{"id":912848,"date":"2023-12-04T17:53:09","date_gmt":"2023-12-04T17:53:09","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/un-perro-se-perdio-en-chinatown-la-ciudad-se-unio-para-encontrarlo\/"},"modified":"2023-12-04T17:53:13","modified_gmt":"2023-12-04T17:53:13","slug":"un-perro-se-perdio-en-chinatown-la-ciudad-se-unio-para-encontrarlo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/un-perro-se-perdio-en-chinatown-la-ciudad-se-unio-para-encontrarlo\/","title":{"rendered":"Un perro se perdi\u00f3 en Chinatown. La ciudad se uni\u00f3 para encontrarlo."},"content":{"rendered":"


\n<\/p>\n

\n
\n
\n <\/picture>\n <\/div>\n<\/p><\/div>\n

Un domingo del invierno pasado, Peter Fisher decidi\u00f3 llevar a su boykin spaniel de un a\u00f1o y medio llamado Waylon a dar un largo paseo por el puente de Manhattan. A menudo hac\u00edan este viaje a la casa de la novia de Fisher, Olivia McCausland, en Chinatown. Waylon sali\u00f3 de su casa en Carroll Gardens con su buen humor habitual, con el pelo esponjoso ondeando con la brisa mientras caminaba por el camino hacia Manhattan.<\/p>\n

Waylon nunca antes se hab\u00eda fijado en el templo budista Mahayana, custodiado en su entrada por un par de imponentes leones de piedra, justo despu\u00e9s del puente. Pero ese d\u00eda vio las estatuas y, dice Fisher, se qued\u00f3 paralizado: \u201cSu peque\u00f1o cerebro animal dec\u00eda: \u00a1Alerta de depredador! Estamos a punto de ser comidos.<\/em>Para empeorar las cosas, alguien empez\u00f3 a cantar a trav\u00e9s de un meg\u00e1fono junto a uno de los leones. Lo siguiente que supo Fisher fue que Waylon se hab\u00eda deslizado el cuello: \u00abSu cabeza lo atraves\u00f3 y luego cruz\u00f3 corriendo Canal Street y los carriles de tr\u00e1fico donde todos entran y salen del puente\u00bb.<\/p>\n

\n
\n

Razones para amar
Nueva York ahora mismo<\/h2>\n

\n
\n

\"paquete-tabla-de-contenido-foto\"\/<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n

<\/p>\n

Ver todo
\n
\n
\n<\/p>\n\n\n<\/svg><\/p>\n

<\/span>
\n<\/section>\n

Waylon corri\u00f3 por Bowery, lejos del ruido, lejos de los leones, con Fisher persigui\u00e9ndolo. Los transe\u00fantes se unieron a ellos, y un hombre lleg\u00f3 incluso a correr junto a Fisher. Justo cuando Waylon cruzaba corriendo la intersecci\u00f3n donde East Broadway llega a Chatham Square, un autom\u00f3vil lo atropell\u00f3.<\/p>\n

\u00abEntonces realmente despeg\u00f3\u00bb, dice Fisher. Desesperado, llam\u00f3 a McCausland. Sali\u00f3 corriendo de su apartamento en pijama y unas zapatillas estilo Crocs de otra marca de las que pronto se arrepentir\u00eda. Juntos, recorrieron el \u00e1rea donde Waylon hab\u00eda sido visto por \u00faltima vez, caminando en c\u00edrculos lo que McCausland estima fue de aproximadamente 26 millas. Sus zapatos se llenaron de sangre; estaba tan llena de adrenalina que apenas se dio cuenta. Trajeron amigos. \u00abHubo como una campa\u00f1a masiva de difusi\u00f3n de informaci\u00f3n\u00bb, dice. \u201cToda mi familia pagaba a estas empresas. B\u00e1sicamente, si pierdes a tu perro, publican en varias cuentas de Facebook diferentes y llaman a todos los refugios y a todos los veterinarios\u201d. Todo estaba cerrado porque era domingo, y algunos estafadores hab\u00edan comenzado a llamar a Fisher afirmando saber el paradero de Waylon y exigi\u00e9ndole que hiciera clic en enlaces incompletos de \u00abverificaci\u00f3n\u00bb.<\/p>\n

