{"id":922844,"date":"2023-12-11T19:46:51","date_gmt":"2023-12-11T19:46:51","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-limonero-nos-cuenta-el-coste-cotidiano-del-miedo-para-los-palestinos\/"},"modified":"2023-12-11T19:46:54","modified_gmt":"2023-12-11T19:46:54","slug":"el-limonero-nos-cuenta-el-coste-cotidiano-del-miedo-para-los-palestinos","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/el-limonero-nos-cuenta-el-coste-cotidiano-del-miedo-para-los-palestinos\/","title":{"rendered":"El limonero nos cuenta el coste cotidiano del miedo para los palestinos"},"content":{"rendered":"


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En el drama de 2008 protagonizado Sucesi\u00f3n<\/em>Seg\u00fan Hiam Abbass, las fuerzas del gobierno israel\u00ed declaran un pac\u00edfico limonero \u201cterritorio hostil\u201d.
\n Foto: Colecci\u00f3n IFC Films\/Everett<\/span>\n <\/p>\n<\/p><\/div>\n<\/p><\/div>\n

Una de las im\u00e1genes m\u00e1s emblem\u00e1ticas de la resistencia palestina es una fotograf\u00eda de 2005 de una mujer palestina en la Cisjordania ocupada, llorando mientras se aferra desesperadamente a un olivo, con las ramas cortadas, en un esfuerzo por protegerlo del robo o la destrucci\u00f3n por parte de los palestinos. Soldados israel\u00edes, que permanecen en un jeep militar detr\u00e1s de ella. Las aceitunas, s\u00edmbolo de paz desde hace mucho tiempo, son tambi\u00e9n un salvavidas para los agricultores de subsistencia palestinos y proporcionan ingresos a unas 100.000 familias. M\u00e1s all\u00e1 de eso, los olivos \u2013y todos los \u00e1rboles frutales de Palestina\u2013 proporcionan un v\u00ednculo tangible entre los palestinos, nuestros antepasados \u200b\u200by la tierra. Desde la Guerra de los Seis D\u00edas en 1967, cuando Israel ocup\u00f3 por primera vez Cisjordania y la Franja de Gaza, m\u00e1s de un mill\u00f3n de \u00e1rboles frutales han sido robados o demolidos, aplastando los medios de vida palestinos y los v\u00ednculos ancestrales en el proceso.<\/p>\n

Limonero<\/em> es la encarnaci\u00f3n de la imagen en movimiento de esta fotograf\u00eda.<\/p>\n

Dirigida en 2008 por Eran Rilkis y escrita por Suha Arraf, este conmovedor drama representa <\/strong>la asfixia y el abuso cotidianos de los civiles palestinos que viven bajo la ocupaci\u00f3n israel\u00ed. Est\u00e1 ambientada durante la \u00e9poca de la segunda Intifada (hay un toque de queda y la construcci\u00f3n del muro de separaci\u00f3n de Israel est\u00e1 en marcha) y cuenta la historia de Salma Zidane, una viuda palestina pobre que vive en Cisjordania y cuya casa da directamente a la zona mucho m\u00e1s Casa moderna y elegante del ministro de Defensa israel\u00ed, Israel Navon, y su esposa, Mira. Entre ellos existe un hermoso limonero que plant\u00f3 el difunto padre de Salma, que ella cultiva con la ayuda de Abu Hussam, una figura paterna sustituta que ha ayudado a cuidar tanto de Salma como del huerto desde la muerte de sus padres. Salma, interpretada por la actriz palestina Hiam Abbas, vive de las ganancias de sus limones y cada vez que vienen invitados, les sirve jugo reci\u00e9n exprimido de los frutos de su huerto, lo que todos comentan. Cuando el servicio secreto del Ministro de Defensa considera que la arboleda es una amenaza, un lugar donde los \u201cterroristas\u201d palestinos podr\u00edan esconderse y lanzar granadas, Salma recibe una carta inform\u00e1ndole que ser\u00e1 desarraigada. Lleva el asunto a los tribunales, un caso que lucha con la ayuda de un abogado palestino biling\u00fce hebreo-\u00e1rabe, Ziad, que est\u00e1 dispuesto a hacer el trabajo pro bono. El juez falla a favor del ministro de Defensa. Hasta que la arboleda sea arrancada, estar\u00e1 completamente rodeada por una valla y a Salma se le prohibir\u00e1 entrar. Ella apela la decisi\u00f3n y la lleva hasta el tribunal supremo de Israel.<\/p>\n

