev\u00f3 a cabo las primeras pruebas en Grenchen Witi, una zona de protecci\u00f3n agr\u00edcola cerca de Solothurn. Los cient\u00edficos sembraron y plantaron arroz en tierras agr\u00edcolas temporalmente inundadas.<\/p>\n
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El cambio clim\u00e1tico ya est\u00e1 modificando las condiciones marco de la econom\u00eda agr\u00edcola. Adem\u00e1s del aumento de las temperaturas, tambi\u00e9n est\u00e1n aumentando las fuertes lluvias y los per\u00edodos secos. Los agricultores tienen que adaptarse a esto. Quiz\u00e1s, pensaron los investigadores, cultivar el llamado arroz h\u00famedo ser\u00eda una opci\u00f3n.<\/p>\n
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Adem\u00e1s, los expertos de Agroscope quer\u00edan investigar el potencial de los campos (re)humedecidos para la conservaci\u00f3n de la naturaleza. Los arrozales podr\u00edan servir como biotopos h\u00famedos, explica la directora del proyecto Yvonne Fabian. \u00abEl cultivo de arroz h\u00famedo es una oportunidad \u00fanica para combinar la producci\u00f3n y la promoci\u00f3n de la biodiversidad en un \u00e1rea\u00bb.<\/p>\n
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Los agricultores cosechan cuatro toneladas por hect\u00e1rea<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
El experimento en Grenchen Witi fue un \u00e9xito. El equipo prob\u00f3 varios procedimientos. El arroz prosper\u00f3 mejor cuando las plantas se cultivaron como pl\u00e1ntulas en el invernadero y se plantaron en el campo previamente inundado a principios de mayo. La siembra directa en el campo no dio buenos resultados. La cosecha estuvo madura a finales de agosto. El rendimiento se extrapol\u00f3 a unos 1.300 kilos por hect\u00e1rea. Un resultado alentador.<\/p>\n
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\u00abDespu\u00e9s de esta primera prueba piloto, cada vez m\u00e1s agricultores decidieron cultivar arroz h\u00famedo\u00bb, afirma Yvonne Fabian. Actualmente, 13 empresas producen aut\u00e9ntico arroz mediterr\u00e1neo en una superficie total de 18,4 hect\u00e1reas. De media se cosechan unas cuatro toneladas por hect\u00e1rea. \u00abLos agricultores est\u00e1n muy contentos\u00bb, afirma Fabi\u00e1n.<\/p>\n
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L\u00e9andre Guillod es uno de ellos. Este agr\u00f3nomo cualificado dirige junto con su hermano Maxime una granja de hortalizas en el Mont Vully, cerca del lago de Neuch\u00e2tel. Los dos llegaron al arroz m\u00e1s o menos por casualidad. Los Guillod utilizan una t\u00e9cnica de nivelaci\u00f3n del suelo \u00fanica en Suiza y Agroscope les ha encargado preparar m\u00e1s arrozales de prueba.<\/p>\n
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\u00abCuando se cultiva arroz h\u00famedo, los campos deben ser perfectamente planos\u00bb, explica L\u00e9andre Guillod. De lo contrario no conseguir\u00e1s un nivel de agua uniforme. Al plantar en primavera, el nivel s\u00f3lo debe ser de dos o tres cent\u00edmetros, subraya el especialista. \u00abEsto es agricultura de precisi\u00f3n\u00bb. Si el nivel del agua es m\u00e1s alto, las pl\u00e1ntulas f\u00e1cilmente pierden el equilibrio y se alejan nadando. Posteriormente, a medida que las plantas crecen, se va aumentando gradualmente el nivel hasta los 15 cent\u00edmetros.<\/p>\n
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El arroz es la planta cultivada m\u00e1s antigua y actualmente el tercer cultivo m\u00e1s importante del mundo.<\/h2>\n Pongsak Sapakdee\/Getty<\/span><\/p>\n<\/div>\n<\/figcaption><\/figure>\n <\/p>\n