Las calles se oscurecieron. Empez\u00f3 a llover y luego a aguanieve. El tel\u00e9fono de Fisher estaba muriendo. Se consolaron con el hecho de que Waylon tiene un microchip, por lo que al menos sus restos ser\u00edan identificables. Fisher jur\u00f3 que pasar\u00eda su vida caminando por las calles buscando a su perro.<\/p>\n

\n
\n
\n
\n <\/picture>\n <\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n

Waylon con Flora Cen en el momento en que se reuni\u00f3 con sus due\u00f1os.<\/p>\n<\/div>\n

Ese mismo d\u00eda, Flora Cen sal\u00eda de una cita con el m\u00e9dico en 128 Mott Street cuando vio a un hermoso perro deambulando sin correa. Ella se acerc\u00f3 a \u00e9l suavemente y lo llam\u00f3 \u00abbeb\u00e9\u00bb. Sosteniendo a Waylon por el cuello porque no ten\u00eda collar, Cen permaneci\u00f3 con \u00e9l bajo la lluvia durante aproximadamente media hora, escaneando el \u00e1rea en busca de posibles due\u00f1os. Lo \u00fanico que vio fueron \u201cancianas chinas\u201d. (La propia Cen es china). Pronto lleg\u00f3 el momento de recoger a sus hijos de su clase de kung fu en el cercano Centro Cultural A&C. Llev\u00f3 a Waylon hasta all\u00ed, lo que no es poca cosa, ya que Cen pesa 114 libras y Waylon mide aproximadamente 40. Sin otras buenas opciones, decidi\u00f3 cargarlo en el auto con su familia y llevarlo de regreso a su casa en 86th Street en Bay Ridge.<\/p>\n

Ella y su hijo le dieron una ducha a Waylon porque estaba mojado y embarrado, lo secaron y lo alimentaron. \u00abCom\u00eda tres veces m\u00e1s que mi propio perro\u00bb, dice Cen. Sus hijos y su esposo buscaban en Facebook. Por la tarde encontraron el puesto remunerado y respondieron.<\/p>\n

\n
\n
\n
\n <\/picture>\n <\/div>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n

Foto de : Hugo Yu<\/span>\n <\/p>\n<\/div>\n

Hab\u00eda algo en esta llamada que no se parec\u00eda a las otras que hab\u00eda recibido Fisher. Cen pudo enviar una foto, aunque incluso eso fue extra\u00f1o. \u201cCasi no pod\u00edamos decir que era \u00e9l. Simplemente ten\u00eda una expresi\u00f3n muy diferente en su rostro y, no s\u00e9, obviamente estaba confundido\u201d, dice Fisher. Corrieron hacia Bay Ridge. \u201cPeter se arrodill\u00f3 despu\u00e9s de que lo atrapamos y Waylon puso sus patas sobre los hombros de Peter a modo de abrazo. Como, Pap\u00e1 lo siento,<\/em>\u201d, dice McCausland. A Cen se le ofreci\u00f3 la recompensa habitual; ella sugiri\u00f3 que hicieran una donaci\u00f3n al Centro Cultural A&C, que hab\u00eda acogido a Waylon brevemente.<\/p>\n

Al d\u00eda siguiente, un veterinario le dio el certificado de buena salud a un coste exorbitante. Finalmente, de regreso a casa, \u201cse desmay\u00f3 inmediatamente y durmi\u00f3 dos d\u00edas\u201d, dice Fisher.<\/p>\n

Cen dice que a veces piensa en Waylon: \u201cEs un buen chico. Muy buen perro, muy leal\u201d.<\/p>\n

Waylon ahora usa un arn\u00e9s para caminar. Todav\u00eda hay algunas cosas que lo asustaron, algunas m\u00e1s f\u00e1ciles de explicar que otras. No le gustan los cruces de peatones, los ruidos fuertes detr\u00e1s de \u00e9l y cierto tipo de autos. El 19 de enero de 2023, Waylon realiz\u00f3 su primer viaje sobre el puente desde su desastrosa aventura. Camin\u00f3 triunfalmente junto a los leones del templo, d\u00e1ndoles s\u00f3lo un breve olfateo de evaluaci\u00f3n. \u2014 Emily Gould<\/em><\/p>\n