A lo largo de la pel\u00edcula, somos testigos de c\u00f3mo el miedo que impregna la sociedad israel\u00ed pesa sobre las vidas y los medios de subsistencia de los palestinos. En la escena inicial, Salma se encuentra en su limonero y mira a trav\u00e9s de alambre de p\u00faas y cercas a los escolares israel\u00edes, que juegan libremente en el lado opuesto de la cerca. A medida que avanza la pel\u00edcula, las medidas de infraestructura de seguridad se vuelven cada vez m\u00e1s estrictas alrededor de la casa del ministro: m\u00e1s alambre de p\u00faas, una torre de vigilancia, c\u00e1maras de seguridad, sensores, soldados armados que sacan sus armas al menor movimiento. Y, sin embargo, a pesar de todo esto, lo que hay que destruir es la arboleda, porque \u00bfy si los francotiradores palestinos se esconden entre los \u00e1rboles? Es una de las cosas m\u00e1s llamativas de la pel\u00edcula: lo absurdo de declarar algo tan hermoso y pac\u00edfico como un limonero \u201cun territorio hostil\u201d y su desarraigo \u201cuna necesidad militar inmediata y absoluta\u201d.<\/p>\n

Los \u00e1rboles comienzan a marchitarse dentro de una valla militarizada mientras el suelo comienza a pudrirse, desnutrido. Salma se cuela para regarlo y recoger limones ca\u00eddos, y casi recibe un disparo cuando un guardia somnoliento se despierta sobresaltado. Incluso cuando el personal de la ministra se aventura en el bosque para llevar algunos limones para una fiesta de inauguraci\u00f3n, a ella no se le permite acercarse a sus \u00e1rboles y es atacada por soldados y servicios secretos. \u00abLos \u00e1rboles son como las personas\u00bb, dice Abu Hussam en su testimonio ante el Tribunal Supremo. \u201cTienen alma. Necesitan un cuidado tierno y amoroso\u201d. La arboleda viene a simbolizar al pueblo palestino, literalmente enjaulado, deterior\u00e1ndose y marchit\u00e1ndose lentamente a medida que su econom\u00eda es estrangulada y hambrienta.<\/p>\n

Es revelador que el propio Riklis sirvi\u00f3 en las FDI durante la Guerra de Yom Kippur de 1973. El director israel\u00ed es consciente de los estragos y la destrucci\u00f3n causados \u200b\u200ben nombre de la autodefensa. No es raro que los soldados de las FDI hablen despu\u00e9s de presenciar de primera mano las condiciones inhumanas e indignas que constituyen la vida diaria de los palestinos en Cisjordania y Gaza (ver El presente<\/em> para una descripci\u00f3n incre\u00edblemente precisa de estas condiciones y la humillaci\u00f3n que acompa\u00f1a a actividades inocuas, como comprar un refrigerador nuevo). En Limonero<\/em>, esta voz de empat\u00eda proviene de la esposa del ministro, Mira. Ella est\u00e1 constantemente mirando a trav\u00e9s de las ventanas de Salma, tratando de parecerse a la mujer que ha sido declarada enemiga. En cada toma desde la perspectiva de Mira, Salma es gentil, tierna y a veces llora. Una vez, Mira trepa la valla y est\u00e1 a punto de llamar a la puerta de Salma cuando agentes del servicio secreto la detienen y le dicen que es peligroso. Las dos mujeres parecen estar experimentando el mismo tipo de soledad, sin embargo, s\u00f3lo se encuentran cara a cara una vez sin ninguna barrera entre ellas. Se paran uno frente al otro, sin decir palabra, e intercambian sonrisas sutiles.<\/p>\n

