{"id":889435,"date":"2023-11-17T18:46:50","date_gmt":"2023-11-17T18:46:50","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/sacame-del-chat-grupal\/"},"modified":"2023-11-17T18:46:54","modified_gmt":"2023-11-17T18:46:54","slug":"sacame-del-chat-grupal","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/sacame-del-chat-grupal\/","title":{"rendered":"S\u00e1came del chat grupal"},"content":{"rendered":"


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\n Foto-Ilustraci\u00f3n: El Corte; Fotos: Getty<\/span>\n <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n

El d\u00eda que Hamas atac\u00f3 a Israel, Jacob, un trabajador jud\u00edo de un caf\u00e9 en Nueva York, revis\u00f3 su tel\u00e9fono y descubri\u00f3 que el chat de su grupo familiar estaba inundado. Su primo Daniel estaba atrapado en Jerusal\u00e9n y los diez familiares en el hilo de texto estaban preocupados. R\u00e1pidamente, los mensajes dieron un giro desagradable. \u201cBombardeo en alfombra para devolver Gaza a la Edad de Piedra\u201d, dispar\u00f3 Daniel. La hermana de Jacob respondi\u00f3: \u00abPensar que este no es el chat grupal para decir cosas as\u00ed\u00bb. Luego, su padre envi\u00f3 un mensaje de texto por separado a Jacob y su hermana, anim\u00e1ndolos a moderarse, pero Jacob \u00abquer\u00eda recibir una palmada en respuesta\u00bb, dice. Envalentonado por un martini espresso, le dio a Daniel un verdadero golpe de gracia: \u201cEstoy tan feliz por ti que est\u00e1s disfrutando de tu defensa xen\u00f3foba de un estado literal de apartheid. Pero de ahora en adelante, te agradecer\u00eda que pudieras mantener las tonter\u00edas racistas fuera del chat del grupo familiar. \u00a1\u00a1Gracias!! \ud83d\ude18.\u201d Luego apag\u00f3 su tel\u00e9fono por la noche.<\/p>\n

Desde el 7 de octubre, los chats grupales en todo el pa\u00eds se han transformado en pesadillas de cenas de Acci\u00f3n de Gracias, convirti\u00e9ndose en zonas de tensi\u00f3n y abierta hostilidad. Y parece que ning\u00fan chat grupal se ha vuelto m\u00e1s conciso que el que existe entre jud\u00edos antisionistas y sus amigos y familiares que esperan que defiendan a Israel. Todas las personas con las que habl\u00e9 dijeron que estos idas y venidas combativos han envenenado esas mismas relaciones fuera de l\u00ednea, y todos solicitaron el anonimato.<\/p>\n

Durante m\u00e1s de 15 a\u00f1os, Leah, una mujer jud\u00eda de Canad\u00e1, ha estado en un hilo de mensajes de texto con un peque\u00f1o grupo de amigos de la escuela secundaria. Lo usan para chismear sobre amigos en com\u00fan, quejarse de sus hemorroides y compartir videos de sus hijos. Pero Leah es antisionista, y los dem\u00e1s miembros del grupo, que tambi\u00e9n son jud\u00edos,<\/strong> no lo son. Aunque durante la primera semana despu\u00e9s del ataque, el grupo hizo un esfuerzo concertado para evitar el tema por completo, las cosas salieron mal despu\u00e9s del supuesto \u00abD\u00eda Mundial de la Jihad\u00bb. En el chat, Leah sugiri\u00f3 sutilmente que sus amigos estaban siendo demasiado cautelosos al mantener a sus hijos en casa y no ir a la escuela, y uno de los otros miembros respondi\u00f3 con un enlace a un art\u00edculo sobre un profesor de franc\u00e9s que fue asesinado a pu\u00f1aladas por un islamista ruso. Luego, los miembros del grupo vieron las publicaciones de Leah en Instagram a favor de Palestina y las cosas cambiaron: una amiga charl\u00f3 con ella para decirle que necesitaba quitarle espacio a la amistad; otro le escribi\u00f3 para sugerirle que simplemente podr\u00eda \u201cfingir amar a Israel\u201d para mantener la paz. Las cosas se pusieron tan desagradables que Leah decidi\u00f3 retirarse de un viaje grupal a Florida, momento en el que la conversaci\u00f3n qued\u00f3 en silencio. Cuando Leah dese\u00f3 a sus amigos unas buenas vacaciones dos semanas despu\u00e9s, los otros tres simplemente escucharon el mensaje. \u201cNinguno de ellos dijo siquiera ‘gracias’\u201d, dice. Y nadie ha dicho nada m\u00e1s all\u00ed desde entonces. En cuanto a las amistades en s\u00ed: \u00abRealmente no veo d\u00f3nde van a terminar\u00bb, dice. Otra mujer jud\u00eda antisionista con la que habl\u00e9 dijo que algo similar sucedi\u00f3 en el chat de su grupo universitario despu\u00e9s de que tuvo una pelea con uno de los otros miembros sobre la guerra. En su caso, el chat continu\u00f3, excepto que su amiga la dej\u00f3 fuera, reteniendo me gusta o respuestas a cosas tan benignas como una foto de un gato.<\/p>\n