Inundar los campos ofrece a los agricultores varias ventajas. Adem\u00e1s del suministro de agua siempre seguro, el agua tambi\u00e9n ayuda a controlar el crecimiento silvestre. La mayor\u00eda de las semillas de malezas no pueden germinar bajo el agua debido a la falta de ox\u00edgeno. Otro aspecto importante es el impacto sobre el microclima, como explica L\u00e9andre Guillod. El agua almacena calor y favorece as\u00ed el crecimiento de las plantas de arroz. Sus flores tambi\u00e9n son sensibles al fr\u00edo.<\/p>\n
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Si la temperatura cae por debajo de los 10 grados durante la formaci\u00f3n de las pan\u00edculas, r\u00e1pidamente se vuelven est\u00e9riles. Esto definitivamente puede suceder en las frescas noches de julio. Pero el agua m\u00e1s c\u00e1lida debajo de ellos protege las inflorescencias de los golpes de fr\u00edo. Por cierto, el arroz tambi\u00e9n puede prosperar en campos secos. Pero esto requiere un clima m\u00e1s templado, explica el agr\u00f3nomo, como en el Tesino, donde desde 1997 se cultiva el \u00abriso nostrano ticinese\u00bb en el lago Mayor.<\/p>\n
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Los investigadores de Agroscope han registrado los beneficios del cultivo de arroz h\u00famedo para la naturaleza local mediante inspecciones sistem\u00e1ticas. Los campos aparentemente atraen a muchas especies animales. Los expertos pudieron identificar un total de 36 especies diferentes de lib\u00e9lulas, cinco de las cuales est\u00e1n en la lista roja de este pa\u00eds. Los nuevos humedales tambi\u00e9n son interesantes para los anfibios. Ranas verdes del g\u00e9nero. Pelofilax<\/em> y las ranas arbor\u00edcolas los utilizan en gran n\u00famero como caldo de cultivo; Tambi\u00e9n se encontraron sapos comunes, tritones de cola de hilo y sapos corredores.<\/p>\n <\/p>\n
Las agachadizas se comen el arroz que sobra<\/span><\/h2>\n <\/p>\n
Tambi\u00e9n hay observaciones interesantes entre las aves. Llama la atenci\u00f3n, entre otras cosas, la aparici\u00f3n regular de agachadizas, una especie de agachadiza amenazada de extinci\u00f3n en Suiza. Los t\u00edmidos animales aprecian la rica variedad de invertebrados acu\u00e1ticos y tambi\u00e9n les gusta comer los granos de arroz que quedan despu\u00e9s de la cosecha.<\/p>\n
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La avefr\u00eda, otra ave de pradera en peligro de extinci\u00f3n, incluso se reprodujo en los arrozales del Mediterr\u00e1neo en 2023, pero antes de las inundaciones anuales. \u201cAhora se est\u00e1 intentando crear islas especiales para avefr\u00edas\u201d, explica Yvonne Fabian. Estas acumulaciones de tierra tienen como objetivo proteger las nidadas y los pichones de los zorros hambrientos. No les gusta mojarse los pies.<\/p>\n
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Mientras tanto, la colega de Fabian, Chlo\u00e9 W\u00fcst, sigue tras la pista de otra ventaja del cultivo de arroz h\u00famedo. En gran parte de Europa, incluida Suiza, las turberas han sido drenadas en el pasado en beneficio de la agricultura. Esto da\u00f1a el clima global. Los suelos de turba se componen predominantemente de material vegetal, que a menudo se ha acumulado durante muchos siglos. Estaba bien conservado en un ambiente h\u00famedo y en gran parte libre de ox\u00edgeno. Sin embargo, debido al drenaje, la sustancia org\u00e1nica queda expuesta a la entrada de aire y, por tanto, a una degradaci\u00f3n microbiana. Esto libera CO2<\/sub> m\u00e1s norte2<\/sub>Oh libre en masas. La rehumidificaci\u00f3n detiene estas emisiones perjudiciales para el clima, como explica W\u00fcst.<\/p>\n <\/p>\n