En caso de que no lo hayas notado, el per\u00edodo previo a las fiestas ha comenzado oficialmente y es la \u00e9poca del a\u00f1o en la que todas las empresas comienzan su asalto implacable a tu suministro de noticias y a tus bandejas de entrada de correo electr\u00f3nico con tanta fantas\u00eda y buen humor como puedan. Si bien para muchos esto es una especie de aluvi\u00f3n no deseado de bonhom\u00eda forzada, ocasionalmente hay algo de marketing navide\u00f1o que provoca una sonrisa genuina. <\/p>\n
En lo que respecta a eso, siempre hemos sido partidarios de la tradici\u00f3n navide\u00f1a del su\u00e9ter feo de Windows, y la buena noticia es que la versi\u00f3n 2023 acaba de lanzarse y, seg\u00fan los est\u00e1ndares de los su\u00e9teres feos, es pr\u00e1cticamente de buen gusto<\/em>. <\/p>\n M\u00edralo. La majestad. La nostalgia. La ola de buena voluntad y sentimiento que te inunda al recordar una \u00e9poca m\u00e1s sencilla, cuando las barras de tareas eran azules, Windows ten\u00eda un esquema de nombres sensato y los fondos de pantalla predeterminados del escritorio eran lo que te daba una abrumadora sensaci\u00f3n de calma. Windows XP estuvo aqu\u00ed. Todo iba a estar bien.<\/p>\n