Otras conversaciones se han vuelto tan dram\u00e1ticas que han llevado a un \u00e9xodo grupal. Hannah, una profesora jud\u00eda de humanidades, utiliza Facebook Messenger para chatear con nueve personas de una organizaci\u00f3n sin fines de lucro que ella cofund\u00f3. Aunque ninguno de ellos se ha conocido en persona, se env\u00edan mensajes de texto a diario. Pero cuando uno de los miembros del grupo envi\u00f3 un enlace a noticias no verificadas sobre beb\u00e9s decapitados en Israel, Hannah pidi\u00f3 a todos que bajaran la velocidad. \u00abTodos estamos emocionados y el ciclo de noticias comienza a ir muy r\u00e1pido\u00bb, escribi\u00f3. Otro miembro del grupo respondi\u00f3 inmediatamente, acusando a Hannah de censura. Y durante las siguientes semanas, cada vez que Hannah expresaba una creciente preocupaci\u00f3n de que los d\u00f3lares de los impuestos estadounidenses estuvieran financiando una masacre, otros la acusaban de desprecio por la vida israel\u00ed. Varias personas cambiaron sus fotos de perfil a \u201cEstoy con Israel\u201d, mientras que ella y una mujer musulmana del grupo cambiaron las suyas en apoyo a un alto el fuego. Las l\u00edneas estaban trazadas. Finalmente, cuatro personas se marcharon simult\u00e1neamente, dejando de ser amigos de Hannah y sus cofundadores al salir. Unos d\u00edas despu\u00e9s, dos m\u00e1s se marcharon, no sin antes escribir que era doloroso ser acusado de apoyar un genocidio. Hannah se sinti\u00f3 mareada. \u201cUna parte de m\u00ed se siente como Estar\u00eda bien no volver a hablar con esta gente.<\/em>,\u00bb ella dice. \u201cTrabajamos muy duro para construir este grupo. Y puf\u201d.<\/p>\n

En otros lugares, la gente ha comenzado a utilizar los chats grupales como meg\u00e1fonos personales. Una ex compa\u00f1era de trabajo me dijo que, de la nada, un conocido la agreg\u00f3 a un hilo de texto y parec\u00eda querer usar el espacio para criticar las opiniones propalestinas. En un bloque de texto, pidi\u00f3 que los miembros del chat dejaran de publicar en las redes sociales \u00fanicamente en apoyo a los habitantes de Gaza y consideraran tanto a los rehenes israel\u00edes como a su familia en Israel. El hilo, una audiencia renuente, estaba irritada. \u00abRealmente odi\u00e9 que estuviera poniendo a todos en apuros para estar de acuerdo con \u00e9l o en desacuerdo y parecer un idiota\u00bb, dice. \u00abSe siente m\u00e1s manipulador porque no se siente fiel a la comunicaci\u00f3n real\u00bb.<\/p>\n