Al final, la Corte Suprema dictamina no arrancar toda la arboleda de Salma sino podar el 50 por ciento de sus \u00e1rboles hasta 30 cent\u00edmetros. Aunque decepcionado, Ziad considera que el fallo es una peque\u00f1a victoria, ya que sienta un precedente: por primera vez en la historia de Israel, no talar\u00e1 todos los \u00e1rboles, sino que podar\u00e1 la mitad de ellos hasta convertirlos en arbustos. Aun as\u00ed, Salma est\u00e1 destrozada. \u201cSu propuesta me deshonra\u201d, le dice al juez. \u201cMis \u00e1rboles son reales. Mi vida es real. Ya est\u00e1s construyendo un muro a nuestro alrededor. \u00bfNo es suficiente?<\/p>\n

Limonero<\/em> fue una colaboraci\u00f3n entre un director israel\u00ed y un guionista palestino y entre actores palestinos e israel\u00edes, prepar\u00e1ndola para una exploraci\u00f3n de la humanidad que trasciende la identidad, la nacionalidad o la religi\u00f3n. Cuando un lado ha sido tan rutinariamente menospreciado y tergiversado en los medios como lo han sido los palestinos, a menudo se necesita el respaldo y apoyo de otras voces, especialmente las israel\u00edes, para legitimar y validar nuestra lucha. Y a trav\u00e9s del arte, esas voces pueden superar opiniones y prejuicios profundamente arraigados y obligar a la audiencia a ver a una poblaci\u00f3n deshumanizada como seres humanos. Rilkis ha dicho que Palestina es un tema que rara vez se trata honestamente en Israel, y sospecha que la d\u00e9bil recepci\u00f3n que tuvo su pel\u00edcula en casa se debi\u00f3 a la desgana. \u00abCreo que probablemente fue demasiado ‘cercano’ para la mayor\u00eda de los israel\u00edes y toc\u00f3 un tema delicado con el que muchos israel\u00edes se sienten inc\u00f3modos\u00bb, explic\u00f3 Rilkis en una entrevista tres a\u00f1os despu\u00e9s del estreno de la pel\u00edcula. Pero aquellos que han visto la pel\u00edcula, se\u00f1al\u00f3, \u00abrealmente entienden el conflicto humano b\u00e1sico y entienden la situaci\u00f3n b\u00e1sica, que es una lucha por la tierra y una lucha por protegerse a uno mismo de un sistema que est\u00e1 tratando de quitarnos algo\u00bb.<\/p>\n

Una de las escenas m\u00e1s poderosas de la pel\u00edcula llega al final, cuando el ministro de defensa se sienta solo en una sala oscura mientras las persianas se levantan para revelar un muro de concreto, el<\/em> muro, su construcci\u00f3n totalmente realizada. Ahora, en lugar del limonero, el ministro mira a las losas de hormig\u00f3n. La c\u00e1mara se desplaza por encima de la pared y entra en la arboleda de Salma, donde camina entre los arbustos, ilustrando el precio del miedo. \u00bfCu\u00e1ntos limoneros hay que arrancar, cu\u00e1ntas tierras robadas y cu\u00e1ntas casas destruidas, cu\u00e1ntos ni\u00f1os quedan hu\u00e9rfanos y cu\u00e1ntos beb\u00e9s asesinados en sus incubadoras? Limonero<\/em> sugiere que para una potencia ocupante, ninguna cantidad de seguridad har\u00e1 que una fuerza ocupante se sienta m\u00e1s segura, menos asustada y m\u00e1s libre.<\/p>\n<\/p><\/div>\n


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