Quiz\u00e1s estos estallidos estaban destinados a ocurrir. El chat grupal siempre se ha prestado a una combinaci\u00f3n peligrosa de pensamiento excesivo e impulso. Todos nos hemos visto afectados por esa temida pared de texto azul, producto del hecho de que el remitente delibera sobre cada elecci\u00f3n de palabra y exige ser escuchado. Pero lo m\u00e1s frecuente es que los hilos de texto se parezcan a juegos, en los que los jugadores superan los chistes, las historias de malos d\u00edas y las selfies de los dem\u00e1s a cambio de jaja y corazones. Este instinto de exhibicionismo es inofensivo cuando lo que est\u00e1 en juego es fr\u00edvolo, pero no es adecuado para afrontar los intensos sentimientos que genera esta guerra. (O sentimientos intensos en general: \u00bfalguna vez has intentado resolver una pelea entre amigos en un chat grupal? \u00a1No lo hagas!) \u201cAlgunas personas procesan r\u00e1pido y expresan lo que piensan muy r\u00e1pido\u201d, dice Hannah. \u00abEsa voz tiende a dominar\u00bb. Las mismas frases necesarias para disipar ese conflicto emocional \u2013 \u201cTe escucho\u201d, \u201cEso suena dif\u00edcil\u201d, \u201cLo siento\u201d \u2013 son un anatema para el impulso bromista de un hilo de texto. Si bien la compasi\u00f3n ya es dif\u00edcil de generar en una conversaci\u00f3n sobre qui\u00e9n importa la humanidad, es especialmente dif\u00edcil en un espacio que se nutre de los mates y las respuestas r\u00e1pidas.<\/p>\n

Adem\u00e1s, detr\u00e1s de la protecci\u00f3n de una pantalla, puede emerger un lado diferente de las personas. Jacob, el trabajador del caf\u00e9, suele ser reacio a los conflictos. Pero mientras discut\u00eda en el chat del grupo familiar, admiti\u00f3 que se convirti\u00f3 en una diva. El hilo de texto parec\u00eda una pelea en una cafeter\u00eda, con todos sus familiares cantando al margen. voy a ganar esto<\/em>recuerda haber pensado. Voy a hacer un puto discurso y debate sobre esto. <\/em>\u00abQuiero mostrar mi buena educaci\u00f3n en artes liberales\u00bb, dice. \u00abQuer\u00eda ser mejor que \u00e9l\u00bb.<\/p>\n

Desde que denunci\u00f3 las \u201ctonter\u00edas racistas\u201d de su primo, las cosas no han hecho m\u00e1s que empeorar. En el hilo de texto se neg\u00f3 a interactuar con las fuentes de noticias que enviaba Daniel, desde lugares como PragerU y TMZ; Daniel calific\u00f3 los art\u00edculos de las Naciones Unidas y de Human Rights Watch como \u201cart\u00edculos de opini\u00f3n\u201d y le dijo a Jacob que era un \u201cjud\u00edo que se odiaba a s\u00ed mismo\u201d. Cuando Jacob dej\u00f3 de responder al chat grupal por frustraci\u00f3n, su primo lo sigui\u00f3 en Instagram y le envi\u00f3 mensajes de texto con preguntas como \u00ab\u00bfPor qu\u00e9 Gaza no libera a los rehenes?\u00bb. \u201cQuiero dejar una cosa perfectamente clara\u201d, respondi\u00f3 Jacob. \u00abSi alguna vez vuelves a llamarme jud\u00edo que se odia a s\u00ed mismo, ya no tendremos una relaci\u00f3n\u00bb. Luego bloque\u00f3 a Daniel.<\/p>\n

Pero despu\u00e9s de que pasaron unas semanas y se tom\u00f3 un tiempo para reflexionar, Jacob sinti\u00f3 un poco m\u00e1s de empat\u00eda por la situaci\u00f3n. Su primo debi\u00f3 haber temido por su vida mientras estaba varado en una zona de guerra. El chat grupal obviamente no era el mejor lugar para una discusi\u00f3n pol\u00edtica tan espinosa, en un momento en el que las emociones de todos estaban a flor de piel. En cambio, decidi\u00f3 reunirse en persona con su padre, su prima y su t\u00eda, con la esperanza de que pudieran conectarse como miembros de la familia y no como avatares pol\u00edticos. Pero esta interacci\u00f3n tambi\u00e9n fue horrible. Daniel anunci\u00f3 que para preservar su relaci\u00f3n, Jacob tendr\u00eda que dejar de publicar sus opiniones en las redes sociales, una concesi\u00f3n que no estaba dispuesto a hacer. La conversaci\u00f3n termin\u00f3 en un tenso estancamiento, y el \u00fanico consuelo de Jacob fue que, a diferencia de los mensajes de texto, no recurri\u00f3 a respuestas ni pullas. \u201cMe hab\u00eda preparado mucho. No ser\u00e1s t\u00fa quien explote. vas a mantener la calma<\/em>,\u00bb \u00e9l dice. Y \u00e9l hizo.<\/p>\n